sábado, 28 de enero de 2012

El regreso para una vida de sus mismas pasiones.

La decisión de mi vida ha sido que vuele,
que busque aquella prosopopeya de mi interior,
solo que a mi enardecido amor que me quiere,
y que llegue a mi propia vida en la nación,
no es aquella tierra que me ha dado el arte,
solo mis vesanias despertaron al oír un tenor,
y que es tan solo que la música de un vate,
aquel piano y clavecín que entona de amor,
aquel violín y chelo que canta de romance,
entre obras de conciertos y sinfonías,
es la chispa que me da tanto alcance,
como rozaros y besaros en alegría,
saber que son mi mundo de avance,
a quien me centraré escribiendo y componiendo;
como historias y obras apasionantes,
siendo el rapsoda de sus acontecimientos,
el que los hace vivir en su poema,
solo que sintiendo su recuerdo,
quien habla en el piano de grandeza,
por eso la música no es cualquier cielo,
es un paraíso al que solo se besa
y es solo que un sacro reino,
al que no puedo alejare de mi terneza
por ser esa maravilla quien me da sus ecos,
a través de toda mi naturaleza
inundada de su armonía en la historia de su secreto,
y solo yo sé que dice aquel poeta,
por ser tanto la vida de su silencio,
como en la música de la nobleza,
de los preludios y nocturnos
que son de Frederick Chopeen,
estando ahí sus vocablos de infortunios,
que cantaron en lágrimas de su ser,
otros quizás sean un holgorio mundo
al cual en tinta de notas escribió de querer,
es al escucharos un amor tan profundo
que me dicta la poesía su tañer,
es así a veces en la vida de fortunio
que de sus notas a mi corazón hace llover,
llover de inspiración ante lo pulcro
como ante mis líneas de inmenso vencer,
a veces otras de lo duro
cuando no hay el cielo de su florecer.
Llegaré a la tierra de Venezuela,
iré con mi hermana allá,
floreceré a mi mundo de más poemas,
mi padre muy feliz al verme estará,
sé que estará el mismo amor a mi melopeya,
y de eso no podré hasta el edén apartar,
por ser de mi alma la prosopopeya
que en el piano me hace cantar,
no hay otra aromada naturaleza
que ese mundo que me hace llorar,
que me hace sentir su poeta
cuando escribo y cuando me pongo a recitar,
me hace sentir una llovizna de letras
en miles de historias al momento de escuchar,
es mi otro yo a lo inmenso de la etopeya
cuando escribo de tanto delirar,
es tanta esa dulce tonada que penetra
como a mis cincos sentidos de felicidad,
esos conciertos de Frederick que embelesa
como a vuestra misma alma hasta la galaxia astral.
“Es un mundo que solo vivirá un poeta
al cual solo se inunda de ese melódico mar,
donde se baña sintiendo las piezas
sin poder dejar en el clavicordio de tocar,
os bañáis con la dulce tormenta
que cae sobre vuestro amado entonar,
¡ay qué locura es esta naturaleza!
que de ella respiráis la historia y su amar,
es todo ahora el soñador debe ir a dormir,
ya sabe su destino a donde va llegar,
es ahí donde debe ir,
y de cantares se va a llenar,
de etopeyas al mundo hará latir,
y de melopeyas él se llenará,
va ser un compositor,
o es aquel pianista de tenue sentimiento,
que dentro de él solo respira ese amor,
que es el que hará vivir en los conciertos,
como de Frederick Chopeen de lo soñador,
hasta sus mismas obras de ese sumiso momento
entre contrabajos, clarinetes y piano,
violines, oboes y chelos,
él hará sentir lo de un compositor romántico,
oíros va ser como la voz del cielo
que calmará a vuestro costado,
os hará sentir que es de la música su eco,
que solo vive en lo mágico
entre un semblante de sueños,
ahí dirigiendo a su obra de lo amado,
sintiendo en el aire esas voces de sentimientos
que cantan de su corazón contristo y apasionado,
o cuando interprete el largueto,
concierto para piano número dos en fa menor,
de la obra veintiuno de tonos completos,
entre cadencias y apoyaturas de sensible amor,
así a esa gran magia dirigiera de tanto aliento
que en ese mar el viviera lo del compositor,
en ese santuario de trinos tañendo,
viendo la vida que sostuvo de ardor,
y de qué manera tan solo él lo hiciera,
que no se cansaría de dirigir esa historia,
se alegraría tanto en su mundo de primavera,
que él allá o en otro país dirigiera de gloria,
es así cuando un mozo joven quiere a una vida eterna,
que hace lo que sea con llegar a esa victoria
para cantar ahí con sus mismos poemas,
y así solo en la tierra dejara sus escritos en memoria
y así muchos tocaran y leyeran,
todo lo que él amaba en su historia
para que lo aprecien y vivan de esa mágica naturaleza,
así vivirá, así de eso se llenará,
así de eso se alentará y así de eso sucumbirá,
en paz, feliz con lo que siempre había querido,
para llegar a ese reino de muchos sonidos,
qué alegría va ser en su espíritu,
nada de dolor habrá ante ese paraíso,
solo el amor a su pasión,
nada más que eso que es su mundo bendito,
nada más y va ser así su gran amor.
Imberbe jovenete soñando con tener una vestimenta;
así como del siglo diesi y ocho,
vestirse pero eso no hay ahora en esta tierra,
y solo trata de ponerse un atuendo hermoso,
pero cuando va entre las sendas,
siempre por dentro sintiendo lo glorioso,
que hace arder a su mismas venas
de esa gran pasión que le embelesa,
a veces quiere en un teatro estar,
actuar en una de esas óperas de Mozart,
vestirse así y ahí actuar,
sintiendo que la música es su gloria,
que no hay otra pasión que pueda rozar,
sino el lirismo de su poesía loca,
así es y a veces no debe callar
sino gritaros ante la inmensa órbita,
así toda esas ansias de cantar
entre la actuación de las voces tenoras,
de sopranos a lo lejano de su arrullar
para sentir tan solo que el roce de su euforia,
viviendo en ese mundo pasional
que solo en su pasar quiere una viva historia,
para que todo sea magistral
amando a su espíritu y a su futura diosa,
es tanto su esperanzad
que a su presagia espera esa doncel hermosa,
así a ella él seguro amará
y su vida será de esos dos amores,
será en su vivir un recitar
si la vida le permite esos olores,
aunque por lo menos uno va ser felicidad
y así poder sentir fervores,
nada de congoja hubiese en su esperar
y así su existencia fuese cantar y muchos acordes, de esa historia pasional entre sonidos de sus composiciones, es lo que se espera de ese compositor de paz, que haya vida en la historia del sonido solo que perfume de flores.

viernes, 27 de enero de 2012

Silenciosa quizás estála noche, Una noche lúgubre floreciendo hacia su calor
perose oye sonar un enardecido piano,
tocándoloun rapsoda entre acordes,
en un nocturno mágico,
obra cincuenta y dos número dos de ensoñaciones,
porque él la toca de lo trágico,
amando a su vivir de ilusiones,
de querer seguir solo ahí quizás como un pájaro,
ser libre de esa pasiones,
contemplando su mundo romántico,
sabiendo que es él compañero de Chopeen,
que se alimenta de su plectro sonado,
y que tocará en la eternidad esas entonaciones
entre baladas y valses de lo apasionado,
así sienta febriles resquemores,
así elija una pieza que exprese lo regocijado,
él sabrá ya qué tocar en el piano de modulaciones,
Amar lo tiene el corazón a un mundo soñado,
paraíso de su bosque,
solo que ahí en brincos a eso amando,
destellos de ese centellar de soles,
por ser lo que tañe a un vivir inspirado,
que están llenos de esos bemoles,
los cuales no dejan de tiritar en el piano,
entrecuerdas de esas dulces voces
las cuales el vate tiene hoy escuchando,
yllenándose de esos roces
que van en el entorno sonando,
solo que de sonidos dóciles,
de esa poesía del nocturno poetizado
que solo se llena él de inspiraciones,
por sentirlo así de lo mágico.
Termina de tocar esa obra de Frederick Chopeen,
empieza con otra en esa solitaria morada,
y decide tocar otro nocturno esa noche,
y solo su pasión toca la obra quince número tres de romanza,
yesa obra al tocar en el piano aparecen flores,
más verdor alrededor de esperanza,
siente que esa obra es la salvación de su entonces.
La música hace magia,
se da cuenta poco a poco cuando toca de mil pasiones,
la misma lira hace florecer a su tocada,
y solo recuerda a un amor que ama de ardores,
que quisiera tener ante su alma y cama,
perocómo hacerla aparecer si no sabe dónde duerme,
quisieraél verla seguro y tocarla,
decirle tantas cosas que en su noche fenece,
a pesar de ser una obra que le da venturanza,
que solo quisiera decir a ella aparece,
pero no viene en su felicidad desventurada,
qué hacer así solo tocando sin lo tenue,
prefiere quizás fingir que anda feliz,
mientrasque en realidad su ser en cicatriz siente,
por solo vivir en recuerdo lo infeliz,
y recordarla por el pasado que le duele.
No sabe dónde mirar para no verla a ella,
pero la ve como si anduviera en su frente,
peroeclipsada es esa estrella,
es tan diminuta que del corazón se pierde,
que al alma en migajas lo mella.
Quiere que su paisaje sea verde,
pero no es ese matiz en la tierra,
sino un color fusco que zahiere,
solo que de la felicidad no está en la realeza,
porque no anda la mujer que él quiere,
solo hay colorido en piezas,
que él toca, pero en el fondo hay muerte,
porque vive así el poeta en su poema,
como melódico al tocar eso siente,
que al ver tanta magia trae problema,
porque no le hacen su deseo que apetece,
y eso para él es un anatema,
que solo poco a poco en los segundos crece
y es lo que le derriba a su naturaleza,
por ser un amor en el cual vivió de un para siempre,
y ahora por no tener es maleza,
solo su alma floreciera con aquel ente,
porquedormiría ante la felicidad y nobleza,
por sentir nuevamente ese aroma de su presente,
por volver a nacer en el fondo de su belleza,
amarla fuera de él tan eternamente
que olvidaría las elegías de su dureza,
la acariciara en su cuerpo tan dulcemente
que no dejaría de amarla en su riqueza.
Seguro la consumiese fogosamente
para así avivar más a su tristeza,
pero no anda aquella dama lastimosamente
y eso destroza al músico poeta.
Suena de ese rapsoda la obra quince número uno tiernamente;
qué hasta cantado suena,
solo esperanza quizás de él en verdad se presiente,
seráque al tocar aparecerá la doncella,
así vendrá aquella luz en su ente,
para que así lo luctuoso en paz florezca,
y así no dañe más a su corazón y mente,
sino avive de lo que anhela,
por ser su grandioso querer que quiere,
porque le dio armonía y velas
cuando tocaba el piano apasionadamente,
recuerda eso como si fuese hoy de terneza,
y que seguro llora por la dura nostalgia que hiere,
como hoy de aquella damisela.

Toca y toca de pasión fonética,
por sentir que es su beatitud de la vida,
por ser una obra que desprende ilusión poética,
por confiar que quizás Dios le mande a su afrodita,
para así de su mundo se vaya el alma patética
y vuelva esa que cantaba de sinfonía,
y sienta ya el piano su romanza frenética
que desprendiese por aquella dulce alegría,
y de repente el al tocar esa obra llega del cielo la belleza,
su amor que quiso y que quiere de armonía,
solo al verla bajar por Dios en su naturaleza,
expresa en el piano más lira,
a su mujer la besa y la abraza de terneza
diciéndole que estarán juntos hasta que Dios decida,
jamás su romance de paz se perdiera
porque el anda en un libro que se llama Biblia.
Músico: “Nuestro idilio está ahí de nobleza,
ahí viviendo entre santos de vida,
por fin os veo y os siento mi damisela,
tan junto de corazón a corazón de alegría,
bombeando por vuestra tez tierna,
y que te acaricio como al piano de melodía,
tan suave y dócil es tocaros mi belleza
que siento que ahora soy feliz en la vida,
que antes eso necesité en mi tristeza,
y aparecéis ahora a tanto dolor,
solo quiero que esto sea eterno,
que no haya ni un anatema amor,
porque yo os amo tanto en mi ser tierno,
que en él tendréis caricias y calor,
mis palabras saldrán de mucho venero,
ahí junto a ti más en el piano de pasión,
así los dos en noches durmiendo,
en el río nos bañaremos de lo enloquecedor,
y siempre a vuestro cuerpo estaré oliendo,
lo querré como el planeta quiere a su sol,
de ti en anocheceres y amaneceres estaré comiendo,
así de vos ambrosía de mí corazón,
tan loco y enamorado de lo bello,
que Dios dará más magia a esta ilusión,
que es real viviendo en este paisaje mi cisne cuello,
que ahí sois mi centro de eterna inspiración
que estaré abrazando siempre de lo tierno.
Por ser aquella inmensa pasión,
que conseguí de los mejores momentos,
y que recuperé en una pieza de lo esperanzador
para vivir de este gusto pleno,
después de esperar cuanto tiempo,
y solo llegó ahora esta soñada pasión,
me hace feliz el corazón y de regodeo,
que no puedo ni creer que sea real este amor,
pero que necesito y que quiero
para vivir por fin la felicidad de mi interior”.
Damisela: ”Gracias amor, solo quiero que sepáis que yo te amo,
que andaba mal sin encontrarte en el inmenso mundo,
y aparecí gracias a vuestras suplicas de lo lastimado,
yquiero vivir eternamente a tu ser jocundo,
quiero amarte con todas las fuerzas de los océanos,
quiero dormir con el ser que dormí una vez de fortunio,
que hicimos el amor en cópula de lo amado,
que fue una noche de entrega a lo profundo,
descansando y nuevamente en lo copulado,
Recuerdo que vivía de esa noche y otras contigo de arrullo,
que me hicisteis desprender tantos orgasmos,
como de mi vagina a vuestro glande,
me gustaba tanto esos días amarlo,
pero que ahora te amaré a lo imaginable,
porque ahora soy feliz a vuestro lado,
vivo de esa pasión agitable,
que es cuando vos tocáis el piano,
que suena él de ese bellido romance,
que me hace ver en los sonidos a ti yo besando,
queriéndote y amándote,
y que ando entre caricias férvidas a tu cuerpo arrullado,
oliéndote y de amor aromándote,
cómo yo te amo nadie te amará,
nadie amor de mi alma,
solo yo podré daros la magia pasional
y la alegría que duerme en mi cama,
la alegría que despertara hasta la galaxia celestial
pornuestro romance que en paz canta,
y el delirio que hasta el universo alumbrara de lo magistral
que Dios al verlo así de alegríaamara”.
Músico: “Igual yo os amo amor de mi milagro,
Por ser aquella damisela que apareció,
Que me ha dado ahora tanto agrado,
Que me hace sonreír de mucha emoción,
Que solo quiero gritar que te amo,
Que eres mi juventud y vida de pasión,
Que esto no se olvida en lo apasionado,
Que permanecerá hasta el reino de Dios,
Ahí amor solo ahí de esa gran pasión sin decirnos adiós por ser dos.
Damisela: “Que lindo me recitáis, me decís mucha belleza,
Me gustad vuestras palabras que expresáis, quiero darte mi carne fresca, férvida,
Que me hagáis la dulce lujuria, y quiéreme ahí de terneza,
Ahí quiero que me beséis de dulzura, y que no os despeguéis de mi riqueza,
Soy solo vuestra en la holgura, y por eso amadme de grandeza,
Hazme sentir como la otra vez mujer, que me enamoró más,
Sois mi hombre apasionado de mi ser, que no quiero que se vaya como estrella fugaz,
Y que me toquéis el nocturno nueve número dos, ese allegro andante que me dio felicidad,
Esa obra que al escucharte me enamoró, por ser esa pieza nuestra música de serenidad,
Nuestra historia del romance de la pasión, y que ahora renació de celebridad,
Ese nocturno tan hermoso a nosotros dos, que suena solo de amenidad,
Que nos acaricia amor sin decirnos adiós, sino rozándonos de melosidad”.
Músico:” Así es esa obra que nos pertenece de amor, por ser esa alegría de verdad,
y que hasta hoy esas notas toco ahora para vos, para que os guste mi deidad,
por ser mi osa que me daba y que da calor, porque estáis junto a míde paz,
y que te beso la boca llenándome ese sabor, que había querido tanto en mi besar,
sentir y acariciarte el cuerpo de ardor, porque no he podido nada olvidar,
pasar mi nariz por tu espalda de amor, para que recordéis que te amo en la eternidad,
que contigo aquí en el piano tocando de ilusión, sé que soy feliz amándote de tranquilidad,
aquí embelleciendo el sitio y a ti de inspiración, hace que nos amemos más,
os entregáis tanto a mí de adoración, que os hago el amor en el lecho dulce,
que respiro y acaricio vuestro cuerpo de tanta incitación, que hago a que desprendáis el orgasmo dúctil,
os incitáis tanto que me pedís más ardor, y os doy más y solo dais luces,
al sitio de esta hermosa y férvida copulación, sintiendo que soy tu hombre de virtudes,
que no dejaréis de amar en la pasión, por ser el hombre que te ha dado beatitudes”.
¡Cómo sueño con esta pasión! pero me hace falta ese amor.

Ahora viajaré en el nuevo viaje de mis sonidos,
de aquellos tañeres que sonarán en historias,
y que absorberé de lo bellido,
y que Dios me ofrecerá la inteligencia ante mis trovas,
cuando escriba para haceros de lo querido,
y de lo amado ahora en esta sonada de euforia,
que es un vals de Chopin de lo sensitivo,
dócil en su misma alma al recitar su pintada memoria,
solo cuando suena eso dúctil de lo expresivo,
y que es el vals número siete de la obra sesenta y cuatro,
ahí enfoco como el refugio de mi surrealismo,
ahí debo estar ahora con lo amado
y no dejar de sentir lo que sentía antes de sentimentalismo,
porque este será mi seguir con entusiasmo,
no habrá soledad en esta prosopopeya,
sino sonidos que sonarán a mi alma joven aromando,
y porque esto en mi vida no será una guerra,
sino una lucha por lo que anhelo en lo sagrado,
no puedo irme de aquí porque ya antes pisé esta tierra,
este mundo al cual me llené de lo enamorado,
y porque es de mi corazón el poema,
sus palabras que ayudarán a formarme como musicastro,
y al final de la vida como un vate de estas letras,
que sueña con la vida de este arte esperanzado.

Mi espíritu se apoya en este eco,
eco de los sonidos de este atardecer,
de este vals que suena de lo ligero
y que me llena de amor en el ser.
A pesar de estar perdido en el sendero,
ahora ando con la lidia del vencer,
para obtener paz y mi dulce anhelo,
y de ahí gritar que pude crecer,
y que no bajé la silueta hacia ese cielo,
porque es todo de mi ente el nacer,
por haber pasado una vida de malos sueños,
pero puede tal vez que sea con ese querer,
a un tiempo cuando sea el momento,
y decir que somos ese repentino contener,
pero ahora solo quiero consumirme en el fuego,
como del amor al cual no quiero perder,
porque es la música quien me hará tener apego,
y es solo que mi enternecer,
y es imposible que me aleje o me vaya de este nuevo viaje.
No abandonaría este conmover,
sino daría pasión y las palabras de un vate,
porque desde que os conocí habéis sido el florecer
como a mis mismas letras de arte.
No puedo abandonaros porque ya estáis en mi ver,
ahí os centráis y palpitáis de romance.
Os amo tanto como las lágrimas de Dios a su pueblo,
os amo como el día a su mañana brillante,
y os he querido porque habéis estado entre mis consuelos,
cuando más os necesitaba estabais ahí,
solo que alentando con vuestros ecos,
como de un piano y un violín,
por eso que eres mi prosopopeya de sentimiento,
al cual no puedo dejar de amar en mí.

La marcha fúnebre de él tornará solo a dos amor. Respuesta: a esa pasión que busco es la música
y a ese amor que busco es eterna ternura
Sí os tumbabais entre la marcha a una tumba, y porque no quiero lo perder, por ser mi lucha
solo que vuestra alma en sonidos,
recordándoos lo que vivisteis en tristeza que retumba,
por un pasado no prometedor de lo convencido,
buscasteis crearos a eso que en paz al final quizá se esfuma,
o que quizá la vida os hizo solo que lo ludibrio,
por creer que iba ser un amor y solo zahiere y zumba,
como en burlas a vuestro ente de lo extinto.
Que no sabéis a qué orbe yacer que a una tumba,
ahí fenecer y esperar la voz de Dios en lo requerido.
De esa vida que esperamos todos de la eterna mazurca,
para no oler más lo amargo del destino,
sino respirar aroma en el cielo de ternura
y olvidarnos de una vez del malogrado suplicio.
Y la tonada que entona de la marcha fúnebre de la música,
suele ser tan solo que la obra setenta y dos número dos de lo dolido.
Así como vivís vivo yo en la poesía de vestidura,
así con ese dolor de joven por un delirio,
queriendo quizás irme al cielo con mi poética túnica,
pero no puedo porque soy joven y debo vivir mi destino,
y ahí quizás con la esperanza de florecer a una ganada lucha,
y absorber todo ese amor que es de mi ser latido,
porque hasta Dios hoy aquí me escucha.
¿Saberos él lo que quiero en mi ser querido?,
amares con toda la eternidad a esa dulzura,
ofreceros amor porque no dejaría de sentiros,
abrazaros en mis manos como plumas.
¡Oh amadas teclas del piano de surrealismo!,
oleros como si fuesen aquella dama musa,
y que esperaros será mi último anhelo exigido,
para romancearos como antes de amor y lujuria,
para respiraros de pie hasta vuestra boca de lirio,
y solo acariciaros con mis manos que han llorado por vuestra blancura,
y que han estado añorando todo de vos en martirio,
y hasta que os tenga o sea otra sabré amar de ternura,
sea quien sea vos estaréis en ese fuego de idilio.
Ahí el amor será o no en mi vida cruda,
y el cielo y universo iluminarán por lo pedido,
y perseidas a mi alrededor y luna
dando solo que el acompañamiento de mi ser sufrido,
por comprender que ha vivido solo una burla,
después de daros todo para vivir sin lo olido,
entonces vendrán cuando sea feliz ante mi,
y nada de lo lúgubre habrá en la existencia,
pero siempre lograré lo que es arte en mi vivir,
y de eso me llenaré hasta conjeturar ese amor de querencia,
pero primero lo que mi alma devota y ama en lo feliz,
luego ese aroma quien ayudaría a elevar mi presencia,
si así debe ser ante mi coexistir,
si así debo estar en mi alma de poeta.

El presagio del amor: “Sino con ese amor u otro que venga en su existir,
y de esa hermosura las constelaciones solo luz ofrecieran,
y conjeturaros a ese querer amaríais por fin,
que os fundiríais hasta lo más íntimo de su carne férvida,
ahí os comeríais todo hasta por fin sonreír,
y decir que en la vida a pesar de no ser aquella belleza,
solo ahora tenéis lo que buscabais en tu poema feliz,
y solo ahí os alegraríais con esa dulce colmena,
seguro la tocaríais como un hermoso violín,
o como un piano de aria sin dejares de comer entera,
alumbrares por fin ahora en ese tiempo de festín,
holgorio entre vuestra vida con aquella cortesana o condensa,
ahí besaréis y amaréis como se debe hacer sin sucumbir,
solo rodeado de ese aroma que os perfumará de grandeza,
que os gustará y si va ser el amor,
va ser solo que esa estela de vuestra vida eterna,
y ahí viviréis hasta el reino de Dios
porque es lo que habéis soñado antes en tus poemas,
y así debe ser cuando amáis y que amaréis cuando consigáis la pasión,
no olvidaréis nada sino recordar que es tu lema.
Amar a esa mujer cuando se consigue de ilusión,
y no apartarse si viene u otra será sin anatema.
Viviros entonces así en la vida esperando ese corazón,
y vendrá y os dará solo que flores rojas y violetas,
llenas de coloridos os pintará esa mujer de flor,
y ahí gritaréis al cielo soy el más regodeado poeta,
enamorado desde que sentí que iba a encontrar ese olor,
y qué olor fuera si llegáis a mi centro belleza”.

Salí al campo de noche porque quise pensar a conciencia,
a que vida me iba a dirigir,
y descubrí que es a la prosopopeya,
y es a la que no debo dejar morir.
Porque es la médula de la vida,
que sin ella vivo en un averno,
porque ahí están las melodías,
las sonadas que me dan lo eterno.
Las voces sopranos que son sumisas,
el arte de seguir solo que viviendo,
y no alejarse de esos tonos que andan en las brisas,
por ser todo tu lenguaje poético,
y que descubrí en las afueras del campo,
sintiendo ahí en ese lugar un viento,
solo que me hablaba entre voces el piano,
voces fantasmagóricas de su acento,
y que entonaron a que siga mi sueño que amo.
Que ahí al futuro encontraré mi logrado sentimiento,
ahí mi ser, mi sueño estarán bailando,
como del gozo de la vida que es mi médula,
mi mismo corazón que cantará de lo realizado,
y no será ya en sus promesas mi alma crédula,
sino una calma en todo el faz de la tierra del amor,
con lo que había querido de terneza,
y que estará apoyado en mí de eso fogoso del ardor,
así como un volcán estallando de esa lava que aterra,
todo por esa esperanza de mi erupción
a que dé y tenga esa hermosa sacra tierra,
para pisar y regocijarme de pasión,
porque ante el destino eso no será una guerra,
sino sonidos que bañarán de consolación,
de lo digno o merecido de mi alma tierna,
la cual vuela y se asemeja a esa entonación
y que suena y resuena en mi piel de melopeyas,
y es solo que aquella música clásica de efusión,
solo que entonando como en frases de etopeyas,
las cuales recitaron entre la noche en el campo de renovación
y es lo que me ha dado tan solo que la férrea fuerza
como de seguir en esa profundidad de inspiración.
Solo que a seguir en esa noble y grata naturaleza
porque eres tú solo que de mi la médula o corazón,
la sangre que me hace vivir entre días y noches frescas,
solo que tú la energía y vida de amar en infinito amor,
por ser de mi alma la iluminación godesca
que me acaricia en sonidos de muchísima pasión.

Concierto para piano número uno del romance larghetto,
que empieza en violines sumisos,
ahí en ese escenario de mi alma sintiendo,
como vivir en un hermoso paraíso.
Estando ahí solo que a eso en el fondo latiendo,
y por ser de mi vida mi compromiso,
de quereros y adoraros como al cielo,
como a Dios de tanto delirio,
por ser el centro de mi anhelo,
y porque formáis parte de mis versos y sonidos.
Suena tan bellísimo eso,
que siento tanto idilio,
por ser esa pieza tan dúctil del sentimiento
que Chopin compuso de amorío,
qué humano fue al crear esos acentos,
que dictó en su mundo ese libro,
para recitar poesía en romance de lo tierno,
tanto así que uno vive esa fantasía de lo bonito,
que siente mil pasiones en un corazón etéreo,
de eso que resuena en cadencias y trinos,
en corcheas y fusas de lo enérgico,
es todo tan dúctil de su destino,
y que ahora me ofrece para oíros de lo esbelto,
qué dandi fue en su lenguaje escrito,
qué poetastro del piano fundió lo céntrico,
así de ese amor que ha dado a mi oído,
corazón y alma de su romance larghetto,
o como de sus polonesas y mazurcas de idilios,
que son bellos como los nocturnos poéticos
que suenan en su alma de Polonia de sonidos,
y a mí en la esperanza de dos amor de lo eterno,
y que quiero tan solamente en serenidad de mi destino,
por ser esa eternidad a que yo solo veo y siento,
que es la inmensa calma de mi alma para vivir sin torbellino,
sin tornados y sin pérfidos truenos
que vengan a desgarrarme a mi de lo mezquino,
por eso espero tan solo que eso bueno
para que solo me llene de armonía a mi eterno camino.

Ludwig van Beethoven mi idolopeya en la etopeya.

Mejor es escuchar la obra de Ludwig van Beethoven,
su claro de luna del movimiento uno,
y así imaginarse a qué sentimiento centró su orbe,
y ahí es donde el siente fortunio e infortunio,
así vivisteis cuando era esa noche de luna entonces,
que decidisteis poneros en el dolor profundo
cuando tocasteis vuestra obra que no lleva bemoles,
sino sostenidos con la clave de mi del adagio sostenido,
con muchas notas suaves y ligeras de ardores,
que compusisteis por lo que estaba de martirio.
Os preguntabais en cada sonido ¿porqué, porqué, porqué?
porqué el hijo del padre ha sido virtuoso y a la vez sufrido,
porqué me has de elegir como instrumento del crecer,
para solo yacer en un laberinto perdido,
quiero salir a otro sentir en el amor que me hace fenecer,
que me da sin saber ella lo dolido,
y más porqué me dais el don y me hacéis ensordecer,
así cada vez en todo mi oído,
o a caso no visteis que eso me haría doler,
porqué sois tan injusto conmigo Dios del paraíso,
porqué no me devolvéis mi único querer,
así como ese necesitado sentido,
porqué me alejáis de lo que sé hacer,
y solo me queréis tener en el infierno fallido,
si solo de joven crecí para esto contener
y ahora preferís darme una ruta de escalofríos,
y más con un amor que me mandáis,
solo para que se burle en lo ludibrio,
si de verdad ella me amase más,
no andaría con mi hermano de lo mezquino,
si amad que no me venga hacer eso de pertinaz
sino mi corazón en melodías negras sonará de lo frío,
en tristezas en la vida mía solo se tañerán
por vivir una condena de mis sentidos.
E injusto son con el y a veces por eso es misántropo,
no entienden porqué se comporta a veces de un mal talante,
si entendieran que no puede ser filántropo,
solo porque no tiene en su ser lo apasionante,
lo más necesitado en su ser añorado,
de eso que él más quiere en su oído faltante,
que es sordo como podría escuchar.
“Hablad más alto que no escucho,
no veis que me hacéis enojar,
que no puedo escuchar casi nada en el mundo,
entendedme o comprendedme en lo me toca estar,
o ved vosotros de lo que cada día sufro,
pero que le vais a importar,
solo preferís burlarse y darme lo impuro,
con palabras pero no me dejo y reacciono de lo fatal
por ser felones y enemigos en mi infortunio.
Que cuando os enteréis de mi sordera,
qué dirán el genio cayó como lo inculto,
ahora no tiene la sapiencia,
solo cae en un mundo oscuro,
como el gran Beethoven de poca huella,
solo se observará un hombre solo y nocturno,
el que rondará por noches grotescas,
sin tener una esperanza ante un Dios injusto.
Que pareceré en las afueras de la vida plañidera,
caminando entre notas de lo difunto,
porqué me habéis de hacer esto en la querencia,
¿queréis que viva así toda la vida sin lo pulcro?,
que respire un aroma que mate más a mi conciencia,
de saber que no sirvo como hombre de lo culto,
que ando rondando un paraíso de tinieblas,
que solo oigo voces que matan más mi mundo,
y mis composiciones son tan solo que tormentas
así como el claro de luna sin el amor profundo,
sino sonando como en voces deblas,
así de triste y cabizbajo me toca en lo duro,
así como de mi vida dolida de dolencia.
Cómo quisiera estar rozando mi sentido de fortunio,
pero no así este que me toca vivir de lastimera,
sin saber si existe Dios o no de lo puro,
o si estáis porqué me hacéis vivir en la sordera,
no podéis darme el sentido para ser de verdad hijo tuyo,
y así dejar florecer mi arte de grandeza,
por ser lo que en mi vida crecí y que arrullo,
no así como me dejáis solo en la tristeza,
solo sintiendo que vivo sólo sin orgullo”.
Pero ningún hijo de Dios está olvidado en lo lloroso,
Dios dio a este hombre ante este pesar lo bendito
nada más que el sentido del oír en su corazón silencioso,
aprendió a encontrar al silencio de los sonidos
y ahí fue cuando creció más el arte de lo hermoso.
Componía como un gran maestro las piezas de lo bellido,
agradeciendo a Dios por eso dado en lo glorioso,
sabiendo que si existe él en su destino,
y que ya al saber que oye es feliz en el fondo.
Puede vivir componiendo de lo más amado,
de lo que antes no había esperado de holgorio,
pero que has visto y sentido de milagro,
que os da la vida y Dios un don de lo sonoro,
algo que tendréis ahora componiendo de lo apreciado.
Y así lo hace en una sinfonía nueve de la alegría,
como un hombre crea una obra de lo que jamás se ha creado,
así de profunda en todo sus versos de la sinfonía,
algo que ahora nos dejó de lo mágico,
para escucharos de esa hermosa polifonía,
de esos sonidos que son más que apasionados,
y que renace su vida en ese tonar de alegría,
olvida todo lo zozobro de su pasado,
y recobra con un semblante de vida,
qué hermoso es para él en ese entonces llorado,
y solo es por la felicidad conseguida
que creyó que estaba abatido en lo cabizbajo,
y mirad en que se salvó ante una oda bellida
apareciendo él y a los mismos instrumentos mandando,
para que suenen en su presencia querida,
los cuales son de su corazón encarnado,
los cuales suenan con inmensa sinfonía
y que hacen sonreír a Beethoven de lo filántropo,
que ya no viene ser un ser de la morriña
sino un ser que ya no actúa en lo misántropo,
así es como se vive cuando se renace en alegría,
para recibir a Dios hasta tu último aire respirado,
así estuvisteis seguro en esa larga vida
hasta que no pudisteis más y os fuisteis a ese reino sacro,
igual me iré yo amigo de estas líneas,
a ese paraíso con mis dos pasiones de lo alegrado,
ahí igual que vos que debéis de estar con esa afrodita,
y yo igual iré con aquel perfume de lo enamorado,
así con la amada inmortal allá en el desdén de la vida,
donde hablaremos y sonreiremos de lo logrado,
así viene a ser mi aventura de la existencia conseguida,
para luego veros y estar junto con mi dama de lo sagrado.
Por último sois de mi poesía la idolopeya,
solo que vos y otros en la vida de mis escritos,
redactando lo que pasó en sus melopeyas,
y porqué fue la causa de sus torbellinos,
por tales razones que sucede en su apariencia,
pero salvaros son al final como el paraíso,
y es lo que quiero igual yo en mi presencia
para no vivir de esa cruz pesada de lo sufrido.
Las letras solo en armonía del sentir cantan.

Cómo soñaba con tener él paraíso de aquella doncel dama;
yacerde lo imberbe hasta lo arcaico tocándole el piano,
era lo que le hubiese gustado en cada alborada,
yde amares con lo que ofreciera de mi corazón sonado.
Recuerdo que bailaba cuando me oía tocar de elegancia,
vestía de un acicalado zafiro fulgurando,
qué hermosísima ella en ese baile estaba,
sentía que era el obsequio que Dios en ese soplo me había regalado;
la veía con ternura, ternura a mi dandi cortesana,
sabiendo que entre mí composición era lo soñado.
Me sonreía con un semblante de luz diáfana,
sentado yo y viéndola desde el piano tan enamorado,
por su beldad que solo tenía mi núbil amor,
y que por nadie iba en esos momentos ser besada,
solo que de mis labios iba a suspirar el dulce olor,
que entre noches ya le arrollaba.
Vencida ella entre mis brazos de pasión,
queriéndome solo que su aroma de paz que regalaba,
pero ahora que no te tengo me es rencor,
tan unida a mí en carne te sosegabas,
que ahora del firmamento solo me es un fusco color,
no hay constelaciones ni la luna brillada.
Todo se apagó desde que se fue el amor,
fue como si mi corazón hubiese quedado en el Antártida,
muriéndose del frío sin el ardor,
queriendo por lo menos un milagro de una hada,
o que esa luz fuese solo que de mi frío la salvación,
anatema de mis días se fueran por aquella llama,
la cual me ardería sin vivir en el resquemor.
Cuántos no quisieran vivir en el amor la felicidad,
que ni un mal se atraviese como el mongol de lucifer,
para que así no matéis en esa lira de maldad.
Solo mi ánimo quered que en luces de sus ojos de él embellecer;
y así no reposéis alma mía la frialdad,
y solo os acaricie esa llama del querer,
que tanto mi alma anhela que llegue en mi soledad.

Este era un hombre que soñaba solo que con la música, le tenía tal cariño que en lo imberbe disfrutaba de las tonadas, de compositores clásicos, entre ellos: Bach, Mozart, Beethoven, Liszt, Chopin, Gustavo Malher entre otros. Él al oír esas obras, manifestaba esos sonidos en historias mágicas, muy maravillosas que al leerlas os metíais tan dentro de esa tonada, que os regocijabais por tal magia que tenía la poesía del romanceador, no sabía otra cosa que hacer, era su oficio romántico de su lirismo, se olvidaba del mundo, solo sintiendo su interior que palpitaba de esas notas que ni ha perdido; porque aún las oye en las líneas de sus versos, y que oirá en su paraíso, seguro porque es su centro de inmenso e indecible amor de lo eterno. Hasta lo rancio sueña que suene su vida así, si ya es con una mujer que de verdad Dios os mande, que sea la estrella fugaz que os alumbre de amor entregado, os alegrará como el sueño llegado a vuestros ojos célibes, y ninguna tristeza tendréis.
Cómo se mete en la música hasta imaginándose que él está en ese piano tocando a esa hermosa cortesana; que él anda aún en el recuerdo de un momento amado, que le sonreía bailando con su esbelto vestido, viviendo enamorado por la música a través de una dama, solo que en ese matiz u aroma se acariciaba, que en noches fue cálido, lujurioso encima de ese armonioso piano, que era el lecho de lo apasionado, qué vida poseíais cuando amabais a lo agraciado de vuestro corazón amado, ahí es cuando se pregunta a la vida o a Dios, ¿será que ni un mal vendrá, para que se pueda convivir en lo real?, real de que son los dos humanos, que son de carne, y que vivís del roce copulado, que os tocáis, que os amáis, y os reís de ese sueño del amor que puede ser primavera o invierno. Fijaos ahora las palabras del que siente lo que ha vivido: “Que nos hemos quizás de la vida de una familia cada uno fugado, por solo tener el querer que en poesía amamos, por no querer ellos que nos unamos, y ella tenía la idea de fugarse conmigo, al pasar el tiempo nos quisimos más que antes, como locos en una llama del amor, pero todo lo disfrutado solo llegó a un final que me ha matado, por una enfermedad de su ser de dolor, cambió la personalidad de su ser humano, no había vuelta atrás en la pasión, ni se sentía ya su dulzura que antes daba de lo enamorada mi bella cortesana. Se fue el sueño cultivado. Ahora solo toca en la poesía esperar ese regalo, esa llama que caliente mi vacío, mi mundo, mi corazón, que lo hagan vivir nuevamente, pero en el eternizado, si es nuevamente solo que vos misma en lo alegrado del querer, mirad que me tendréis, sino ya Dios me pondrá la magia del anhelo deseado. No olvidaré aquellas noches y amaneceres del roce lascivo y apasionado, sé que fueron meses que ni en mi sueño podré olvidar, siempre habrá algo de ti, porque estáis como si fueseis la luz del sol, y del firmamento las estrellas dando su fulgor, no podría separarte u olvidarte, ahora no te quiero es verdad pero cuánto te quise cuando te tenía, es cierto, pero aun así de no quererte un sueño te querrá, y ese sueño es el milagro de un esperar, un día, eran como vivir tantos siglos, sentía que en ese día contigo me envejecía, que me volvía arcaico, vetusto y rancio, devorándote el cuerpo suave, sintiéndole tan entregada, y tan dócil como una ave. Así volábamos en ese día del romance, así con nuestras alas, libres por esos días que eran como mil siglos, qué bello se vivía, qué recuerdos, qué vesania tenía en mi fogoso corazón, ya sabemos, vos lo sabéis bien, fui el único amor que veréis en vuestros años, de las cualidades que en mi ofrecí, no conseguiréis en otro ese mismo afecto a lo más arrullado, ese será como una condena corta, porque luego como ya saben, tendríais esas notas, esa sonada que aún en ti sonara, esos versos que cantaran, y que tu seguro lo hicierais, espero que no sea vano mis palabras, sino que Dios me lea y entienda, sino, fuese locura, rabia, sólo por ser beatitud, un esperar es mi sueño, ahora iré a dormir, y ahí tenerte, sí tenerte bella doncel de mi poesía romántica”. Fue tanto el sentir de su escrito, que se observad la historia de su vida, que ya lo ha hecho, pero si os fijáis bien observaréis a un poeta con esperanza, así ande en las peores de sus suplicios, por eso caminará por una senda con alegría, con ojos jolgoriosos y florecidos por un destino, el destino que es ella, ella de dos, música y amor.

Así viven los que palpitan la tierna mañana de su vida, a la que se acobijaron por siempre, un hombre soñador de su música, de su poesía, es su lira, nada más que su fogosa alma que quema, a unos versos con historias mágicas, que es su nobleza, el querer que solo ama, y la silueta de su universo se emplea en un Dios de una espera, si estuviese, si fuera la divina plebeya el centro de su amor, de esa relación fuese prosopopeya, él sin dejarla en la defunción, y es por solo amares en la riqueza, de su deífico cuerpo de dulzor, advierten tanto en la vida que el amar es peligro, pero cuando conseguísos entregáis de pasión, soñáis solo que con ese delirio, y os acunáis entre poesía real de su interior, absorbéis sus labios de ese ambiente del paraíso, queréis solo pensar que vivís del más feliz e infeliz amor, os hace sentir el humano más absorbido, porque solo os entregáis a esa inspiración, por solo vivir hasta el final de su lirismo, por ser la mujer que da a veces el cantor, cantor de un eco, eco de cariño, por ser a veces en ese refugio su primor. Pero a veces la destreza se convierte en un abismo, cuando envejece el brillo del sol, y queda solo poco brillo, y las llamas del felón se abren de lo burlador, siendo solo que lo libertino,como en la vida de la pasión, provoca a los sentimientos dejarlos sin el idilio, y dejaros solo que a uno en lo adorador, pero no se puede porque está en ese hombre tan dentro que nada es distinto, y solo pena por buscar la salvación. Quizás lejos de este mundo, viviendo lejos de su locura, centrándose a la luz de un fortunio, y ahí acariciar el sagrado cielo de su lucha, llegando de un anochecer nocturno, para recibir a la casta musa, que ofreciera el mismo Dios en lo puro, para que se adormezca de ternura, así las perfidias de las locuras murieran, y obtuviera la figura, amor hubiera de esa plebeya, odio a la vida no fuera ruptura, sino cándido su ser ante la hermosa naturaleza, que contemplara aquel hombre de holgura. Ya cuando conseguís libraros de esas tétricas maldiciones, aspiráis conseguir aroma de esa concordia, irosentonces al desdén entre voces, deesa susurrada poesía viva de vuestra historia.Gritaréis:“¡He llegado a la morada de mis roces!”. El instante de la vida se va a cualquier hora, y os dais cuenta que estáis en ese orbe, el cual es del filántropo Señor de honra, y os abre las alas y los brazos de entonaciones, para que os deis cuenta que es un Padre de gloria. A pesar de creer que vivíais en un infierno, ha sido el que os ha hablado poco a poco sin que os deis cuenta, y ha recitado en parábolas del vivir eterno, hasta que durmáis en ese lugar de terneza, ahí solo viven los vivos en almas ante el cielo, los que dan en poesías dóciles melopeyas, sin quejaros y vivir ante el ambiente amado de los hombres buenos, para no olvidarse que existe una esperanza de querencia.

A veces así somos los poetas en la vida,
Escribimos lo que solo sentimos,
Es como cantar en una melodía,
En voz dulce a ese ser de cariño,
A la cual ve él siempre de alegría,
Sin dejarla morir en su destino.
La queréis como si fuese la eternidad,
No queréis apartaros de ella,
Por ser la magia de vuestra felicidad,
Y porque es toda esa dulce belleza
Que vive en tu corazón de poesía angelical,
Y por ser la música la identificación de tu prosopopeya,
A quien devotáis aroma de amor,
Es lo que hace a vos crecer de etopeyas,
Y porqueos da la vida de un gran color
Y del lenguaje sabio de la melopeya
Solo que a una hoja en palabras de pasión,
Que ahí en música cantáis a Dios de epopeya
Por ser ese mundo tu paraíso de salvación.
Que es esa misma poesía que escribís de grandeza
Por ser el santificado mundo de inspiración

Aquel hombre toca el piano en ese escenario,
como si acariciara en sus manos a esa mujer,
como si en sus versos de sonidos rezara un rosario,
como a Dios para que venga ese ser,
ese ángel que él tanto ha amado,
para envolverla de ese dócil querer.
Él toca tan dulcísimo el piano,
ahí ese hombre cantando a ese conmover,
en esperanza a que yazca en sus brazos,
así tan dulcísimo es ese ángel de su enternecer,
que hasta quiere adormecerse en sus regazos,
como hasta el resplandecido amanecer,
quizás ahí acariciándola como un piano,
tan divino a ese cuerpo sumiso de su tañer,
sintiendo que es su sentimiento que resplandece,
como a ese amor que llegará,
su amor del amanecer o de la tarde que quiere,
así tan bellísimo esa seráfica del amar,
y de armonía solo su centro se llene,
cuando los mismos dioses den esa magia celestial,
porque él ahí estará queriendo a ese ente,
ahí en ese ambiente de la magia pasional,
por esperar a ese ángel dulcemente
que calmaría su agonía infernal.
Piensan muchas cosas,
pero lo que no saben que es su venustidad,
la dulzura que en violines entona
esa pasión que solo ama en silencio de verdad.
Él pronto estará dirigiendo una hermosa orquesta,
de un concierto para piano de Beethoven,
tan solo que teniendo a su dama plebeya,
dirigiendo ahí con regocijo de explosiones,
así como el Emperador concierto número cinco de ardor,
amando solo que a esa lira de sus versos de flores,
por solo tener en ese futuro a ese amor,
por ser de él en el reparto de dos pasiones
que son la música y a su inmensa mujer de inspiración
que ama solo que en su vida tétrica de entonaciones,
pero que fuese feliz al solo vivir de ese primor
que idolatra hasta en sus sueños de cantos y voces
por no querer desamparar a ese apego de su interior
en que vive de divinos olores.

así tan bellísimo es esa seráfica de su esperar, esperar,
para que la llene de
porque sabe que esa magia vendrá.

o La figura en la vida no lo es todo,
por como os he conocido,
tenéis más hermosura en el fondo,
desde que os miré ante los ojos bonitos.
De todas las fotos sacadas, solo dais un resplandor, que a cualquiera dejas hasta la lejana galaxia, esperando tu olor
Versos de una historia que se vivirá y que se amará cuando se quería.

Jamás acabarán nuestro perpetuo amor

Porque nos hacen esto, si te quiero,
ni siquiera saben hasta donde llega mi aliento.
No me importa la edad de diferencia,
solo quiero respirar tu cuerpo
y yacer con tu dulce belleza
y hablar de muchos sueños
porque me importáis mucho en mi existencia.

Mi cariño por ti es eterno,
no quiero alejarme de vuestro ser terciopelo,
yo no ando en mentiras,
solo ando viviendo porque tu existís en mi momento,
no me duele oír palabras perfidias,
que vienen de la misma familia
de una forma tan vil y mezquina;
aunque yo no las creo, ¡sólo en vuestro amor!,
y sólo en vuestras palabras que me dan caricias
cuando te oigo y os miro con tanta melodía de pasión,
tantas palabras me hacéis sacar de la inspiración,
solo porque ha sido al conoceros y quereros a vos.

No saben que hoy para mi tú de esta manera así vives.
Que ando hoy aquí sentado escribiendo
en esta noche con una música de piano tan sensible;
de que eres aquella luz que no se apaga en el firmamento,
la cual yo veo en esta noche de la ventana y que le mando un beso;
y que ojala roce vuestras mejillas y vuestro bello cuerpo,
no se si lo sentisteis pero lo que sé es que os quiero,
tanto que hoy al escribir veo vuestro reflejo,
y más aquí en la oficina cuando os besaba y que lo recuerdo,
¡no puedo ni en esta noche olvidarte!,
¡qué cosas hace el amor!,
lo que hago es escribirte y añorarte,
solo que esperando para verte mañana otra vez de pasión.

La cuestión de que os escribo, es que esta familia no los quieren juntos;
solo mi hermana quiere que este soñar desaparezca
pero mi corazón no quiere el infortunio
solo la felicidad que es para mi contigo perpetua.

“Te hemos visto cuando le disteis un beso,
ella tiene hijos y es casada”.
Ninguna palabra de ella creo,
no me dan vosotros tormentos,
no me va apartar nadie de ella porque soy su aliento,
su boca, vida, alma y sentimiento,.
Ningún comentario de mal gusto me va a quitar lo que es mi centro:
días, segundos que son hasta con ella bellos,
los cuales no había tenido ni vivido de lo verdadero.
o cuando fuimos aquella vez al templo,
cuando me arrodillé para pedirte que os caséis conmigo en lo honesto;
porque de verdad en mi alma tiembla ese sentimiento,
al cual vibra y traspasa más que de Dios en su reino.
Ahora me iré a dormir,
mañana os veré y espero que entendáis esto,
que solo viviré para hacerte sonreír,
para quererte en lo tierno,
y que solo os amo y os quiero con todo mi corazón ardiendo,
Arias de mi corazón eterno.

Un amor que florece a tantas palabras de lo enamorado.

Hablaré ahora en italiano,
si podéis sonríe amor mío apasionado,
sabes que eso a mi me paraliza,
me llena de vida verte feliz querida,
como en estos días que son bellos,
a tu lado viéndote y sonriéndote amor eterno.
Por eso que nos vamos a casar por lo civil,
haré lo posible con tal de tenerte Osa de mi corazón
y que he vivido es solo por ti
porque te amo con todo el inmenso ardor,
y porque eres esa bella ilusión
que robó mi apasionada pasión
que no había conseguido ante la enorme vida de amor;
compraremos esos anillos que nos unan por siempre,
y así viviré a tu lado eternamente,
y haremos la dócil cópula con todo venero,
y así saciaré vuestra carne de lo eterno,
y a vuestro amor tendré siempre ante mi corazón
que no deja de sonar en mi vida apasionada ante vos.
Te amo osita cortesana de mi eterna vida,
os amo más que al reino de Dios en su cielo,
y os amo porque jamás antes lo sentí así de lo bello.
Y no dejaré de amarte ante esta poesía,
porque eres vos toda mi inspirada vida,
eres aquella pasión que soñé en mis poemas,
y al conseguirte así es toda la hermosa terneza,
jamás me iré osa cortesana de vuestro osote que os ama,
y que en las noches os sueña y os abraza,
así como en el viento o el sol que os acorrala.
Te amo mi eterno amor apasionado y romántico,
de este ser que os idolatrad en lo glorioso y mágico.





Mi Arias solo somos el amor.

Dios florecerá nuestro amor a diario,
siempre si hacemos el bien ante los pecados,
y así desde su reino nos mandará amor de su santuario.
Hay que caminar bien por su sendero porque es nuestra ayuda,
sé que antes no pedí de esta magnitud esta ternura.
Pero me he enamorado de ese ente que me da holgura.
¡No me la apartéis señor mi Dios!,
os lo pido aquí en este escrito por favor.
Vivo solo ante sus ojos y piel de amor,
no la quiero perder solo la quiero amar sin dolor,
estos son los conflictos quizás de un afecto,
cuando una vivienda no anhela que formemos,
como nada en los días de lo tierno,
y solo quiero es vivir con ella y su dulce apego.
Hasta mi misma alma solo en la vida a ella ama,
tanto así que sobrepasa las mismas galaxias.
Si me dais ese anhelo estaré con la pasión más buscada,
así como de un hombre ante una hermosa dama,
que solo es ella la dandi cortesana,
con su figura que me ha dado más que todas estas palabras
para solo amarla en el bien de mi venturanza.
Jamás me hizo escribir la poesía así sintiendo el inmerso amor;
pensé que antes no lo iba a sentir,
pero es así de gran enorme explosión
como un volcán por su ser de jazmín.
Escribo escuchando la consolation tres de el amor,
compuesta por el romántico de Franz Liszt,
y en ella os veo a vos cortesana de mi corazón,
ahí en esos tonos que suenan ante mí
con tanta eufonía de la entonación.
Así de hermosa que es, es igual que ella,
así tan llena de magia y aroma de la pasión
solo de esos sonidos así sonáis ante mi sacro corazón,
el cual os amará siempre en la vida de fortunio,
y porque somos pareja y porque sentimos amor profundo.
La palabra amor va hasta el reino de Dios,
pero lo nuestro va más allá que su cielo de lo puro,
y porque es él mismo quien nos ayudará a crecer sin furor,
porque nos queremos tan eternos de lo pulcro,
tengo fe que será así de lo sagrario,
tengo fe en su amor y en su existir,
tengo fe en Dios que nos ayudará en lo salvado
y ten por seguro que te amo porque eres mi vivir,
llegaste creo como del cielo en una gota de lluvia,
quien inundó mi alma de esa agua de ternura,
inundó mi corazón para escribirte estos versos,
que ahora vivo en esta tarde de la dulzura,
escribiéndote porque eres todo lo de mi corazón lo sincero,
nada apartará esto que siento,
nadie por eso que pido ante Dios que me de lo que más quiero,
y que no sufrirá conmigo porque daré mi corazón de fuego,
que arde por ella como hasta el sol mismo de apego,
y porque esta relación no es un juego,
solo que lo más verdadero que haya podido tener en mi centro
que palpita de el dulce enamoramiento y sentimiento,
por eso que más adelante tendremos eso,
lo que es el sacro y divino casamiento
enlazados entre anillos los dos sin sufrimiento.
De lo que es el amor y más que un te amo y un te quiero,
y es lo que siento por vos mi ángel de mi aliento.
A veces extraño vuestro aroma de tu cabello,
a veces quisiera olvidarme de este mundo,
y solo vivir a vuestro lado amándote de lo tierno,
y ser felices los dos de lo eterno,
y que no haya infierno sino un cielo
para que así vivamos mi Arias de mi poesía,
y pueda quererte tanto mi lucero,
porque eres tú quien da a estas letras melodías,
y porque eres mágica Arias a quien amo con alegría,
ahora me despido y no olvidéis que os amo mi osita.

El amor que triunfará con la ayuda de Dios.

Porque somos así los poetas cuando buscamos el amor,
que lo queremos tener y adorar en la efusión,
y cuando os acorraláis en él y sentís queréis esa pasión,
solo que vivir de esa vida que conducid la ilusión,
y solo queremos amarla con esas bellas palabras,
siendo a esa bella dandi cortesana,
y que la tengo más que grabada aquí en el alma,
como si fuera el aliento que me acorrala.
Y de lo que pasáis en los días con esa dama,
solo veis que es la dulce romanza,
la cual tirita en vuestra vida de la magia tierna,
que queréis con ella vivir toda vuestra crianza
y amarla hasta que el mundo desaparezca,
y que luego de ahí volar al paraíso de terneza,
solo que juntos en la vida sin anatemas,
solo unidos por Dios hasta su sacro reino,
así de fortunio con la dandi tierna
y ahí viviros con lo tenue del amor etéreo,
y siempre seguir enamorado así ante estos poemas,
los cuales son alientos a él ser que amo en lo tierno,
y porque de estas poesías vos será toda mi existencia
con la cual yo amaré de lo eterno,
jamás os dejaré de decir que os amo mi belleza
porque sois solo vos el aliento que anhelo,
y porque estoy completamente enamorado de tu terneza
la cual me dio la esperanza de creer en el amor honesto,
y eres vos aquella dandi quien a mí de magia me enamoró,
igual vos de mis palabras que jamás conocisteis en otro de amor,
y tenemos los mismos gustos que son apasionados,
y siempre será así contigo de lo romanceador
sin dejaros a vos de amar en mi entonación de lo ilusionado,
esta es nuestra historia de poesía eterna,
eres mi cortesana dandi que mi alma venera,
sin ti mis letras de poesías no fueran nada en la vida,
no importa cuánto escribiros mi dandi tierna
siempre viviré a vuestro lado de la alegría,
siempre amor mío de mi alma que os ama más que la melodía;
porque vos formáis todo ese complemento en mi,
y por siempre será este amor junto a vos en el vivir,
que sonará en el mundo en piano y en violín.

Sé que he escrito lo que siento y quiero,
pero vos es todo eso que crece en mi lucero,
nada más que solo que vuestro romance
que siento y huelo cuando estoy a tu lado de lo apasionante,
os amo mí amor de mi vida afable y memorable,
que será ante los cielos lo salvado y lo notable,
nos ayudarán a crecer en esta pasión,
no lo olvidéis cortesana que amo en mi eterno corazón,
el cual sonad como lo sonador de un piano de modulación,
de esa dulce romanza que es esta historia que vivimos en poesías de amor.

La noche me persigue para escribirle a ella.

Fueron varias horas en que no te vi,
pero nos vimos después y estuve feliz,
con solo verte esos ojos brillosos y sentir esa suave boca;
como en mis labios cuando os besé toda,
fue tan dócil besaros en esos labios de rosas,
de estar de corazón a corazón,
fue como sentir la paz de las mil horas,
y respirar a vos vuestro cuello con amor
fue como suspirar un enamorado aroma,
libre que acorralaba toda mi alma de pasión,
y que ahora me acompaña en la noche maravillosa
escribiéndote otra vez de una ilusión,
y que no olvido de mi memoria
nada de lo que hemos pasado de esta bella historia,
entre regalos y detalles que os he dado mi hermosa osa,
y ni hoy cuando fuimos a la iglesia a rezar jaculatorias,
sintiendo ahí que vos tanto a mí me amáis,
pidiendo en rodillas que esto siga con la pasión amorosa
y así de eso a mi me hicisteis sentir que vos me idolatráis
y que no os alejaríais jamás de mi amor que os quiere con aroma.
Me pedisteis una cadena con la virgen María para que os lo pongáis,
ofrezco todo cuando pueda porque os adoro como la raíz a su rosa,
y me siento tan alegre cuando vos me abrazáis
sintiéndote ahí como el paraíso de gloria,
junto a ti de pecho a pecho respirando que me extrañáis
cuando no estamos juntos como en esta noche hermosa,
pero os he dicho que así no esté, andaré en el viento besándote,
en vuestra cama seré la sábana quien os abriga y os abarca,
vivo en esta noche y en las noches amándote,
y escribiendo vuestro nombre en mi corazón y alma,
cuando os veo trato de romancearte y alegrarte,
y sacarte una sonrisa de esos labios míos de mi boca grana,
porque eres aquella cortesana a quien anhelo amarle
y seguir la vida juntos de la romanza realizada,
y porque en el existir no voy a dejarte
porque formáis más que la inmensidad de mi pasión amada,
y porque me he dado cuenta que por mi ardes
y no quisieras perderme ante la vida porque me amas,
sufriríais y fuera como matarte
y eso no quiero yo mi poesía de magia,
porque a vos os amo tanto que ante vos quiero ser inseparable,
así como la sal de su mar,
y porque en este corazón siento tanto amor que es importante
que hoy en esta noche te quisiera besar,
te quisiera tener de ojos a ojos y mirarte,
poderte tan solo a vuestro cuerpo saciar
de besos y tenuemente acuciarte,
y no dejar de besarte y solo poderte amar,
y dejando la magia del amor que existe en el romance
tanto que hasta en las estrellas las veo brillar,
así como son vuestros ojos mi cisne degolladero
que es tan suave como vuestro etéreo cuerpo,
y que lo tengo ahora vuestra imagen en mis ojos,
y que estoy completamente convencido que eres mi cielo
que amaré hasta los ojos de Dios que llegue de amoroso,
y que sea eso lo que busco en el sentimiento
para que siga en felicidad de lo glorioso.

Tenerte de cuerpo a cuerpo,
de piel a piel unidos del holgorio,
de aliento entre boca en besos
es lo que añoro a veces en noches de lo portentoso,
como quisiera estaros en vuestro aliento
y darte arrumacos de lo sabroso.
¿Sabéis que me hacéis vivir un hermoso sueño?,
lo había pedido en la última poesía,
y por eso que al ser tú mí amor soy vuestro dueño
y gracias a mí anhelo vivo de la alegría
junto a tu cuerpo que tanto en alma idolatro y quiero
y porque vos es toda mi completa lira,
no se podría decir lo que no es porque eres mi vida,
eres la persona que me hace inspirar,
y que no dejo de escribir en lo que siento osita,
por eso que en estas letras eres mi amar,
la que vi desde la primera mirada y a las semanas de amor,
pasó y eso no puedo de mi alma sacar ni olvidar.
Y porque de mi forma de ser vos os fijasteis de pasión
y son por esas tonadas de melodías que no podrás borrar;
porque son aquellas bellas notas quienes te acariciaron de dulzor;
como el nocturno número dos de la obra nueve de paz
que toqué y que aún os toca seguro el alma de lo enamorador
y que soy yo ante vuestros ojos y ser de amor;
porque no he dejado de amarte así tan romántico como un violín;
y si imagináis escucharéis en el fondo del mar un cántico delfín
quien aroma este amor de ilusión y que lo hace feliz;
lo nuestro será una oda de alegría con victoria.
Somos felices y hay que sentir en este romance los sopranos y tenores
que cantan ante esta dócil historia;
y dejarlos que entonen con su aroma de dulces voces,
los cuales son la caricia ante esta gloria
que nosotros tenemos y que amamos mi amada inmortal de fervores.
Y que no olvido las rosas que os he dado con tanto amor mi osa,
las cuales son el perfume de mi poesía a tu ser de pasiones
que despertó cuando te besé aquella vez en el banco de ardores,
fue como mi primer comienzo en el amor de ilusiones,
pero fue así y creció y se formó esto que quiero de ensoñaciones,
y vivid conmigo para siempre bella osa que yo amo de entonaciones
para poder florecer una familia juntos y tener hijos en proles.

Solo sé que os querré siempre.

No sé qué me sucede con aquella dama,
solo trato de hacerla pasar garbosos momentos,
a veces el amor es a ciegas en el alma
y lo que pide doy como un hombre de enamoramiento,
porque quiere ayudar a su ser tierno que idolatra.
Dios si me observáis desde vuestro cielo,
escuchadme y ayudadme a que no haya lagrimeos,
solo vivo en un sueño que buscaba en mis versos,
y miraros ahora es como sentir la seráfica de mis anhelos.
Y si os romanceáis vos con tales palabras,
solo besadme en las noches en el recuerdo
y estaré acunando vuestra dulce espalda,
y recorreré con todo mi deífico aliento.
Eres en las palabras: unión, surrealismo y amor,
veracidad y fidelidad cuando os caséis,
las ganas de seguir sin el mellado dolor,
y así conmigo entre anillos estaréis,
y lo tengo ahora entre mi ser,
todo eso y espero que no os molestéis,
sino que en vuestra alma a mí me améis,
porque eres mi seráfica que he esperado,
y si recibís mi unión muy feliz estaré
y en todo los días será de amor y de florecer.
Disculpa si he hecho cosas que no os guste o no goces,
no sé cuales serán pero si no las hay
ámame siempre así como la melodía a sus voces,
porque sin eso no sé que haría en el orbe,
ahora si me leísteis quiero que no olvidéis nada,
que lo hayáis sentido con el amor,
porque eres aquella dama que me da calma
y si de verdad estáis segura de mí disfruta de mi eterno calor,
y siempre os arroparé con mis versos que son de fidelidad,
con mis brazos a vuestro ser de felicidad.

Siempre seguiremos juntos Arias de mi poesía.

Hoy en mi amanecer la fui a buscar otra vez,
estaba en la iglesia esperándome,
entré y ante Dios oré,
que siempre ella siga amándome,
porque con ella me siento tan bren
y en los días con su aroma de amor aromándome,
me hace sentir su compañía tan bien
como si Dios estuviese ante sus ojos mirándome,
sintiendo que yace ahí solo él
y que estuviera mostrándome el mundo que busco en romancearme,
sus ojos son entre los míos luces de creer
así vea espantosas imágenes
siempre creeré y confiaré en su querer
porque vivo ciegamente en su romance
amando y confiando y siendo fiel,
nada más que eso serán las ganas de seguir amándole
y no caer en anatemas que condenen a mi ser,
nada de mis senderos serán sendas mustias,
porque serán flores de vida,
con vuestro aroma, amor y sin angustia
y conviviréis entre días conmigo de liras
con este profeta del amor que os da ternura,
nos veremos cuando queramos,
nos besaremos con tanto amor apasionado,
nos morderemos y nos daremos lo buscado,
buscaremos de que este soñar de la relación florezca,
entre violines y alegrías será sonado
siempre cuando sigamos entre la vida con esta historia de poemas
al cual puedo a vos escribir o recitar de lo amado;
puedo deciros que a estas letras en cada rincón de amor llenas;
que eres la mujer que a mi vida ha transformado
para creeros y amaros con mi corazón de poeta
que os quiere más que a sus poesías de lo enamorado;
así se vive a veces cuando llega la luz que embelesa,
se olvida uno del orbe y solo piensa en lo sagrado
para besar, querer, amar hasta en todas las noches con estas letras,
escribo con un corazón que brota amor,
antes no pensé que iba ser así mí terneza
pero llegasteis y disteis esa fuerte pasión
y que ahora despertó por vos de grandeza;
así como el sacro Dios ante vos de dulzor
y es más que mis letras la ilusión que llevo por vos mi sirena
y si esto es el amor que de paz ante Dios crezca,
¡oh mi amada Arias que amo en mi poesía y alma!,
que sueño en encontraros en cada mañana o alborada,
que pido a Dios que os guíe por buen camino,
solo él sabe como es vuestro amorío,
sólo podrá la vida darme paz si de verdad amas,
es lo único que mis sentimientos de vos necesitan para estar en calma.
Oídme Dios así la aparten por un momento,
solo mi aliento estará acorralando a su cuerpo,
entre miradas y dulces charlas,
estaremos siempre sonriendo entre besos,
porque ella es toda mi eterna dama,
a quien yo en canto deífico quiero.
Nada en el amor se puede apartar,
porque permanece en el corazón,
es imposible del mundo a eso sacar,
es por eso que en él siempre va ser amor
y de sonrisas y fidelidad se va a romancear,
porque a ella quiero con mi fuertísimo ardor,
que arde como en una sinfonía de lo pasional
y se escucha hasta en nuestros corazones de pasión,
como los sonidos de las notas del amar
que es ella y yo en él los dos viviendo de lo sonador,
y que es de la vida predilecta de ese soñar
y que estará y está entre nuestro vivir de lo esperanzador
sonando como un piano de un gran dulce sonar.
Así os escarnezcáis, penséis que todo lo nuestro ahora terminó,
ante ludibrios nada me dolerá,
igual mi alma a su alma besará de amor,
por eso que penséis la mezquina familia lo fatal,
mientras que mi corazón la ama igual,
por eso que vivo en sus sentimientos y confianza,
y me tranquilizad toda la plenitud del alma,
me dejad con paz y a su amor con esperanza,
y vivir así a lo recóndito con ella será de alabanza,
como cantos dóciles que nos abrazan,
mi pasión es ser músico pero he conseguido algo más,
no sé, solo sé que es lo que mi alma en el amor ahora ama,
es lo que me dará en mi vida diaria felicidad,
y es lo que nada más en la iglesia he pedido a su ser que viva con mi alma;
y es solo que eso mi Dios y estaré de grata amenidad,
así como la melodía y armonía de su composición musical,
cuando se construye y se buscad las mejores notas
es lo que se conseguid en el amor igual,
con el tiempo y charlas de ese buen idioma,
nace ese esperanzado y eterno amor que llueve como un diluvial.

Así no te vea o toque, aquí está mi corazón.

Karem después de todo lo que nos hemos conocido amor mío;
de querernos y amarnos entre la aventura del destino,
soñando juntos con lo más dócil y sumiso
que es la unión de un amor pedido
de nuestras almas ante Dios sin suplicio;
resulta que ahora en nuestra vida nos quieren separar,
hoy y ayer en la noche estábamos tan felices unidos,
que hoy al no tenerte me hace llorar,
porque no sé a dónde te van a llevar,
¡no sé cómo buscarte!
quisiera ser los ojos de Dios para mirarte,
está solo la esperanza de poder quedarme por mis razones,
Dios me verá y lo haré para encontrarte,
sé que no dejaréis atrás las ilusiones,
me quedaré así mi familia quiera que me vaya de viaje,
eres lo que da a mí entonaciones
para que no aliste el equipaje,
¡yo sé qué voy hacer mujer de mis inspiraciones!
aún nuestro delirio será romance,
porque días como estos han sido los mejores,
y porque antes no sentí el amor así tan grande,
Dios nos ayudará a vernos sin dolores,
y ese día quiero tan férreo abrazarte,
que pediréis que aún así os ame y que os abrace.
El motivo mezquino de querer nuestras familias alejarnos ha sido;
porque nos salimos de nuestra vivienda por dos días,
me alejé de mi familia porque no querían que me viese contigo,
vos confesasteis a vuestra madre que somos novios aquel día,
ahora todos quieren cambiar en mi destino,
solo quiero vivir con vuestra vida,
jno quiero apartarme de lo más querido,
porque hasta eso en esta última noche dijisteis con mucho amor,
que quieres vivir solo conmigo,
pero nadie entiende eso en nuestra pasión,
estoy que lloro por vos en estas letras amor mío,
y está como un océano de lágrimas mi corazón,
porque siempre a vuestro lado he compartido,
y ahora no saber dónde yaceréis sufro por vuestro amor,
porque os quiero tan solo amar en mi camino,
en mi fóculo y ya no estás,
pero miro al cielo y hago un pedido,
Dios devolvédmela para no llorar,
Es mi primer amor que antes no había así conocido,
Pero así sucede en este corazón por el idilio.
Dame la paz con ella mi Dios,
No me deis más conflictos,
No quiero sentir ese amargo resquemor.
Hazme vivir con su hija y criarme con lo divino
No quiero que me mandéis más cruces,
Mandadme su luz en mi existencia,
Haz de mi en su vida celestiales luces,
Solo mi alma ante ella tiene solo paciencia,
La extraño a estas horas de la tarde,
Quiero abrazarte amor de mi poema,
Estoy llorando amor de mi ser apasionante,
¡quiero verte amor, no puedo más con esta distancia!
lleno las hojas de muchas lágrimas
por ser tan duro hoy al no miraras;
no sé porque la vida no los deja ser feliz,
si solo los dos nos amamos,
así hoy llore en sus cuerdas el violín
como en mis letras por lo más amado,
porque quiere encontrar a su jardín
para cantares cuánto mi corazón le ha idolatrado,
y así dejar de llorar y abrazar a lo que de verdad amo.

¡Cómo olvidar lo que tenemos!
¡cómo irme así a la fuerza!
Jamás me iré porque te quiero,
Te quiero aquí en mi alma sensible y eterna
Te dije que vamos a llegar juntos al cielo,
Paraíso, tranquilo los dos ah de belleza,
Y porque esto es el amor eterno
Y porque no olvido que eres el milagro que apareció en mi existencia
Así que esto seguirá así no te vea
Por ser toda mi dulce osa tierna que conocí y que amo en mi vida de poemas,
No podrá nadie separarnos
Porque nos amamos en terneza
Y porque eres el ser que en la noche acaricié como a piano
Tan tenue como en los días de nobleza.

Siempre bombearé de amor por ti por ser todo mi etéreo vivir.

Hoy desperté y tampoco te vi,
no te he dejado de pensar mi dulce cariño,
quiero estar junto a ti,
para decirte que no soporto este espino,
porque está tan dentro de mi
y solo la distancia me hace vivir este martirio,
¡cómo boto lágrimas de mis ojos por ti,
o cómo añora tus besos mi ser frío,
pronto esta lejanía tendrá un fin,
y ahí nuestro Réquiem será por siglos,
sonará tan solo que un violín,
y nos amaremos sin suplicio,
por eso será nuestro festín,
y de lágrimas nacerá nuestro regocijo,
con flores aromando nuestro jardín,
por amarnos tanto en el destino.
Convócame mi Dios con lo feliz,
quiero mi vivir con hijos,
tener el sueño de mi existir,
a la mujer que yo en poemas he escrito,
por ser todo mi aliento que aún aquí respiro,
y porque no dejo de amarla ante mi corazón de amor encendido,
aunque de tus ojos esté escondido,
estoy cerca de ti igual,
ando en vuestras venas amor mío,
recorriendo vuestro ente sin dejarte de acariciar,
no olvidéis que estoy a ti acogido,
y que esto ante cualquier desafío seguirá,
espero que igual penséis lo mismo,
porque te amo más que al piano durante un recital,
porque a ti es a la que puedo besar,
aunque en estos momentos no,
pero siempre eso más adelante será, te lo prometo por el sincero amor,
y ahí nuestros labios se acariciarán,
y de felicidad nos vamos a llenar.

A mi padre le confesé todo lo que pasó,
me apoya a que esté ante vuestro olor,
que esté contigo el tiempo que más quiera,
que os ame con tanta honesta pasión,
y así nuestro orbe será primavera,
y es lo que quiero contigo, ¡ay amor!,
para poder seguir sin anatemas,
y porque eres toda mi esencia de inspiración,
para poder escribir siempre nuestro poema.
Las palabras nacen del sentir cuando sientes la esperanza de la efusión;
para que suenen violines de gran delicadeza,
como aromando nuestra rescatada predilección,
y no borremos jamás esa huella,
y nos abracemos como enamorados en el amor,
y volemos con tranquilidad ante la santidad de la nobleza,
como a la de Dios sin problemas
y nos besemos sin que nadie nos tenga que molestar,
y así solo sonreír sin tristeza,
porque siempre nuestro corazón así de amor latirá,
ahí nadie puede ordenar o entrar,
es un sitio sagrado de el amor,
ahí solo nuestro querer puede mandar,
vivamos felices ante nuestro Dios
sin decirnos jamás en la vida adiós,
porque lo nuestro es amor,
y no es un juego ante la ilusión,
es algo real que sentimos,
por eso que tanto mi corazón da ardor,
por lo sincero que es mi predilecto destino,
y que ahí estaré para amarte con tanto noble sabor,
porque aún recuerdo la última noche en cómo te besé de lo divino;
que aún en mí está vuestro olor,
fue la última noche,
no hicimos lujuria ante nuestro amor,
solo te abracé y me arropé de vuestra carne,
estaba tan junto a vuestra piel de dulzor,
vivía en una noche el hermoso romance,
que ahora quisiera besarte como en aquella noche de pasión;
aunque lloro por tu ser apasionante,
porque os amo, os amo tanto de verdad mi osa de primor.
Tengo que soportarlo aunque esto me mate,
solo sé que eres y seréis mi único ruiseñor
que cantabais a vuestro dócil vate,
que os escribe de lo romanceador,
porque sois de mi vida mi rescate
que vi y que tengo en mi corazón,
y porque ante este duro combate
solo sé que nacerá paz en nuestra introspección,
en nuestra alma de lo realizable,
y que nos abrazaremos de pasión,
que se nos olvidará los conflictos del pasado,
y veremos el presente para un futuro de lo apasionado.

Donde tu estéis mi corazón estará,
para que no os sintáis mal alma de mi alma;
porque siempre os voy a buscar,
y así tendremos la felicidad buscada.
Si ando ahora en casa de algún familiar
que no puedo salir a ningún lugar,
no importa igual sé que me vais a esperar,
y cuando salga o me escape te voy a encontrar,
y de mi corazón jamás tú nombre desaparecerá
Karem de mi aria,
siempre ahí tú nombre sonará,
porque eres mi dandi dama
a que amo como las cuerdas a una dócil sonada,
y porque eres la felicidad de mi vida y alma.

Escribiendo acompañado de las músicas clásicas,
es tan hermoso sentirte en la música de ternura,
viéndote en ella tan diáfana,
que solo te extraño por vuestra holgura,
por vuestro amor que disteis a mi alma,
a pesar de pocas peleas que no preocupa,
solo lo que vivimos mi amada,
y porque aún en mi corazón tu ocupas,
ahí tocándome de caricias alentadas,
que mi mismo ser quiere de vuestra dulzura,
vuestro calor, amor que extraña
por ser toda mi gran luna,
que brilló y que brilla de magia,
magia del amor que brota esperanza,
y que no se aleja,
sino sigue ahí estando de llama
sin apagarse el fuego eterno de la pureza,
que vive en mi corazón ante el tuyo de alabanza,
por sentir esta pasión de grandeza,
indecible que llega hasta el reino de Dios de nobleza.

No sé, solo sé que quiero contigo dormir,
contigo amanecer y cuidarte,
así como a vuestra hija darle todo mi vivir
y tan solo en los días de siglos amarte,
formarme contigo de lo feliz,
y no dejar de acariciarte,
estar siempre contigo sin sufrir,
y realizar nuestros sueños que queremos a lo realizable.
Por eso mi Dios que me veis desde los cielos,
cumplidme lo que os pido,
dame la paz y a mi amor eterno,
estaré como hijo tuyo con lo más querido,
por el llorado y rogado anhelo,
ahora en rodillas os lo pido por lo que más deseo,
y que en el fondo la espero
para formar una familia;
así juntos siempre de lo tierno
y sonreír por siempre con alegría.

¡Te han apartado!, pero no olvides que estás en mi corazón bombeando,
que de ahí no vais a salir,
porque te estaré amando,
porque eres toda mi melodía del vivir,
que sonará para mi ser que te ama en lo ilusionado.
Te amo porque antes no amé,
te amo porque antes no lo sentí así,
te amo porque me has dado fe,
y te amo porque me has hecho feliz.
Antes nadie me hizo a mi así creer
como en el amor durante mi vivir,
pero eres aquella única mujer,
mujer mayor que anhelo que esté junto a mí.
Cuando estemos juntos vamos a crecer,
juntos vamos a compartir
del fortunio de el querer,
lo lascivo de el amor sin sufrir,
proles en el orbe van a nacer,
daremos lo mejor en su existir,
y en el jardín de Dios mucho agradeceremos
por darnos nuestro vivo amor,
por ser la relación el calmado aliento
que nos roza cuando amamos en la esperada pasión.

Escucho el ave María con voces sumisas,
tan soprano suena que me recuerda cuando me cantabas,
con esa pasión en el fondo de tanta lira,
y es lo que ahora me acaricia el alma,
traspasando esas voces a mi vida,
por ser vos toda mi pasión amada,
que no olvido sino amo en mi poesía,
por ser la mujer de mi vida soñada
que quiero en toda mi etopeya;
por ser el diluvio de mi inspiración,
que sonáis con toda melopeya,
por formar el centro de mi interior,
que has dado de terneza,
y que aún así no te vea amor,
aromáis con nuestro recuerdo belleza
tan dentro de mí de pasión,
que hasta te beso en imaginación mi dandi condensa;
por ser la serenidad de mi efusión
que siempre estarás en mi esencia
por ser el glorificado y sacro amor
que amo tanto en mi poema de lo romanceador.

Yo creí en ti pero nada fue como esperé, ahora vivirás sola con este recuerdo, y no conocerás a un chico así con el endeble cariño que te supo dar día a día aguantándose tus actitudes por no perderte.

Tenéis en vuestra alma mi felicidad.

En esta pasada noche he charlado con mi madre,
le dije que no quiero irme de este país de viaje,
que solo quiero aquí soñar con mi sueño del amor.
A que amo tanto como al mismo dócil y lírico arte,
el cual ha sonado en mi corazón
y que mis años estando a lado de mi padre
no han sido como los que tuve contigo de fulgor
aunque lo quiero pero no tanto como el sueño de y vate
que anhelo desde que escribo y siento la dulce pasión;
sé que en mi camino actúe mal yéndome sin avisarte
y ante eso os pido perdón,
solo quiero ser feliz con ella y amarle,
ese fuera el regalo que vos me dieseis más grande,
permitidme a que cruce esa barrera que tanto me prohibisteis
dejadme a que entre a ese reino sacro del romance,
aromadme con vuestra ayuda para no perder.
Qué hermoso es cuando una madre os entiende a lo que anheláis en lo apasionante;
y os dejad a que estéis con lo fogoso de un idilio apreciable,
fuera regocijo si me dejáis amada madre
a que conviva con lo que venero hasta en lo imaginable de mi hermosa Karem.

Eres de mi surrealismo la mujer que me dio la vida,
que me enseñó de joven cosas que no aparto de mis líneas,
siempre tuve vuestro ser en la inspiración de mis poesías,
no os lo dije pero es así como en una melodía
la cual de sus mejores notas se llena de alegría,
y es lo que vos me disteis antes en mi vida de lira,
pero aún más fuera si me permitís el regalo que pido a la vida.
Seré buen hijo y os lo prometo ante este escrito sin mentira,
es solamente que el llorado anhelo y apasionado amor
que he tenido y que siento en mis letras y corazón.

Dios si me escuchasteis entre mis imploradas plegarias,
entregadme el fortunio que busco en mi alma de ilusión,
haced de mi existencia una vida serena con mi Arias,
de paz y amor con el calmado ente de mi inspiración,
me quiero quedar a estudiar y a trabajar,
no quiero perder más el tiempo,
quiero ganarme vuestra confianza sin decir mendaz,
quiero unirme con aquella mujer en un casamiento,
quiero darle lo que merece en la vida en verdad,
con estudio y mucho sincero esfuerzo,
lo conseguiré y tendremos felicidad,
así a esas dos almas querré con mi sentimiento,
no las abandonaré sin ayudaré con el amor que les siento de inmensidad.

Amadme progenitora y dadme el fortunio,
deja que florezca mi vida sin tormento,
a vuestro lado caminaré de lo pulcro,
sin que me alejéis de lo que al amor siento,
en los días sus charlas han sido frutos
los cuales han florecido del herbaje con lo honesto.
Honroso sus gestos ante este orbe o mundo
cuando he caminado con ella sin lo mesto.
Me esperará porque antes no vio el amor tan puro
el cual le he dado y hemos tenido de lo tierno.
Deja que hable con ella para relacionarnos con virtud,
seguir un sendero sin mentiras y con luz,
déjanos crecer por lo que latimos,
queremos que nuestro fóculo sea beatitud,
y es por lo que aquí en el corazón sentimos,
no estamos jugando en el fuego de nuestra actitud,
sino queremos que esto siga ya sin conflictos
por no querernos separar ante nuestra luz.
Me entendéis lo que os digo para que lo sintáis,
si me apoyáis seré tan feliz sin me embalsamáis,
aromáis de ese aliento que me hace falta madre amada,
y muchos violines en paz a mi sonarán
y con un semblante de holgorio tendré en la morada
y de abrazos y fortunio a vuestro lado agradeceré mamá.















Esperanza tengo ante vuestro amor hasta poder morir.

No fue como lo esperaba a todo ese escrito que escribí desde mi alma,
fueron tan solo respuestas las cuales me hicieron hacer lo que quisiera,
solo quiere que esté en un mundo sin la hermosa romanza,
a veces anhelo ser transparente para irme sin que nadie me vea,
y llegar solo dónde ella y sacarla,
e irme lejos para vivir del amor que tanto ya en lágrimas me deja,
por ser tanto como una filosa lanza
que no te deja de herir y que quema,
como mi misma progenitora y familia que han sido esa lava;
los mismos leviatanes que me desgarran en penas,
por no dejar que cruce al reino que mi corazón ama
y por querer solo que esté en esa condena
que ha sido en mi poesía que ahora gimotea por lo que extraña y clama;
por ser su único vivir que existe en su querencia,
por ser el señero amor que no puede dejar desterrada
sino en las líneas éstas de un gran aroma amándola,
y de este querer vesánico a su lejanía aromándola.
Sé que lo vais a sentir amor de mi existencia ensoñada,
y que lo vais a besar como si fuesen mis labios mi hermosa dama.
Y porque no voy a dejar de escribir a esta historia que es ella,
historia del amor que jamás imaginé pero que creció,
por ser tan solo que mi dama eviterna
que en mi centro de ternura ella mojó,
y que ahora me tiene absorbido,
solo sé que no puedo ser evasión
porque sois solo que mi gran amorío
que de lira y poesía a mi me llenó,
y que me habéis en esto convertido,
en vate o poeta que os quiere de predilección,
saber que sois toda mi etopeya,
que eres de ella las letras y la curación
de escuchar a esas divinas melopeyas
que dabais cuando estaba a vuestro lado mi ruiseñor,
¡cómo olvidar esos días que me mirabais tan esbelta!
y sabía que desde que os miré o sentí ibas a ser mi amor,
con la que iba a compartir todas estas cosas bellas
que así hoy no las tenga pero que están en mi corazón,
en él señero lugar que ahí bombeáis de melopeyas
por ser tan solo que una enorme inclinación,
que me enamora y que me encanta en mi vida ante vos de querencia
por ser tan solo ese cariño fogoso que fulge hasta el sol.

Con estas manos te quiero acariciar y frotar,
todas las noches a vuestro cuerpo,
sin dejarte en el idilio de amar,
y tan solo entregarte todo lo que en mí siento.
Es así tanto la desesperación por vuestro olor,
que de verdad no puedo estar sin ti en el amor,
qué locura en esta noche escribo,
qué vesania ante el poema soy,
porque eres tú mi destino,
y te quiero así en mi hermosa pasión.
Solo sé que en mi poesía eres tú el alivio,
la inspiración que me hacéis sacar en el fondo de mi corazón;
porque os amo así de tanto delirio
y que moriré hasta tener solo que tú amor,
ese será mi lema ahora en la vida de martirio,
así tenga que fenecer para estar con vos,
lo haré tan solo por vivir contigo
y así estéis vos mal yo os ayudaré en compasión
y juntos saldremos hasta la luz de lo bendito
hasta llegar al hermoso reino amado de Dios;
porque así muera en el intento de besarte amor mío
o tenerte será mi promesa de mi inspiración,
ahí será todo cumplido y escrito,
y ahí sabré que hasta el final de la vida mía luché por un querido amor,
que amo y amaré en lo deífico del idilio
que ahora abarca de melodías a mí querido corazón,
me hacéis vivir momentos que no tuve en la vida,
si así lo es lo será por el gran cariño que os tengo,
porque de mi eres la lucha hasta lo último de mi lira
y pronto veréis qué hermoso será después ante lo nuestro,
y ya no habrá anatemas ni morriñas
sino el aroma amado de todo lo nuestro de lo bello y eterno.

De un amanecer eres tan solo que vos ahí,
de esa gran beldad cuando contemplo la alborada del albor,
así como las luces del mismo sol eres el rubí,
ahí os miro y es tan lunático mi noche de hoy,
por cómo os pienso en mi amor de latir,
no puedo seguir sin abrazarte, necesito aromarte de mi calor,
necesito verte para decirte cuánto te quiero,
decirte cosas que ahora en el fondo siento,
cosas que van más allá que el edén o cielo.
Es solo que un amor que fluye y que de ternura está latiendo,
ya no sé mi Dios cómo hablarte u orarte,
solo que veáis en la manera que me siento,
que ando en un mundo que me ha llenado de romance,
hazme vivir con lo que siento que es mi sentimiento,
que me deis tu magia para ir con mi ser,
para besar, acariciar y juntarme con lo tierno,
vivir juntos felices sin tener tanto doler.
Ella anda sola en su casa pero con un padre terco,
no entiende nuestro amor que tenemos en el querer,
solo anhela que me aleje y no quiero eso,
solo quiero vivir en el vivir de sus caricias y alma,
ahí recostarme y besarla,
no apartarme sino ahí dejar que me abrace,
dejar que así la vida se pase,
que siga y siga de ese romance.
¡Oh que bien fuese si es así mi señor!,
que bien fuese si me permitís a que mis letras sean lo que busqué antes de ilusión;
ilusión que yo en verdad no anhelo y ni quiero perder,
solo vivir ahí atrapado a ella sin salir de su querer.























Un encuentro con el dulce y abrazado amor salvado.

Después de haberos buscado ayer en tantas clínicas y hospitales;
casi en todo el día con la esperanza de encontraros,
vinisteis estando en otro lugar al cual me dio hoy lo salvable
como a mí alma que estaba desesperada de abrazaros,
teniendo la ilusión aún de veros y de ti endulzarme.
que hasta os encontré en vuestro hogar de entusiasmo,
y solo dije pocas palabras a todo lo que pasó de lo imperdonable.
Preferisteis que quedara todo en el pasado,
pasado al cual olvidaremos por nuestro enlace
para vivir juntos ahora de lo apasionado.
Miraros en ese momento y pedirte que si podía abrazarte,
fue como lo más hermoso que pedía mi hermosa Karem,
tenerte ahí de corazón a corazón besándote
fue como estallar como un volcán de lo apasionante,
contaros que no dejé ni un segundo de mis días de pensarte,
que estabais siempre aquí en mi corazón de lo ilusionado,
deciros que vuestra familia no quiere que me una a vos de lo soñante;
sea quien sea en la vida solo seremos uno solo de lo romántico
para vivir juntos y estaros por la belleza del amor
que suenan en violines ahora en el piano
por ser tanto la agitación de la pasión,
los cuales de las cuerdas de ese piano son de mi corazón,
que suenan de esperanza y de lo triunfador.
Juntos viviremos del día a día sin separarnos,
juntos lograremos de lo que está en nuestra ilusión
y juntos soñaremos con lo que suena de lo enamorado
por ser tanto todo este y dulce amor.
Luego de todo este hermoso encuentro siempre nos veremos,
os lo prometo amor mío por el amor que de honestidad tengo,
jamás nos alejaremos, siempre mi corazón estará ardiendo,
ardiendo por vuestra vida sin apagarse el amor,
y porque esta relación ante mi corazón no es un juego,
es real, único y comprensivo que ahora tenemos de efusión,
y que provoca hasta llorar por ser el milagro que busqué de mi anhelo
que no encontraba en la semana como un tormento de dolor,
y por ver un cambio en vuestros ojos de luceros,
no puedo alejarme o irme a mi país sin vivir con lo que quiero de amor,
muy pronto juntos nos casaremos
y nuestra historia florecerá como flor,
¡cómo te quiero Karem de mi corazón eterno!
estoy que voy ahora y te beso como en la mañana de pasión,
tenerte ahí y besarte fue tan honesto,
saber que eres mi ser, mi vida y unión
no puedo de ti alojarme sino amar como al cielo
que eres vos que cantáis a mi oído como un ruiseñor,
de una manera tan dulce de lo bello
que me gusta en mis sentidos de lo sanador.
Estoy feliz y eso hoy en el albor os lo dije,
ya no tengo por dentro esa cicatriz porque sé que existes,
sé dónde estáis y ahora podremos ser juntos felices,
sonarán en nuestra vida esos alegres y bellos violines,
y de aromas nos llenaremos en nuestra paz de jazmines.
Hoy fui a la iglesia después de todo esto,
pidiendo a nuestro Dios que nos dé el amor,
que no los de más el tormento
y que podamos seguir de lo que amamos en el corazón.
Le imploré tanto a él y arrepentido ante mis pecados,
por lo que hice y que ahora a él de absolución pido,
que nos dé el amor, felicidad unión de lo soñado
y así podamos seguir en la vida sin lo dolido,
porque vos es mi sueño a que amo
y que no puedo dejar morir en mi ser de amorío.
Solo quiero vivir contigo mi ser de lo alegrado
y triunfar juntos con hijos,
porque desde que vi hoy en vuestros ojos ese cambio
noté que ya no habrá espinos,
sino romance y de vuestro ser bálsamos.

Solo la vida ahora me ha hablado
que no deje escapar esta ilusión,
que siga ahí y ame de lo encariñado
porque será solo que vuestro olor.

En el pasado compartimos cosas bellas,
a pesar de las mentiras ahora las olvido,
solo quiero tener la vida contigo de nobleza,
vivir lo que hemos tanto quizás pedido,
que es el amor de nosotros sin maleza
y compartiendo lo dulce y unido,
porque nosotros somos el agua y luz de la naturaleza,
que da vida como a nosotros mismos,
por eso sigamos con toda esta pasión de la belleza,
y amémonos día a día con lo bellido,
Dios sembrará paz a nuestra estela
y al futuro dará proles de hijos,
felicidad y no esas perduras anatemas
que ya hemos nosotros tenido.
Solo sé que mi sentimiento por vos es amorío,
que es el sueño que soñé y que ahora no lo quiero ver perdido,
que quiero renacer y florecer de lo bonito,
ésa es la vida que nos toca vivir,
nada de dolor habrá en el existir,
así se meta quién sea estaremos juntos,
así de ese amor que tañe como violín
y así del Réquiem será de fortunio,
muchos opus sonarán de Frederick Chopén ,
como los nobles y poéticos nocturnos,
y en especial sonará el que te gusta a ti de lo bren
como el nocturno nueve número dos como el tuyo,
o el nuestro sonando de lo alegre de esta unión de querer
sonando a nuestra poesía y vida de lo pulcro,
y porque es nuestra vida un poema que recita de amor profundo.


Cada verso es la historia de no apartar este romance amoroso.

¿Qué no conozco autores de poesías?,
sinceramente muy pocos yo conozco,
algunos he conocido ante sus liras.
Pero poeta es aquel que escribe lo que vive de lo lacrimoso,
de la beatitud que siente en su vida
por ser lo que le embarca en lo loco.
Así es mi vida de jovenete que está centrado solo a un amor,
no puedo vivir en otro solo que en ese de lo enamorador.
No pudiera alejarme así digan que estás vesánica,
que estáis mal porque la quiero ayudar y la quiero amar,
aunque en su vida ahora les parezca tan pánica,
por su estado yo ahí la voy a elevar y la voy a calmar.
Porque ayer te vi en la mañana y sé que cambiarás,
aunque me pongan el destino más difícil igual te voy a querer,
mi ser jamás de ti se va alejar,
ni me iré de este país porque tú eres mi futuro de crecer.
Sé que los familiares hacen todo por sus hijos,
pero yo no puedo haceros caso a ellos porque son mi fenecer,
prefiero antes esperar para estar juntos sin lo fallecido
y así besarte hasta no más poder.
¡Oh mí amor vos me habéis convertido en un poeta del delirio!,
el que hoy escribe de un inmenso cariño,
el que lleva la poesía adentro sin temor.
Las melodías que suenan de lo bendito
por tener nosotros este soñado amor.
Así vuestro padre no quiera nada o amenace,
amenace con viles palabras llenas de rencor,
igual mi corazón está en el vuestro que no cae
y que bombea tan dulce de esta pasión.
No sé porque me ha tocado vivir así en el amor,
si solo os he querido con honestidad,
si solo hemos pasado momentos que no olvido de mi interior;
interior al cual suena tu nombre y recuerdos de felicidad.
Los músicos del siglo dieciocho vivieron en sus notas igual que yo;
en ese refugio hablaban de sus historias de clandestinidad,
lloraban quizás en sus corcheas por su resquemor,
así sea de un amor que les dolió de mortalidad,
pero que en sus notas estaba la esencia de la poesía de lo atroz
al cual hoy me toca a mí en letras vivir de lacrimosidad.
Solo porque quiero a un amor que me hace feliz en mi introspección,
con la que he pasado mi mayor tiempo que me hace alegrar,
y porque no puedo abandonarla en mi pasión,
por ser aquella dama que en mi aromó su castidad,
que en mis sueños solo ahora ella es la que amaré,
la que de holgorio llenaré a su profundidad,
y es la mujer que en mi vida ante cualquier desafío recuperaré.
Porque la amo y quiero por siempre en mi eternidad

Por eso que hoy puedo escuchar vastas músicas clásicas de piano,
esas músicas me alientan a escribir en esta mañana de verdad,
como los nocturnos de Fréderick Chopén de lo apasionado
así como las de Beethoven de un tono poético de probidad.
Ya no sé que decir, solo que mi Dios me de el llorado anhelo que pido en lo adorado;
sin importar su edad solo que vivir en esa santidad,
santidad que es su amor que en mi da lo esperanzado,
y porque de ella no me puedo en la vida retirar
por ser el sentir que llega hasta la galaxia Andrómeda de lo amado,
o más que del universo mi enorme amar,
que antes no creí que iba así a crecer de lo ilusionado
por ser ella solo que de mi existencia el enamorar;
y que no quiero verla en lo fenecida de mi amor blando
porque la quiero tan solo que tener en mi dulce cantar;
con alegría y sonrisas, por ser lo que estoy ahora extrañando
y por ser lo que en mis días de mi ser no puedo rechazar.

Podría vivir en otro sitio con fortuna.
Podría tener diosas y mil encantos,
pero jamás aquella rutilante luna
que dio el amor brilloso en espantos;
no puedo ser feliz con ninguna
porque ya vos es lo sacrosanto
que dio a mi solo que la ternura
que no dejo de sentir en este llanto;
porque vivir así separado de vuestra dulzura
es como un anatema que me da el fusco manto;
como de un demontre que viene a quitaros la holgura,
que quisiera tan solo que destrozaros
para que pueda vivir la felicidad con la musa
que busco en vivir tanto.

Dios escuchadme ante estas letras,
veis como mi ser ante el amor sufre,
tan solo quiero que me deis a la belleza,
que pueda ver en las mañanas con luces
y amar hasta con mi dócil terneza.
Soy como vuestro hijo en pequeñas cruces,
las cuales me torturan y me dejan sin mi naturaleza,
quiero que me quitéis eso que me abrume
como a mi ser sin tener a lo que es mi dandi condensa.
Hazme llegar con ella en esta lejana y tranquila cumbre
para vivir juntos y amarnos con tanta delicadeza,
¡estar solos sin que nadie nos moleste!,
y convivir con lo que hemos querido en la vida de poemas;
¡y así crecer juntos en un hogar sin peste!
sino con nuestro paraíso del amor que me centra
para que viva este ensoñado jovenete;
que solo pueda vivir con el aroma inundado que ahora de amor besa.

Carta de una relación apasionada y que es esperanzada por un poema de amor.

A veces escribimos las locuras de las palabras sin pensarlo, y vienen siendo escritos de un amor que está en tu ser inundado, ¿pensáis tanto en aquella mujer que os tiene desesperado?, atado a ese amor que soñáis en tiempos pasados, pero aparece y solo queréis quereros y adoraros, amaros como si fuese la única paz de vuestra existencia para yacer en esa morada, que es ella a la que queréis amar con ternura y alabanza, y oler de su dulce fragancia. ¿Será que el mundo entenderá todo lo que un poeta escribe?. ¿Entenderá el sentido del amor que plasma a sus letras amadas?, o sabréis vosotros que cuando se ama, uno solo fija la mirada o el sentir hasta sucumbir o quedar ciego por aquel anhelo llorado de esta vida. Sonriera el estro trovador de la escritura poética si ese ángel yace para que solo en lo pluvial de un río se llene en besos; por tener a ese hermoso anhelo, al cual se lucha por enamoramiento, y la paz jamás se retornará sino en crecimiento, crecimiento que crece aquí en el corazón de chelos, de sonidos tenues que van hasta su fuego, fuego de su mismo corazón que será de él para sentir y quemarse en ese apego, por ser lo que más en su vivir y existir quiere, y porque no es un ludibrio o un juego, es algo real, existente que prevalece en todo este escrito de esperanza, más que todo por esa nívea dama.

Cantar un tenor cuando es su pasión lo hace sin calma, fuera congoja si es mudo ante esa aria, se siente por dentro que explota por aquella ilusión amada, puede ser que cuando canta mire ante lo que siente a una cándida dama, dama la cual está en sus sueños de añoranza. Dama la cual se ved en estas letras porque es la que enamoró al ente de la vida soñada, y es aquel cantor que explota de efusión, y que no puede dejar de sentiros porque ahí está, ahí canta y se acaricia como si fuese un aliento que acorrala a su interior, no se puede apartar ese ente que dio y da en la vida ante ese poeta del amor: La ilusión ,el querer y la emoción. Qué tonterías son las palabras mezquinas de otros cuando quieren que una relación sea postro, pero ningún hijo de Dios está olvidado, sino en esta tierra con su poder y magia ayudará en lo glorioso, porque es él que por ella tanto entre lágrimas y suplicios ha luchado. Porqué alejarse si es lo que buscó hace años, porqué irse así por unos que no quieren que el corazón arda, más bien debería de arder y encenderse por lo que se ama, porqué dejar de seguir por los escarnios fríos, por querer solo vosotros que sea aflicción, que sea un caminar de escalofrío, pues no, ¡jamás será esa desolación!, sino en la órbita llegará a dar iluminación, y florecerá de un verdor hasta el edén de Dios, con ese amor y los demonios que han martillado desaparecerán, las manchas negras de vuestras visiones no se verán, y por fin podréis con ímpetu gritar que son felices, que ya no tenéis en vuestra piel esas cicatrices, las cuales han sido en cada día febriles, sin dejar que la pureza frote en vuestros seres de pasiones, que se aman como en una ópera las voces; entrelazadas a los tonos de ese entonces, así son vosotros los de hoy y que estarán siempre hablando o recitando en poemas de ilusiones, los dos juntos, juntos olvidando este orbe, y amándose como si fuese el paraíso este vivir, dejando atrás las maldiciones de personas sin acordes, sino con fonéticas de dolores que han sido fuerte soportaros en el coexistir de rencores.
Se puede lograr expresar todo lo que tenéis de poeta en lo profundo de las fuscas letras; las cuales escribís con un lápiz recordando todo de esa dama tierna, cómo olvidar cada momento que vosotros habéis estado, no se poded en esta vida dejar de sentir eso que a vosotros ha tocado, si fuese él Dios seguro os traería ante su corazón bombeando, hiciera de vuestro mundo un reino de flores, una naturaleza que floreciera con vosotros en proles, un romance que no dejaría de latir, un amor que hasta los dioses en rabia miraran, por tenerse tanto querer en el existir, que se olvidaran que son los vencedores de cada alborada, por haber tenido ese amor de una entusiasmada magia.

“ Yo os amo tanto que no puedo más vivir sin vuestro calor;
necesito acariciaros y amaros,
porque eres de mi vida el principio de mí amor,
porqué me alejan si yo te amo,
porqué prefieren vernos a nosotros sufrir,
si solo lo que hemos hecho es amarnos,
no puede seguir esto así.
Debemos saber que somos hijos de Dios,
que tenemos fe ante nuestro coexistir,
él es quien nos puede ayudar sin decirnos adiós,
el que dará lo que necesitamos de festín.
O como un nocturno sonando entre notas do, mi y sol,
o sin acordes sus mismas cuerdas fuera sucumbir,
así como yo sin sangre me quedo ante lo que es mi corazón,
por estar ella lejos sin poderla acariciar,
pero de esa lejanía escuchará ella mi modulación,
y así podré por fin besarte y amarte sin parar,
porque formáis parte de mí amor.
Unos felices, otros tristes sin poder hacer nada ya,
pero unos con la esperanza que el destino nos escuche en el dolor,
y así por fin Dios ahí eso de renacer nos dará,
y de seguro qué hermoso será ante lo enamorador
y así os amaré como Dios a su completa humanidad,
nadie podrá ante nuestro querer de ardor
porque te amo tanto en mis versos mi amada inmortal,
y por ser aquella dama que perfumó el dulzor
como a mi etéreo ser que te quiere en lo colosal,
y que no deja de latir en su corazón la hermosa pasión
porque ahí solo agita vuestro nombre de lo pasional.
Quiero por lo menos acariciarte como a un azahar,
comer de ti enteramente como una fruta sin amargo sabor,
y dormirme en vuestra carne sin dejarte de besar,
por ser todo mi sacrosanto amor
que me da vida ante este hermoso amar,
vida que antes no había tenido así de ardor
y vida que eres tú ante mis días de verdad,
por ser esa osita que no olvido de mi composición,
por ser esa mujer que me dio el arte de escribir y de arrullar,
por ser toda esa casta dama que en los efugios amé y amo de pasión
y porque no puedo renunciar a lo que es mi vida ahora de eternidad.

Cielo templado a lo inmenso,
y yo con un corazón intranquilo,
todo por querer ver a ese amor sincero,
y que ahora no sé que estará haciendo en su camino.
Su padre esta mañana se la llevó de su aposento,
esperaba encontrarme con ella y darle besos y amorío,
pero resulta que su padre sospecha quizás algo de que nos seguimos viendo;
prefiere alejar a su hija así de esa manera en mi destino,
pero no serán todos los días y habrá uno que os vea mi cielo,
y ese día el cielo dará lo templado a mi corazón intranquilo,
y estoy seguro que estaremos ese día de amor ardiendo,
y vos con felicidad estaréis abrazándome de idilio.
Si vos me queréis yo más que a lo eterno llego,
ya veréis mañana seguro que podremos encontrarnos mi hermosa Merinos,
y te consumiré a besos como fuego,
igual que a estas horas de la tarde por lo que amo en mi escrito

Dios ahora me ha mandado a un ángel entre mi sendero,
que es vuestra amiga que he conocido,
muy gentil es y me cuenta todo lo que sucede en vuestro aposento,
y será una gran amiga que nos ayude con este amor que palpito.
Me siento por lo menos al conocerla feliz,
saber que ella nos ayudará a encontrarnos en nuestro destino,
y que será toda mi gratitud en el existir,
porque somos el uno para el otro en el delirio
que estaremos juntos para siempre de nuestro enamorado vivir,
por ser todo lo que aquí dentro del corazón de amor sentimos.
Es el aroma que siento que Dios manda en calma,
si así es estoy que grito te amo en mi alma,
pero un te amo que se siente hasta en las alboradas,
y que ahora al escribir aquí más tarde,
siento que el te amo arde hasta en vuestras alas,
mi hermosa seráfica que en mi yaces
y que de amor daréis cuando os vea mañana.
Se llama melody vuestra amiga,
siento que las perfidias desaparecerán,
por ser vos ahora mi eterna poesía
la cual canta en versos aquí dentro de lo celestial”.





El viaje de nuestra pasión.

Después de que iba a dar la vida hasta por ti,
que por un beso y una caricia la iba a dar,
ante cualquier ente que se atraviese ante mí,
no iba a dejar de ir a donde tú estás,
siempre iba a buscar la forma de conseguiros,
porque en el fondo vos formaréis mi amar,
y a pesar de los suplicios sois ahora mi destino.
¿Cómo lo supe?, desde la vez que fui a veros,
que miré ante vuestros ojos,
desde que os conseguí formasteis eso bello,
y vi un cambio que me ha dado lo amoroso.
Pero la última vez que fui a vuestra casa estuve en lo recóndito,
por cuando llegaba vuestro padre a la morada,
me escondía bajo el lecho como loco,
todo para que no me viese contigo en la casa,
pero fue todo por estar a vuestro lado después de tanto este oso;
que hacía eso todo para besarte y darte toda mi alