martes, 4 de septiembre de 2012

Un amatorio desterrado.


Un amatorio desterrado.


En un sueño incierto vislumbra,
contempla a un éter del universo,
ya cuando el fuego alumbra
en dolo de la familia en versos.
 Ella en vestigio una obra toca,
nadie comprende a qué,
solo saben que amor provoca
más hoy al oír el tañer.
 Toca el Emperador,
opus setenta y tres,
tonalidad en mi bemol mayor
ante una etérea lobreguez.
 Entre ensueño le acorrala,
toca con ojos cerrados,
contempla éter en alma
y en sentimiento amohinado.
 Misterio de Regiani formides passionis,
¿dónde está la metáfora?,
puede que sea un ángel o un adonis
y donde muera su alma.

 Regiani formides passionis: Buenas noches realeza,
silencio inicuo oiréis,
no sabréis distinguir la pieza
y ni lenguaje entenderéis.
 Kerfun Donriel: Interpretad, queremos oíros,
entonad aquellos tañeres,
ofreced más en espineta lo bellido
que hoy placerá en creces.
 Amita Pusilla: Trataré de leeros,
aquel espíritu escondido,
no importa si no logró entenderos
porque al final habrá el acertijo.
 Radibus Amita: Vamos, empieza sobrina,
tocad el dócil instrumento,
haced florear a la vida
y al mismo forraje y viento.
 Regiani formides passionis: Vosotros solo os regocijáis,
más alma oscura y paupérrimo destino,
¡oh alma que en verso aflijáis
por no sentir nada sino espino!.

 Entona la esperada obra,
la orquesta en su sueño suena,
más se dan cuenta que hay silencios cuando toca
por no ver la misma orquesta.
 Y como hoy esta misma noche,
cuando fue la obra más poderosa,
ya cuando había buen orbe
antes que terminase muy lacrimosa.
 El sol que acaricia a una flor,
que la flor le espera ansiosa,
donde le besa en el albor
y donde más florece hermosa.
 Donde el sol aparecerá,
donde la flor sentirá amor,
donde la alegría reirá,
y donde sentirá ilusión.
 Todo al cuadro en imagen pintado está,
no se iría del insomnio,
 en frente de sus cejas mirará
aquel mundo loco.
 Donde la realeza le contemplará
y se harán preguntas,
solo ella un antaño vivirá
con la misma obra junta.
 Es hora de que se visione,
mas no todo perdurará,
alentará una de Beethoven
y que les abrazará.

 Kerfun Donriel: Hija de mi alma,
hoy sensibilizáis mi rincón,
¡Oh qué espineta hay en calma!
ante la noche y el amor.
 Amita Pusilla: Qué manera de tocar,
suaviza mi piel con los tonos,
es como si un hombre besase ya
con locura y sin despojo.
 Radibus Amita: ¡Oh hermana así lo es!,
es apasionada la dulce sobrina,
hoy al piano lo hace tañer
entre pasión conseguida.
 Regiani formides passionis: Entre trinos hoy doy al tocar,
con toda pasión al espino,
no sé si es sonrisa o huracán
la agitación de mi torbellino.
 Kerfun Donriel: Qué versos ha dicho,
y con ojos cerrados toca,
solo al empezar siente idilio
por una descripción borrosa.
 Amita Pusilla: No sé que puede ser Kerfun Donriel,
es incierta y confusa,
mirad como se pone su piel
entre la misma locura.
 Radibus Amita: Solo cautiva a una imagen,
pero será que está ahí en vida,
la noche despinta estrellas fugaces
y ennegrece Amita Pusilla?.
 Kerfun Donriel: Me parece que dormida está,
entre su entonar que vive,
se ha quedado en un olvidar
y solo su corazón tiñe.
 Amita Pusilla: Hermana todo cambia,
es como si el piano hiciese maravilla,
ay y si no dice una palabra
ante la locura Radibus Amita?.
 Radibus Amita: Hasta ha dejado de tocar,
hasta me sorprendo en verdad,
hasta solo verla me da miedo ya
y hasta sus manos no dejan de bailar.
 
 Regiani formides passionis (aparte):
 Entre sus palabras preocupadas,
entre mi alma lacrimosa,
hoy cómo llego al aura
si no veo rosas.
 Porque solo ellas acariciaban
con su efigie de boca.

 Orquesta que da entonar, 
míseros los de mi hogar,
orgullosa del sueño estoy.
 Suplicio es el averno,
hoy ya es sempiterno,
 y sola hasta hoy.

 Kerfun Donriel: Sigue callada,
pero su boca bisbisea,
no logro oír una entonada
aunque nadie lo crea.
 Amita Pusilla: Qué dirá nuestra sobrina,
¡oh me parte el alma!,
ya no suena la melodía
y solo anda vesánica.
 Rabidus Amita: Misteriosa se pone,
hasta miedo me da ir ahí,
¿será que se quedará así?
el piano hoy está sin acordes.
 Porque no canta hoy aquí
y ya no es un distinto orbe.
 Kerfun Donriel: Verla sin tocar a mi niña,
porqué rara hoy está,
tan solo quisiera veros distinta
vos ante la noche espectral.
 Amita Pusilla: Parece un fantasma,
entre burla de su semblante,
qué le ha sucedido al ánima
que vive hoy alucinante.217
 Rabidus Amita: Se ha ido a otro mundo,
o a ese cuadro pintado con un amor,
a ¿dónde se ha ido el murmullo
que cantaba hoy aquí en ardor?.
 Kerfun Donriel: Dulce y blanca rosa,
ojos celestes de zafiro,
 aroma de una misma diosa
y alma de sentimiento ambiguo.
 ¿Por qué ha de cambiar tanto?,
 hacedme Deus entender,
¿porqué hoy no tiene encanto?
y sola misteriosa en ser.
 Amita Pusilla: Señor estamos afligidas,
dadnos una señal por favor,
parece tan solo poseída
y sola en su interior.
 Kerfun Donriel: Por más que recuerde no entiendo,
si ayer y siempre fue feliz,
porqué cambió su sentimiento
si se veía tan radiante y de gran vivir.
 Qué sucede vida del destino,
anhelo ver vuelta a mi hija,
haced que venga un suspiro
y eleve a su alma dormida.
 Amita Pusilla: No veis como congojamos,
la sonrisa de ella es magistral,
no así en terror y pasmo
que hoy nos es fatal.
 Radibus Amita: Plegarias si queréis rezamos,
oh Dios os pedimos por favor,
o dadle a un nuevo amado
y que vuelva la luz a su corazón.
 Kerfun Donriel: ¿Amor sería la calma?,
pero ella es solo una divina niña,
no quisiese que formase en nada
hasta que sea su día.
 No quiero que se me vaya
sino mi corazón fuera elegía,
es como si hondase una playa
en tornados a mi vida.
 Amita Pusilla: Pero no es niña,
es una dama ya hecha mujer,
solo hoy anda rara y agria piña
pero va cambiar porque lo sé.
 Radibus Amita: Dejad que él decida,
no os metáis en su derecho,
ahora solo hay que esperar que algo diga
hoy en el mismo instrumento.
 Amita Pusilla: Solo quiero su felicidad,
vos mismo lo dijo,
porque sois ahora bipolar
si decíais que tenga un amorío.415
 Recién toca el piano,
volvió la entonación,
recién respira su hálito
entre toda la explosión.
 Radibus Amita: Porque lo que dice él debe ser,
podré haber dicho algo,
pero lo que ordena es él
y manda en su corazón adorado.
 Kerfun Donriel: No os peléis por favor,
no os quiero ver a vosotras mal,
os lo ruego en el corazón
y vean que ya tocó lo pasional.
 Radibus Amita: es cierto está tocando
volvió nuestra sobrina,
en qué mundo habrá estado
y solo más que dormida.
 Regiani formides passionis:
¡Oh entre notas del piano!,
hoy ha de sonar ya no en silencio,
si tan solo fuera amor blanco
que espada dio al pecho.
 Ciudad en rosas,
aladas para las mujeres,
plectros y rapsodas
dedicadas en creces.
 Mundo equivocado,
no dejar que vuele las alas,
por quemar el desdichado
que apartó las palabras.
 Hombre que vive en su composición,
leo más que un alegrar dandi,
entre noche de férvida pasión
y de una noche más que mártir.
 Kenfur Donriel: Oh hija epicúrea,
oh qué palabras decid,
oh a qué mundo y penuria
tan solo hoy repetís.
 Amita Pusilla: Oh su alma tendida,
notas vuelan más en mil preguntas,
la relación es tan distinta
que no entiendo la partitura.
 Radibus Amita: Muy clandestina como dijo,
hipérbole en metáfora errada,
de qué hablará en lo dicho
de sus delirante cantada.

                    II

 Sigue sonando sin parar,
esta vez va más allá,
el pincel pinta su mundo,
y en el cuadro está,
todo se vuelve más profundo
y su familia silenciará.
 Pero va hacia el mundo nocturno
que en antaño pasó,
donde consume al arrullo
y que luego lo mesto dará visión.

 Ragiani formides passionis: ¡Oh cuadro que miro!,
hacéis que vuele al vetusto hogar,
¡oh qué siento y palpito
mundo no quimérico y pasional.
 Las inundaciones acabaron,
y sin dejar de acariciar las teclas,
estoy de vuelta corazón añorado
para hoy tocaros sin dolencia.
 Verbant Liebe: Hola qué hermosa tocáis el piano,
no habéis dejado de tocar,
me gusta como sois en él manifestando
todo aquello tan sensual.
 Ragiani formides passionis: Sí, estaba tocando,
me gusta veros tan especial,
me halagáis con vuestro traje bizarro
que me dejáis en inquietud por quereros besar.
 Verbant Liebe: Sois tan solo dulce
y hermosa como un rosal,
hoy quiero daros mis inquietudes
que son aquel amor sensorial.
 Regiani formides passionis: Me gusta que estéis aquí,
jamás quiero que os apartéis de mí,
quiero amaros hasta el fin
y que de ahí Dios nos lleve sin morir.
 Verbant Liebe: Lo prometo hoy amor,
que así será por mi corazón que os ama,
por ninguna metáfora doy mi obligación
sino que por el amor que hay en mi alma.
 Regiani formides passionis: Sin detalles y nada,
solo preferís prometeros amor honesto,
el fiel ante este lecho que canta
y ante ángeles en los instrumentos,
que hoy entonan y calman
entre mucho sentimiento.
 Verbant Liebe: Sí mi mujer que esperé,
a la que escribí a un poema,
rogando a Dios a esa doncel
para amarla y quererla.
 A la que tanto lloré,
que sea de mi igual gusto,
que ame a mi querer
que es de la música sin susto.
 Que le guste la rapsódica ópera,
que en eso tan solo sueñe,
que sea su otro yo en la loa
y que de mi no se aleje.
 Regiani formides passionis: Esa soy yo amor,
miradme como hoy toco de felicidad,
mirad qué sentimiento hay hoy
por solo veros hoy en mí amar.
 Os amo tanto mi bardo adonis,
tan sensual y epicúreo ente,
solo vivirá para ti Regiani formides passionis
y que os querrá Verbant Liebe.
 Solo he nacido para un amor,
jamás esperaría otro,
recuerda eso en el corazón
y que no será postro.
 Verbant Liebe: Qué romántica y dulce dama,
por eso que me enamoré de vos,
sois tan dúctil en la sonata
que me enamoráis en dilección.
 Regiani formides passionis: Siempre divina en las sílabas,
siempre seré así en vuestro querer,
siempre colorearé en alegría
todo aquello de eso feligrés.
 Verbant Liebe: Qué ángeles nos acompañan,
hacen bailar a los sonidos,
vos en el piano tan cándida
y yo aquí más que rojizo.
 Ángeles: Sigan en su delirio amado,
esto no es un sueño,
esto es real y mágico
que se vive por dentro.
 Cantamos hoy aquí,
y así siempre va ser,
entre alegría de lo feliz
en todo este anochecer.
 Amor que cuando se ama perdura,
amor noble y sensible,
amor no tiene atadura
sino que esto indecible.
 Regiani formides passionis: Gracias ángeles,
sois muy gentiles,
os agradecemos que aquí acompañen
y que nos sensibilice.
 Verbant Liebe: Igual digo lo mismo,
nos hace sentir muy bien,
vosotros dais tan lirismo
entre todo ese tañer.
 Regiani formides passionis: La noche es hermosa,
amor en verdad es muy lumbroso,
y yo inquieta por un beso de rosa
a que me coma hasta el fondo.
 Verbant Liebe: ¡Ay regiani formides passionis!,
pedís tal anhelo que deseo,
Oh ahora va vuestro dulce  apoteosis
a comeros el dulce y tenue cuerpo.
 Seréis como un vicio eterno,
seréis aquel perfume que no se esfuma,
donde será tentación y en cielo
donde os besaré mi ternura.
 Regiani formides passionis: Tocadme, venid,
espero ansiosa del aroma de hombre,
ando aquí y vesánica por ti
para que vengáis y os asombre.
 Verbant Liebe: ¡Oh tan delirante y apasionada!,
¡oh me incitáis mi carne!,
¡ay siento tal locura extasiada
por ir y devorares.
 Regiani formides passionis: Qué esperáis amor,
ven y come el fruto más tentado,
entra y hazme desear tal ardor
en este mismo piano cantado.
 Verbant Liebe: ¡Oh mi señor gracias!,
¡oh tengo al amor más perfecto!,
gracias por oír mi aria
que pedí hace un viejo tiempo.
 Os beso el cisne cuello amor,
 recorro por los labios tenues de rosas,
os beso con tanta predilección
que siento a una diosa.
 Regiani  formides passionis: No puedo más con tal delirio,
¡oh el piano canta más cuando besáis!,
¡oh la noche es única y de amorío
ante mi piel consumida que acariciáis.
 Verbant Liebe: Aprovechar el momento,
la noche comparte su belleza,
en todo este mundo y universo
sentimos hasta el olor de la naturaleza.
 Pero nada se compara con el cielo
que son tus ojos y piel que embelesa.
 Regiani formides passionis: Todo es tan poético,
todo es tan divino y explosivo,
todo es tan dilecto
que se vive en este aura bendito.
 Verbant Liebe: Todo hoy en la obra despierta,
más que pasión y de terneza acierta,
todo hoy en el piano es amor
más que locura y de la ilusión.
 Regiani Formides passionis: Contigo siempre quiero vivir,
Jesús ten piedad de mi latir.
 Yo soy su gloria.
 Madre María hazme feliz,
¡Oh ave purísima sin cicatriz!
 Él es mi historia.
 Verbant Liebe: Por favor reino celestial,
por favor danos pasión magistral.
 Vivimos enamorados.
 Por favor pedimos en amor,
queremos solo el calor.
 Sentimos lo apasionado.
 Regiani formides passionis: Que nos haya escuchado,
ten por seguro que te amo amor,
hoy me hace feliz amarte tanto
más teniéndoos al dulce primor.
 Verbant liebe: A mí igual bella Regiani
estando tan junto a ti,
respiraros es tan fácil
que harto me hace latir.
 Regiani formides passionis: Sentiros que vivís aquí,
aquí en mi corazón,
saber que dormiréis en mí
eso me hace sentir con salvación.
 Saber que seréis aquel único Dios humano,
que me besará como quiera,
que me hará suya ante sus manos
y que olerá a primavera.
 Verbant Liebe: Siempre daría por vos todo,
vos estaréis en mi alma y mundo,
nadie y ni un diantre vendrá tan postro
para apartar lo profundo.
 Siempre seré el redentor
de la felicidad y la paz,
siempre sonreiréis en amor
por saber que eres mi cantar.
 Regiani formides passionis: Así esté prófuga de mi hogar,
lo único que me calma que estoy contigo,
solo anhelo amaros más
y no volver al abismo.
 Verbant Liebe: Este amor es unión,
árbol será por un gran destino,
diese mi carne ante el horror
por salvarlo ante un inicuo.
  Regiani formides passionis: Gracias por amarme,
gracias por existir en mi naturaleza,
gracias por hoy abrazarme
con vuestra silueta y delicadeza.
 Verbant Liebe: ¡Oh qué pasión tan bella,
se vive aquí entre todo y gentileza,
se vivirá así por siempre y más,
jamás se irá al ocaso y jamás.
 Regiani formides passionis: Ve como tiñe el piano,
las cuerdas cantan hoy para ti,
son todas llenas de lo fantástico
por ser vos de mí.
 Verbant Liebe: Oigo el gran arrullo que tocáis,
me consume tanto mi corazón,
hasta los ángeles os admiráis
por ser pianista de la entonación.
 Ángeles: Su romance es dúctil,
os amáis como Cristo a la humanidad,
como el averno al diantre fútil
pero su amor más que inmortal.
 Lloramos a veces,
reímos cuando es el momento,
amamos a lo tenue
cuando sentimos el cielo.
 Muchos cambian en su interior,
prefieren huir lejos,
más al saber un terror
y así lloren dejan lo tierno.
 La música suena hoy,
hoy ante instrumentos tocamos,
así un compás desafine por error
seguiremos cantando.
 Regiani formides passionis: Muchos huyen,
muchos se alejan,
pero el nuestro es dulce
y hasta la muerte  viviera.
 Verbant Liebe: Muchos construyen,
muchos elaboran un sueño,
pero luego los destruyen
y prefieren otro ensueño.
 Regiani formides passionis: Amar es lo que vivimos,
soñar es lo que nos ha pasado,
sacrificar es haberme ido
y luchar es la aria que amamos.
 Verbant Liebe: Música que entiendes,
música que muy pocos aman,
música a esta altura se siente
la música que nos abraza.
 Regiani formides passionis: Violines hablan,
nos comunican lo que sucede,
lloramos cuando componemos el aria
mas cambia cuando florece.1542
 El amor ahí está escrito,
como en tejidos del corazón,
donde ahí latimos
y recitamos con postración.
 Verbant Liebe: Así fue este compositor,
música llena de su lenguaje,
donde seguro se preguntó
habrá uno que lea mi mensaje.
 Regiani formides passionis: Habrá persona que pueda,
habrá un individuo que ame como yo,
existirá alguien que compusiera
una obra como lo arduo del amor.
 Verbant Liebe: Tantas preguntas se hizo,
noches sentado en su piano,
solo y su único alivio
era componer su mundo claro.
 Regiani formides passionis: La poesía le consumió,
se hizo señorío de su mundo,
no había nadie más que su amor
y su mismo rumbo.
 Verbant Liebe: Poder de su fuerza inmensa,
tan fácil leía sus versos,
componía a luz primera
y con el sentimiento pleno.
 Regiani Formides passionis: En las escalas caminaba,
y su ambiente veía,
así él hablaba y gritaba
entre sus noches mismas.
 Quizá corría y así aceleraba,
el latir de su huracán,
si no había la llama
destrozo era su compás.
 Verbant Liebe: Una marea se desliza en la obra,
va suave y ligera,
no cambia su loa
sino sigue plebeya.
 El amor es infierno el que busca,
el amor es cielo el que da todo,
el amor es dulce y lucha
y valor cuando es victorioso.
 Regiani formides passionis: Versos que cantan,
hoy llenos de mi locura,
Oh amor que mi corazón ama
por favor bésame en mi dulzura.
 Verbant Liebe: Os beso el dulce pecho,
es tan evanescente como lirio,
me gusta hoy comeros en lecho
ante este piano de tanto delirio.
 Regiani formides passionis: Sigue así amor,
me estáis poniendo más ardiente,
qué dulzura sois vos
hacéis que más reviente.
 Verbant Liebe: Qué locura vivimos,
qué pasión hoy siento,
es el amor que palpita
en este mismo y loco cuerpo.
 Regiani formides passionis: Me devoráis todo amor,
sois un audaz y atrevido,
pero me encanta que seáis así amor
y me hagáis lo más deífico.
 Verbant Liebe: Tu piel es un mundo tan inmenso,
que cuando beso siento el reino.
 Tu sonrisa me deja sin voz
que cuando te veo enloquezco.
 Regiani formides passionis: Me hacéis sentir tan viva,
me acariciáis con tal dulzura,
dejáis mi carne efusiva
que hoy pide más locura.
 Consumidme más dulce amor,
¡oh qué noche la de hoy!,
vivimos de tanto amor ardiendo
que estoy loca por vos.
 Verbant Liebe: Os socava mis manos los muslos,
y seguís tocando tranquila,
beso en tanto loco arrullo
más tus senos en codicia.
 Gemís un poco dulce dama,
tus labios se mueven con la lengua,
y acaricio más la rosa dalia
que me perfuma con riqueza.
 Regiani formides passionis: Me incita que rocéis eso,
oh mi dalia de monte de Venus,
tan solo es un roce  tierno
a lo verdadero que es Verum.
 Verbant Liebe: Cálida y llena de miel,
anhelo comeros dentro del paraíso,
estoy enamorado mi doncel
y por primera vez haré el amor contigo.
 Regiani formides passionis: Puro en mi alma,
como paloma nácar en este amor,
podréis hacerlo con calma
porque igual núbil soy.
 Verbant Liebe: Ante el amor de este recinto,
bajo los ángeles y firmamento,
un pájaro canta en silbidos
y mi amor que va a ti tan poético.
 Regiani formides passionis: No dejo de latir el piano,
es mi océano de inspiración,
pero si os puedo besar los labios
y dejarme consumir en pasión.
 Quitadme el vestido de nieve,
quiero que sea lo mejor,
desnudadme Verbant de Liebe
ante este hermoso ardor.
 Verbant Liebe: Os quito el atuendo,
se desliza hacia la alfombra,
ante este nocherniego
que vivimos y que asombra.
  Tenéis una piel de aurora,
blanca y rojiza de amanecer,
más con el cabello en rosas
siendo ocre de embellecer.
 Regiani formides passionis: Juntos y felices,
no me miréis así y besadme,
estoy hecha para ti y amadme,
devoradme y consumidme
y en pasión socavadme.
 Verbant Liebe: Quedo ciego al veros,
sois como una luz de una deidad,
os veis tan suntuosa mi cielo
que sois mi amada inmortal.
 Regiani formides passionis: Amor me hacéis reír,
me hacéis sonrojar toda,
mi piel espera ávida de ti
para que le consumáis el aroma.
 Verbant Liebe: Qué noche de luna,
qué noche tan rutilante,
qué amor en férvida lujuria
y qué pasión apasionante.
 La cascada moja y baña,
 las dos rocas se mojan,
tanta agua embarga
que se vuelven rosas.
 Tanto el agua siente un cuerpo,
que le parece su hogar,
tanto gusta del momento
que pasión es su venustidad.
 Regiani formides passionis: Qué tierno amor,
qué forma de mirarme dulzura,
sois tan dilecto en mi corazón
que hoy ahora anhela lujuria.
 Verbant Liebe: Me desnudo amor,
este pobre hombre ahora se une hacia ti,
mientras tocas soy tu sol
y tu mi ávida flor que es tan feliz.
 Refleja mi luz a vuestro interior,
os alimento de la vida,
envidia la luna este albor
que vivimos en su día.

 Termina el primer movimiento allegro,
y empieza con el adagio un poco con mosso.

 Regiani formides passionis: De qué manera me amáis,
la luz entra a mí cavidad inquieta,
vos ofrecéis luz especial
y calor a mi esencia.
 Verbant Liebe: Sois tan increíble amor,
ante esta ventura predilecta,
todo suena en tal dulzor
que somos personas y poetas.
 Regiani formides passionis: Seguimos en el idilio infinito,
no acaba esta pasión romanceada,
nos conjeturamos en lo bienquisto
de esta pasión que hoy canta.
 Dejo que me devoréis en lo bendito
por ser una pasión santa,
que somos puros a lo bendecido
por lo más que encanta.
 Verbant Liebe: No dejo de consumiros,
es una pasión que en mi amo,
es un mundo tan libido
que hoy es entusiasmo.
 Regiani formides passionis: Sigue así vida mía,
Oh que ansío vivo mi fiel adonis,
estoy hecha de alegría
por teneros hoy tu Regiani formides passionis.
 Verbant Liebe: Oh amor loco y mágico,
esto dura tanto tiempo en el querer,
que quiero quedarme así amarrado
junto a la dichosa y dulce mujer.
 Regiani formides passionis: Los ángeles nos dan rosas,
aún así en instrumento tocando,
son tan dulces en la proa
que nos miran emocionados.
 Verbant Liebe: Claro que nos miran así,
ellos saben que nos amamos mucho,
entienden este latir feliz
que hoy ha explotado en arrullo.
 Ángeles: Cuidadosos y apasionados,
este frenesí es para seguir,
no hay que dejar lo romántico
porque es eviterno y feliz.
 Escuchen la naturaleza,
ella entre animales canta,
perfuman con su gentileza
entre sopranos y dalias.
 Regiani formides passionis: Nos encanta,
nos emotiva,
nos da una manta
que a nuestra vesania cautiva,
nos envuelve la gracia
que a esta sensación palpita.
 Verbant Liebe: Recitaciones de sueños,
vida enlazada en cuerpo cálido,
amándoos como vuestro dueño
y ni naturaleza o herbaje pálido.
Regiani formides passionis: Solo murmullan con voz tenue,
nos sentimos acompañados,
Oh mi bardo Verbant Liebe
que hoy tengo apegado.
 Verbant Liebe: Os consumo como el piano
consume a la pasión que tañe,
tanto en melodía sonando
como mi cuerpo a tu carne.
 Regiani formides passionis: Oh gloria al canto,
Oh amor de los amores,
Oh ilusión de este teatro
que vivimos en los rincones.
 Verbant Liebe: Oh descanso eterno,
Oh Señor Jesús que nos ve,
Oh que no sea glacial invierno
sino aquel cielo o edén.
 Regiani formides passionis: Vos que vino al mundo,
que en santidad al mundo amó,
que ofreció la verdad del sepulcro
y el presente de un redentor.
 Verbant Liebe: Que curasteis a muchos,
que a ellos dabais tal amor,
que queríais con fortunio
sin dejarlos en incineración.
 Regiani formides passionis: Cómo hubiese quisiese veros
para estar ahí y suplicaros,
que me deis el permiso del cielo
y si es posible junto a lo que más amo.
 Verbant Liebe: Que nuestra morada se colme,
del amor y frutecer,
más esta obra de Beethoven
que da mí amor en tañer.
 Regiani formides passionis: Os rogamos que nos oigáis,
que esta plegaria sea futura,
os pedimos que nos cumpláis
tal anhelo de holgura.
 Verbant Liebe: Dadnos paz celeste reino,
Oh majestad escuchadnos por favor,
el querer vive hoy pleno
y ayudadnos a estar así en amor.
 Ángeles: Muy dúctiles en este apego,
vosotros os queréis inmensamente,
no hay mendaz en el fuego
que está hoy encendidamente.
 Regiani formides passionis: Fuego que es férvido,
Oh pasión que nos acaricia,
volcán de este sentimiento
más por su piel en delicia.
 Verbant Liebe: Soy Rey de vuestra piel,
es tornado mi palpitación,
tanto soy ante la grácil clavel
que vive en mi corazón.
 Regiani formides passionis: Yo soy al amar un huracán,
me agito en toda esta galaxia,
me consumís como un vendaval
que me late el alma.
 Verbant Liebe: ¡Oh mi corazón de trueno!,
Más al tener la piel unida en mí,
Oh mi pasión de mi fuego
que hoy me consume aquí.
 Regiani formides passionis: ¡Oh piano que hoy rozo!.
¡Ah por siempre seguiré tocando!.
¡Oh por esta dulzura de lo mozo!
que vive en los tórridos orgasmos.
 Verbant Liebe: ¡Ay mi flor del consumido sol!,
¡oh desprendéis aroma amatorio!,
¡Ay qué dulce calor!
en donde no hay pudrigorio.
 Regiani formides passionis: Oh qué riqueza afrodisiaca,
entre mi interior efervescente,
tanto siento el magma
que quema mi ente.
 Verbant Liebe: Oh nocherniego de la sicalíptica,
Oh vivimos un fraterno holgorio,
de la tibia y unida paroxística
que hoy se ve tan notorio.
 Regiani formides passionis: Oh qué historia,
Oh es más que un amor definitorio,
Oh qué noche de memoria
Que hoy vive tan meritorio.
 Verbant Liebe: Oh qué gloria,
Oh es más que gozo y jolgorio,
amor que ni rueda en noria
que vive sino purificatorio.
 Regiani formides passionis: Pasión jaculatoria,
pedimos en aria de oratorio,
de esta consumación rogatoria
por el amor que no es tenorio.
 Verbant Liebe: Un amor exquisito,
donde hay lo eyaculatorio,
 flor de mi amor infinito
es real y no ilusorio.
 Regiani formides passionis: Oh noche de encantorio,
Oh mi poeta no verdugo,
Oh iremos al cielo no divisorio
porque este es nuestro mundo.
  Verbant Liebe: Antes habrá un crematorio,
Oh alma de mi carne,
Oh edén es sublimatorio
cuando yazgamos romance.
 Regiani formides passionis: Es un amor único,
todo ha sido tan narratorio,
esto no es impuro
sino aquel sensorio.
 Verbant Liebe: Es un paraíso este amor,
Donde mi espíritu no es delusorio,
Donde ella es mi única flor
y mi amatorio a su visorio.
  Regiani formides passionis: Oh cuantos versos recitados,
Oh cuánto amor tan satisfactorio,
Oh inolvidable lo fantaseado
que es en arte laudatorio,
oh qué amor tan logrado
que hay en este dormitorio,
tan solo yace en el piano
en melodía entonatorio.
 Verbant Liebe: Y te acaricio tanto con las manos
que hoy doy mi confesorio,
que a ninguna mujer he amado
en tan amor estimatorio.
 Regiani formides passionis: Oh escaldo de mi alma en lucha,
Oh mi bardo gladiatorio
Ay mi Dios que escucha
ante el verso exclamatorio.
 Verbant Liebe: Nada en destino fenecerá,
nada entre días será evaporatorio,
siempre el amor vencerá
entre el querer no mortuorio.
 Siempre el amar palpitará
y siempre será respiratorio,
nunca el latir se dejará
hasta en los compases vibratorios.
 Regiani formides passionis: Siempre fe tengo caballero,
siempre ante este territorio,
nunca la luz será miedo
porque lo nuestro es juratorio.
 Verbant Liebe: no oís que golpean,
hacen tan, pin y pon,
más que a la puerta
a las afueras del balcón,
pero mejor no te detengas
ante la dulce modulación,
quedaos ahí mi belleza
que veré quién es amor.
 Regiani formides passionis: Recién ahora oigo allá,
ved quién es,
quién nos viene a visitar
¿y de qué razón y porqué?.

    Va hacia la puerta y abre,
observa a dos parejas,
ellos confiesan sus romances
y otra cosa más reflejan.
 Les cuenta que les han estado oyendo,
los ángeles ni sabían,
estaban tan centrados en los instrumentos
que ni supieron en la rítmica.
  Pero la dulce e hija Regiani,
y el padre Kerfun Donriel,
aún en la alcoba le veían frágil
y tocando en su piano fiel.
 Y las tías aún le miraban,
aún pensaban que estaba loca,
porque recitaba palabras
que ni entendían su oda.
 Solo ella en vestigio vivía,
solo su sentimiento viajaba,
solo su calor en eso dormía
cuando la obra sonaba,
donde la obra aún sigue en melodía
y que suena aún en gracia,
pero en mesto su hipocondría
ante algo que dio mancha.
 Aún no ha ocurrido,
pero pronto pasará,
el misterio será ese acertijo
que en su morriña llorará.
 Oh concierto que tocáis,
a mí mismo me hacéis gemir,
Oh cuánto amor solo dais
a las tenues sílabas de latir.
 Oh a ese compositor alemán,
que tan solo tal musa ofreció,
donde vivió su vida glacial
y entre el calor de su corazón.
 Tan parecido es su interior,
Tan igual a la flor del alba,
No más que por un sol
Que a su vida dio alma.
 Que por un delirio dio,
dio aquel perfume virgen,
que por un amor amó,
amó al silente ser sensible.
 En silencio el teatro,
y tan solo el piano ella toca,
en visión de una joven astro
ante el piano de dulce coda.
 Oh si la vida diese milagro,
Oh más que a su pobre corazón,
Ay qué hermoso fuera el escaldo
junto a sus brazos de calor.
 Confundido al escucharme es,
pero la penuria de la locura vive,
suspiro un teatro buriel
en donde esas manchas existen.
 Sigamos a continuación el recinto,
qué dirá su padre que le ama,
Oh sus tías del mismo orificio
que ahí recitaran.

 Kerfun Donriel: Qué música tan viva suena,
qué compases aún sigue tocando,
es una pianista tan plebeya
entre ese mismo escenario.
 Amita Pusilla: Su dilecto es extraordinario,
maneja el piano con dulzura,
exalta y consume lo mágico
que hay en esas partituras.
 Rabidus Amita: Oh solo tiene ojos cerrados,
no ha dejado de ser así,
en qué  mundo estará andando
ante los murmullos que dio en sí.

 Empieza el tercer movimiento,
Rondo-allego ma non troppo.
 Toca en su alcoba.

 Ragiani formides passionis (aparte): Oh vivir alucinatorio,
Oh piano que me abraza,
Oh Dios da el amatorio
Que necesita la dalia.
 Kerfun Donriel: Oh mirad, muy poco entiendo,
susurra con baja voz,
que estará diciendo
ante su ente y su corazón.
 Amita Pusilla: ¡Ay sobrina quién sois?,
en qué monarquía estáis,
porqué irradiáis en baja voz
y en qué orbe os rozáis.
 Rabidus Amita: Emperador y Emperatriz,
dos personas del amor,
ladrón y meretriz
sufriendo en perdón.
 En alguna posibilidad se es feliz,
en destello cuando es fulgor,
pero la luna tiene cicatriz
cuando no hay constelación.
 Regiani formides passionis: Cúmulo de la morada,
espectros de la vorágine malicia,
fortunio en sus alboradas
mientras que florete en armonía.
 Sonrisas en sus labios silentes,
lacrimosa dolorosa naturaleza,
solo afligen los inocentes
y ya no hay efervescencia.
 Kerfun Donriel: Extraño su lenguaje,
pareciera palabras de un libro,
raro en lo consonante
que recita ante el sonido.
 Amita Pusilla: Acusa a nuestra vivienda,
pero a qué mal libertino,
conjura tal fiereza
entre su mismo acertijo,
y sin estar un poco contenta
de lo que hay en su dicho.
 Rabidus Amita: Frío el hogar se vuelve,
quién ha sido el inicuo ser,
quién ha hecho ponerla así
y sin saber quién es.
 Kerfun Donriel: Demencia solo vive
ante un sueño seguro tuvo,
ahora alucina tal esfinge
entre esos mismos susurros.
 Hoy nos visita la fría lluvia,
truena entre las nubes,
todo en el inmenso se nubla
y su rostro sin luces.
 Regiani formides passionis: Oh palabras y más palabras,
sobre todo en un mundo cruel.
 Que llueva y haya más descargas
y en ti solamente Kerfun Donriel.
  Amita Pusilla: Os nombró solo a vos,
qué tendréis que decir en eso,
o es que sois aquel malhechor
que en su mundo es averno.
 Radibus Amita: Qué ha pasado Kerfun,
decidnos ahora queremos saber,
porque os acusó así
y tan perversa en su ser.
 Kerfun Donriel: No ha sucedido nada y nada,
a mi hija he cuidado y querido,
he sido su protector y mirada
en todo este mundo y recinto.
 Porqué mal hiciese a lo que amo,
a la deidad en figura,
el reflejo de su madre que extraño
y por la defunción de mi Keniani luna.
 Regiani formides passionis: Recordad antaño vetusto,
que a un sol disteis espetón,
rocíos cayeron en nubes por difunto
y un alma en inanición.
 Amita Pusilla: ¡Qué sol de metáfora es?,
a qué alegoría se dirige,
a qué ardor pena lo hiel
¿dónde quién es esa Efigie?.
 Radibus Amita: Acusa de esta manera más axiomática,
sus adagios son lúgubres,
donde cae una misma lágrima
y sangra el cuadro numen.
 Kerfun Donriel: Crean que su sentido es errado,
vive mi pobre hija lastimada,
Dios consolaos del arrumaco
que no quiero verle así en alma.
 Regiani formides passionis: Rabino colma mi esencia,
piano trae al fulgor que alumbraba,
noche en lluvia en naturaleza
de esos rocíos besa a su alma.
 Oh dirigíos en esta misma noche,
Oh colmaos de esos rocíos,
Oh Rabino entregad sin reproche
antes que termine el sonido.
 Amita Pusilla: Ya no sé qué pensar,
Ver a mi sobrina me sucumbe,
Ya no sé que es verdad
Sino que Dios le alumbre.
 Radibus Amita: Que Dios la oiga,
ante sus palabras tan confusas,
solo sabe qué dice en su oda
entre palabras tan mustias.
 Kerfun Donriel (Aparte): Pasado no le atormente,
sabe que ella debe vivir conmigo,
no quiero más doliente
que en su mismo abismo.

 Kerfun Donriel: Dios la va escuchar,
pero para hacerla feliz con su padre,
ella no debe ya sollozar
entre palabras tan infernales.
 Su mundo ha de estar
entre pájaros celestiales,
no en un ido hogar
sin vivir con lo memorable.

   Una joven muestra su tristeza,
sus palabras confunden,
nadie logra saber la terneza
de lo que es y que le funde.

 Abre la puerta Verbant Liebe,
y entran las parejas,
aún sigue sonando eso tan tenue
en este mundo de nobleza.
 Sigue y sigue la obra sin parar,
hasta ahora que no deja de sonar,
donde el teatro se silencia
y en donde hoy la poesía despierta.
 Amor de sus corazones,
paz en su colmena de sus ilusiones,
vida de sus preguntas
y amor que hoy más hay en ternura.
 Se adormece las voces,
y menos ella en su cálida espineta,
le da en tal bellos roces
que a mí su amor refleja.
 El ambiente del teatro cambia,
y empiezan a entrar en el recinto,
entran y confiesan sus palabras
en todo un canto recitativo.

Don Homo moritur: ¡Oh unidos en amor!,
¡más fuerte que un zurrusco!,
recitaron con pasión
amándose en este fortunio.
Donna Mulier Defendit: Como nuestro querer,
ellos os amáis en tan cielo azur,
como el que vivimos mi ser
y que te amo mi Homo Moritur.
Don Homor Moritur: Somos parejas amadas,
entre las leyes de Domine y querubín,
nos amamos entre la dulce y calma
más que a mi Mulier Defendit.
Don Colluctari cum Ruinam: Veros de tan igual idilio,
a nosotros nos emociona el corazón,
amándose entre ternura y regocijo
nos sonroja por la pasión.
Donna Hipa Domina: Oh cierto amor de mi,
ellos igual entre la dulce vida divina,
y nosotros sentimos ese latir
que os ama tu Donna Hipa Domina.
 Don Colluctari cun Ruiman: Llega lejos de aquí,
es tan solo que de pasión sin espinas,
flor eterna de frenesí
que aroma tu Don Colluctari cun Ruiman.
 Y que no dejase de quereros así
porque vives en su vida.
 Donna Hipa Domina: Gracias por quererme Colluctari,
donde me siento tan rica,
por oíros nada más sin mártir
entre esa dulce voz que me acaricia.
Ángeles: Oh miraos vosotros,
cumplís tales órdenes del señor,
sigan así en lo amoroso
que llegarán al sol.
 Hasta con sus nombres bailan,
entre sus estrofas,
recitáis entre esa danza
entre perfume de alcachofa.
  Regiani formides passionis: Me alegra oíros,
sigáis recitando,
me gusta sentiros
más en este hogar tan amado.
 Verbant Liebe: Sois tan agradables,
vosotros en esta morada viva,
nos hace sentir pasionales
al veros en tal dicha.
 Ángeles: Viviréis todos tan eternos,
Dios debe comprender su amor,
debe de dar el esperado cielo
en donde iréis entre el dulzor.
 Don homo moritur: Cristo es santo y salvador,
Cristo vino al mundo y dará paz,
jamás dejase ir un amor
que ha nacido y que no es mendaz.
 Donna Mulier defendit: Él nos defiende a cada minuto,
él nos cuida como sus hijos,
no somos espíritus verdugos
sino sentimos amor bendito.
 Don Colluctari cun Ruiman: Luchamos por una vida,
si es posible enfrentarse al mal,
por no perder a nuestra alegría
que queremos en eternidad.
 Donna Hipa Domina: Llorara si os pasase algo,
me matase o muriera si os vais,
no pudiese veros tan lejano
fuera nada si os marcháis.
 Ángeles: Os queréis a tan dulce encanto,
son vidas de una vida,
no hay que dejar lo sacrosanto
que reina y es la luz divina.
 Regiani formides passionis: Son tan increíbles,
donde más el piano solloza,
donde son en amor indecibles
y en donde mi alma por amor llora.
 Porque no hay pasión que se dé tanto,
solo ella nace y está,
no hay porque dejarlo
si os acaricia más.
 Verbant Liebe: Tocáis como ángel,
dulce y hermosa y fragante,
os siento tan divina mi dulcinea,
que os veo y la piel se me quema.
 Nos amamos cada uno,
nos entregamos palabras de amor,
esto es lo más puro
que exista en el dúctil calor.
 Don Homo moritur: La esperanza se sueña,
con que el amor allá vuele,
la dulzura se besa
y todo es tan poéticamente.
 Abrazo a mi hermosa mujer,
tan solo le perfumo besos,
le gusta a mi Donna Mulier
que le socave en lo bueno.
  Donna Mulier Defendit: Me gusta que seas amoroso,
por eso me enamoré de vos,
para que viváis en mi corazón fogoso
y lo llenéis de vasto ardor.
 Tan dulce y arrumaco dais,
cariño del apego y beatitud,
me hacéis sentir angelical
Oh mi Don Homo Moritur.
 Don Colluctari cun Ruiman: Aprendí a amarte,
aprendí tantas cosas mi dulce alegría,
Aliento que me besa al recitarte
y por consumiros mi Hipa Domina.
 Donna Hipa Domina: Aprendí a besarte,
Observé siempre que erais dandi,
más lo que hice fue enamorarte
ante mi corazón mi Don Colluctari.
 Ángeles: Mundo de tanto amor,
mundo sensible en sus palabras,
es de noche y de gran fulgor
a lo lejos de esta galaxia.
 Regiani formides passionis: ¡Qué tierno veros en amor!,
qué demencia igual vosotros vivís,
qué eterno se siente en el corazón
todo lo que vosotros sentís.
 Verbant Liebe: Y yo tan loco estoy,
porque vos es mía en lo feliz,
donde todo esto es dilección
que hay en el rincón sin lo infeliz.3932

 Aparece el libertino ruin,
y entra a golpes a la morada,
y teniendo un espetón infeliz
entra y a todos maltrata.

 Kerfun Donriel: Así que aquí os habéis escapado,
con estos paupérrimos,
qué os creísteis que viviréis aquí
y con romance pérfido.
 Verbant Liebe: No os metáis señor,
aquí deje que ella termine de tocar,
luego charlaremos por favor
y así no se desconcentrará.
 Los ángeles entonan igual,
estaos silente un momento,
luego vamos a charlar
y sin decir tanto denuesto.
 Kerfun Donriel: Esperaré como decís,
pero quién os habéis creído vos,
más mi arma será de gran ayuda aquí
y mejor que no me retéis hoy.
 Verbant Liebe: Os lo pido ya va terminar,
ya no quiero oíros de mal gusto,
eso me hace poner mal
y a lo que amo es a lo augusto.
 Ella reina este hogar,
y estáis en nuestra casa,
aquí no hay lo letal
sino que romanza.4027
 Don homo moritur (Aparte): Qué cruel hombre es,
no tiene respeto alguno,
más bien que se cree él
que puede venir y ser furibundo.
  Donna Mulier defendit(aparte): Así se comporta,
así quiere lograr con amenaza,
así es un hombre que incomoda
de su forma tan inhumana.
 Don Colluctari cun Ruiman(aparte): Que no pase nada malo,
que todo sea bueno,
te lo pido señor sagrado
y que todo sea tierno. 
 Donna Hipa Domina: Parad de ser así,
no tratéis de forma mala,
solo somos bondadosos aquí
ante el romance que canta.
 Kerfun Donriel: Y vos sórdida mujer,
mejor callaos en memeces palabras,
no hagáis que os dé
tan solo que en vuestra linaje cara.
 Don Colluctari cun Ruiman: No la ofendáis,
no eres libre en dirigiros a ella,
ella solo opina la realidad
en como hoy comentas.
 Verbant Liebe: Señor ya no insultéis,
ya calmaos os lo ruego,
aquí solo mal ofrecéis
y a esta dama en fuego.
 Kerfun Donriel: Cómo  hoy digáis,
solo la quería aterrar,
ya que me calmáis
me voy a relajar.
  Casi 5 segundos de silencio,
y termina la obra,
veamos quienes son ustedes
que robaron a mi hija moza.
 Regiani formides passionis: Padre huí de mi vida,
la cual era pura soledad,
conocí a este hombre en dicha
y mi amor fue felicidad.
 Le amo más que a la poesía,
le amo porque es mi sol,
amo a mi alegre melodía
que ha sido mi amor.
 Verbant Liebe: Kerfun igual yo le amo,
jamás sentí un amor,
he sido tan solitario
en busca de una flor.
 Yo di la luz a su amanecer,
ella me esperaba ansiosa,
yo la hice embellecer
y su flor me dio su aroma.
 Caí enamorado a su pasto,
dejé que me amase,
su piel y corazón casto
dejé que me adorase.
 Kerfun Donriel: Sois una prófuga,
huisteis con este pelmazo,
preferisteis uniros a solas
y dejadme solo sin abrazo.
 Creéis que os puedo perdonar,
pensáis que vivir solo es posible,
saber que si os moristeis
o quizá que ya no vives.
 Regiani formides passionis:
 Vos siempre preocupado de vos,
jamás me enseñasteis nada,
todo yo sola aprendí en amor
y ahora soy pianista alada.
 Soñaba igual con el querer,
Dios me ofreció ese regalo,
ahora porqué  debo retroceder
si en mi corazón le amo.
 Verbant Liebe: Quiero la paz con su hija,
con vos igual señor,
no quiero ninguna morriña
sino que felicidad en corazón.
  Don Homo moritur:
Haga caso a lo que él dice,
no veis que se aman inmensamente,
se recitaron tan sensible
entre un mundo dulcemente.
 Donna mulier defendit: Se aman como nosotros,
su amor ha sido cálido,
jamás hubo amor tan tórrido
y en alma sin lo pálido.
 Don Colluctari cun Ruinam: Su corazón es fuego,
su tristeza es si fenece,
si mundo no es un juego
si no dejáis mueren.
 Donna Hipa Domina: Su pasión es única,
sus recitaciones son hermosas,
su romance parece música
cuando se besan en las notas.
 Ángeles: Señor comprenda,
estáis en frente de ángeles,
somos vasallos de Dios  alteza
para alegrar el romance.
 Kerfun Donriel: No importa quiénes seáis,
solo quiero a mi hija de vuelta,
ya no quiero que os metáis
sino aquí habrá hoguera.
 Os lo juro que os va pasar,
entre mi lanza os daré,
ya no os metáis
sino yo mismo los incineraré.
Regiani formides passionis: Qué condenadas palabras,
en qué os habéis convertido,
Dios os mira en su morada
y os dará pleno castigo.
 Ángeles: A veces Dios no hace nada,
solo tiene en su futuro guardado algo,
siempre ocurrirá algo en mancha
pero siempre anduviese en su adagio.
 Kerfun Donriel: Ven hija sal de ahí,
os ordeno ahora que vengáis.
 Regiani formides passionis: No quiero con vos ir,
ya vos en mi no mandáis,
no sois ya el padre que creí
porque solo el mal reflejáis.

 Kerfun le sujeta del brazo y la jala.
  Impide esa acción Verbant.

 Verbant Liebe: Quitaos de aquí ruin,
no tocaréis a mí mujer,
no sois quién para tratarle así
ya si estoy para proteger.
 Kerfun Donriel: Vuestra mujer?,
vuestra lujuria bellaco,
ella es mi única doncel
que tengo en mi costado.
 Verbant Liebe: Es tarde libertino,
ya nadie gobierna en ella,
solo mí corazón florecido
que solo a su ser de azucena.
  Kerfun Donriel: Es verdad lo que dices,
entonces me quedaré solo,
pero antes tendréis cicatrices
con este florete en tus ojos.
(Y le da a Verbant Liebe, hiere tanto que sucumbe,
al suelo cae sangrando, y su amor llora lúgubre,
su corazón se detuvo,
ya no había latir,
el de ella igual peor estuvo
al ver a su amor del seno partir)
 Kerfun Donriel: Se ha ido uno,
por fin he acabado con este,
ahora vámonos de aquí
y el amor desterrado por siempre.
 Regiani formides passionis(llorando):
 Oh mi sol que tanto amé,
hoy el felón hizo su malicia,
Oh a tal amor yo besé
y quién me dará delicia.
 Kerfun Donriel: Nadie os dará amor,
vos debéis venir conmigo,
ya deja de llorar por un desamor
que solo es el peor castigo.
 Regiani formides passionis: Rabino consolaos de mí amor,
has que pueda superar su ida,
a nadie podré dar mi calor
antes que llegue a la otra vida.
 Mi padre ha cometido pecado,
en tus manos está su destino,
yo solo quiero de vuelta al amor sacro
y ya no llorar en suplicio.
 Ángeles: Matanza lleva condena,
el crematorio no fue como dijeron,
ahora hay más que dolencia
y su amor muriendo.
 Don homo moritur: Porqué le matasteis,
qué os hizo él,
si tan solo amaba a vuestra hija.
 Porque en locura disteis
y ahora solo es ceniza,
o ahora no la veis
en cómo anda contrista.
 Kenfur Donriel: Ten por la espalda,
morid también,
solo traéis mala mancha
e iros al edén.
 (Cae el hombre, agoniza en suelo,
su amor defiende, y muere cuando le da un beso)
 Donna Mulier defendit: No le daréis más,
primero antes muero yo,
no quiero que se vaya igual
porque fuera dolor.
 Don homor moritur: Recuerda que siempre le amaré,
así ya ni fuerza tenga,
allá la esperaré
y recuperaremos la terneza.
 Donna Mulier defendit: Ten un beso amor mío, (y muere)
ten varios más para que los recuerdes,
Oh no os vayáis amor bendito
que estaré tan sola y en muerte.
 Don Colluctari cun Ruinam: Lidiaos conmigo cruel,
a ver si podéis granuja,
ya os habéis pasado soez
y mataros en toda holgura.
 Kenfur Donriel: Si así pretendéis será,
a ver qué tal lidiáis,
si sois tan bueno al luchar
combatíos y toma allá.
 (Logra dar Colluctari al seno de Kenfur,
pero Kenfur peor zahiere a su alma y cae,
su amor llora porque no quiere lo mismo).
  Don Colluctari cun Ruinam: ¡Oh amor me hirieron!,
¡oh dulzura que me ama!,
¡ay no lloréis mi hipa de mi seno
que hoy tanto sangra!.
 Solo quise parar esto,
y vine siendo el que igual matan,
recuerda que soy el cielo
que os espera con toda magia.
 Donna hipa domina: ¡ay mis lágrimas son océanos!,
¡ay amor de mi corazón gemido!,
¡ay no sé si soporte esto!
por más años amor vencido.
 Don colluctari cun Ruinam: No quiero dormirme,
porque lloraré solo allá,
no quiero sucumbirme
porque infeliz mi alma andará.
 No quiero irme,
¡amor, me siento peor!,
oh esto es morirse
en tal momento de dolor.
 Bésame por favor oh no amor.
 (y muere sin más suspiros que decir).
 Donna hipa Domina: ¡Oh mi luchador amado!,
¡oh que moristeis dando el alma!,
Oh que reflejasteis lo apasionado
ante el último suspiro sin calma.
 Kerfun Donriel: Patéticas escenas,
para qué observo esto,
mejor váyanse de la vivienda
sino igual iréis al cielo.
 Donna mulier defendit: Nos vamos libertino,
nos vamos juntas,
nos vamos a otro destino
y a esperar la muerte justa.
 Donna hipa Domina: Nos llevamos a Regiani,
vámonos amiga a otro lado,
no estéis con el no mártir
que trajo hoy estragos.
 Regiani formides passionis: Vayan en paz,
recuerden que la muerte les espera,
vivan todo en lo meloso
y ahí descansarán en primavera.
 Yo me iré con el pérfido,
no puedo hacer nada,
no olviden que les quiero
y que somos santas.
 Ángeles: Yo me encargaré de este delito,
ley de Dios obliga a morir,
todo se ha dicho
y vosotras vivirán no infeliz.
 Kerfun Donriel: Ángeles me causan risa,
mejor iros al mundo suyo,
y dejadme en paz en la vida
y me iré a mi hogar en triunfo.
 Donna hipa domina: Espero verla en otra,
espero que le vaya bien,
le agarré cariño en alcoba
y mucho por el querer.
 Donna mulier defendit: Buenas noches amiga,
nos vamos muy tristes,
esperamos aquella dicha
que nos ha dicho los querubines.
 Ángeles: Me retiro, me encargaré de esto,
lo juro por el reino sagrado, que no será ya mesto.

 Se retiran, Kerfun se lleva a su hija, y por largo tiempo
olvida su padre lo que hizo, le hace conocer a sus tías,
las cuales pensaban que era un buen hombre su padre.

 Regiani formides passionis despierta, del piano se levanta,
sus ojos recién los abre, las tías le miran llorando,
y le preguntan por la causa que haya sido quieren saber.
 Más por andar rara tocando, y recitando tal morriña de ser.
 Y porque había quedado en silencio un rato largo,
donde ni se atrevían a decirle nada.
 Solo esperaban que se despertase.

 Amita Pusilla: Se ha despertado,
porqué lloráis sobrina,
qué os ha pasado
que estáis tan cuita.
 Radibus amita: Fue por lo último que dijisteis,
pero has estado en largo silencio,
ya el piano de repente no tocasteis
y todo muy raro en eso.
 Regiani formides passionis: Tías en sonrisas vivían,
ya cuando pensaban que tenía al padre más dúctil,
solo en su interior hay una línea
que separa lo más fútil.
  Kenfur Donriel: Oh mi niña de mi alma,
Oh mi ángel que amo tanto,
Oh mi hija que da calma
cuando toca el piano.
 Amita pusilla: Cuál línea separa en lo insignificante,
qué es eso que no sabemos,
explicadnos sobrina que aflige sollozante
para saber y conocer lo protervo.
 Regiani formides passionis: Hace años un sol me acarició,
Me llenó de su indecible querer,
Me dio tan solo que su calor
Y me hizo sentir feligrés.
 Me tuvo que fugar de la soledad,
no soportaba mi vida así,
me tuve que ir con lo pasional
y poder vivir muy feliz.
 El libertino me buscó,
No me encontraba,
Él por todos lados dio
Hasta que entró a mi morada.
 No solo entró dulce,
entró con un poder villano,
tenía un arma de ajuste
y mató a mi sol y a mi piano.
 No solamente sufrí,
igual dos mujeres sufrieron,
él mató a sus maridos en fin
y todo era infierno.
 Amita Pusilla: Qué crimen ha cometido,
no es digno de que viva aquí,
debe irse lejos viperino
y a dejaros tranquila hoy a ti.
 Radibus amita: Si no os vais llamamos a los guardias,
si no os retiráis sufriréis peor,
si no os marcháis seréis mancha
y si no os alejáis será terror.
 Kenfur Donriel: No me traten así,
debía hacerlo,
yo solo la quiero a ella aquí
y con nadie más en su cuerpo.
 Yo la amo como a su madre,
me enamoré de ella,
ya no puede guardar eso el padre
que vive loco por su belleza.
 No me envíen a otro lado,
yo peno por su amor,
no me manden al ocaso
que yo quiero a su calor.
 Regiani formides passionis: Soy una pasión consternada,
ya no tengo vida en mi corazón,
no iré con vos en alma
y ni por un segundo en amor.
 Amita pusilla: Estáis grave señor,
estáis peor que el demonio,
estáis en el pecado y terror
para iros al infierno loco.
 Radibus amita: Qué desagradable escucharos,
qué horror habéis dicho,
qué locura os ha pasado
para decir lo mezquino.
 Kenfur Donriel: Arrepentido estoy,
no sé antes que me pasó,
no quiero que me abandonéis corazón
porque sin vos condena soy.
 (Kenfur va a la cocina y sirve veneno en tazas,
Esta vez quiere eliminar a sus tías
Que son el problema de su hija que quiere amar)
 Kenfur Donriel: Les ofrezco estas tazas jugosas,
es un jugo antes de mi partida,
quiero que me recuerden hermosas
y me iré tranquilo en la ida.
 (Antes de recibir las tazas los ángeles aparecen,
y advierten tal engaño, y donde trae un misterio).

 Ángeles: Alto señoritas,
no recibáis el veneno,
ahora su vida será maldita
y vivirá en infierno.
 Regiani formides passionis: Oh ángeles benditos,
Oh amigos que añoraba en años,
Oh pensé que no vendrían
y ahora los veo y son claros.
 Rogué tanto a la vida en piano,
tocando la obra en solitaria alma,
más viendo a mí amor en aquel cuadro
y sufriendo sin tener calma.
 Kenfur Donriel: Paupérrimos ángeles,
porqué vinieron ahora,
pensé que se habían ido
y solo traerán mazmorra.
 Amita pusilla: Gracias ángeles,
Casi ya morimos,
Sois tan dulces y memorables
Ante este destino.
 Radibus amita: Oh agradecida estamos,
Oh casi tomo de esa tasa envenenada,
Oh ahora estoy a salvo
y feliz por verlos en alma.
 Ángeles: La mazmorra es para vos,
Dios ordena a que el infierno se abra,
donde no tengáis ningún amor
y para que se queme tu alma.
 Kerfun Donriel: Oh no a donde voy,
Oh ayuda no quiero ir,
Oh mi carne es ceniza en defunción
y ya me siento infeliz.

 Se pierde el espíritu libertino,
muere en el infierno,
todo se ha cumplido
y ahora dan luz al cielo.
 Donde sus amigas ven esa luz
y de inmediato van al aposento,
donde sus amores descienden
y se sienten contentos,
 donde la vida cambia,
donde ahora algo florece
donde todo se calma
Y donde todo es perenne.

  Donna mulier defendit: Oh mirad esa luz,
parece una señal,
brilla tanto a cielo azul
que nos llaman allá.
 Donna hipa domina: Vayamos amiga,
vayamos ahora,
quizá sea una alegría
que esperamos en gloria.

  Ángeles: ya la señal fue vista,
ahora se dirigen aquí,
ahora del cielo vean su dicha
que les prometí.
 Donna mulier defendit: Oh están aquí,
este recinto es su casa,
Oh ahora vemos a nuestro latir
en la luz diáfana.
 Donna hipa domina: Oh amiga es hermoso,
vemos a nuestra compañera,
ni sabíamos nada
y ahora se ve contenta.
 Regiani formides passionis: Oh amigas han venido,
feliz de verlas,
fijaos al cielo bendito
y contemplemos a la belleza.

 Donna mulie defendit, donna hipa domina, regiani:
 Vemos al amor que lloramos,
vemos a su rostro mismo,
vemos al ser que adoramos
y vemos al ser que tanto afligimos.
 Vemos a la poesía viva,
vemos a la locura resucitada,
vemos a su carne misma
que desciende en cuerpo y alma.

 Verbant Liebe: Amor Dios me dejó venir,
para vivir hasta morir,
dejó que viniese,
y dejo que floreciese.
 Regiani formides passionis:
Estoy alegre amor,
estoy con un corazón reventando,
es tanta felicidad en pasión
que por dentro estoy llorando.
 Verbant liebe: Siempre juntos,
siempre unidos en carne,
una vez te lo dije en fortunio
y así es nuestro romance.
 Don homo moritur: Veros después de mucho,
Oh mi dulce dama,
Oh me es feliz este amor único
que hoy renace en alma.
 Donna mulier defendit: Os amor mi amor,
Oh qué delirio siento,
os adoro en mi corazón
y lágrimas caen por ti cielo.
 Estuve tanto esperando,
tanto el milagro bendito,
hoy se ha hecho
y es tan bello y vivo.
 Don homo moritur: Te amo yo igual,
Oh mi dulce latir,
estáis en mi pasión nada más
solo que vos mi Donna mulier defendit.
 No quiero que os apartéis de mí jamás
si no fuese muy infeliz.
 Don colluctari cun ruinam: Oh amor que añoré,
Oh pasión gentil que grité,
Oh me escuchó Dios allá
y hoy aquí tengo lo sensacional.
 Donna  hipa domina: Por mucho tiempo sufrí,
pero soporté esos días,
hoy tan solo tengo vivir
y será con vos en mucha alegría.
  Amita pusilla: Veo que son romances felices,
deberían de vivir aquí,
y estar siempre en lo indestructible
de lo que es la pasión y frenesí.
 Radibus amita: Después de la locura que hizo,
ahora de vuelta el amor,
todo en flor ha renacido
y lo mustio hoy es color.
 Ángeles: Espero que estéis regodeados,
me iré a los cielos amigos,
espero que os améis tanto
y ofrezcáis muchos hijos.
 Amita pusilla: Que te vaya excelente,
y gracias por ayudar,
que vivan en su Réquiem
y en toda paz.
 Radibus amita: Que todo sea perfecto,
que la luz siempre viva,
que su mundo sea dilecto
y que jamás haya ceniza.
 Don homo moritur: Gracias por mandarnos,
gracias por darnos al amor,
gracias por hoy alegrarnos
y gracias por resucitar mi corazón.
 Donna  Mulier defendit: Feliz por darme la pasión,
la cual lloré tanto en la vida,
ahora el verso no es dolor
sino una pasión revivida.
 Don colluctari cun ruinam: Agradecido reino celestial,
por siempre se vivirá en alegría,
agradecido por lo pasional
que siempre habrá melodía.
 Donna hipa domina: Tanta pasión hemos recuperado,
tanto lo repetimos en los versos,
tanto amor ha explotado
por ser tan solo eterno.
 Verbant Liebe: Siempre pensé en este momento,
gracias ángeles queridos,
siempre esperé con lo nuestro
y ahora es cumplido.
 Todo amor acaricia en pecho
y más por tu calor mi lirio.
 Regiani formides passionis:
 ¡Oh amor de mi carne íntima!,
¡oh amor de mi pasión añorada!,
¡oh amor que me necesita
entre la afable efusión amada!.
 Verbant Liebe: Ahora descansemos,
ahora el amor triunfó,
ahora consumamos el lecho
y hagamos el gran ardor.
 Regiani formides passionis: Hazme tuya como antes,
igual todos tienen permiso,
ahora que todo sea apasionante
y lleno del amor en este paraíso.
 Te amo, mi sol siempre le he amado.
 Verbant Liebe: Te idolatro, mi flor siempre le he idolatrado.

 Hacen todas las parejas el amor,
duermen luego feliz,
las tías contentas por la pasión
en que se vivió sin cicatriz.
  Donde la bondad al final ganó,
donde Dios fue justo en sus vidas,
donde hubo tal terror
y donde hubo tal alegría.
 Es como una misma composición,
donde contiene una larga lengua,
donde todo puede ser amor
y donde puede ser tristeza.
 Así en ese mundo se colmó,
así la felicidad se roza,
así la primavera dio flor
y así su corazón en rosas.
 Al futuro frutos dio el árbol familiar,
así al amor vivieron,
ahora en la morada están
de su edén sempiterno,
todo se pinta de lo pasional
y solo en lo más tierno,
más con ese amor celestial
que hayan siguen reproduciendo.

 El sueño es posible que llegue,
pero hay que saber esperarlo,
cuando llega es Réquiem
y la luz da lo amado.
 Confía en tu fe,
confía en tu amor,
confía en tu querer
y confía en ese calor,
al que te abraza,
el que te quiere tanto,
el que te acompaña
entre lugares y encanto.
 Así lo es una pasión,
así lo es un piano,
así lo es el amor
cuando lo tienes abrazado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario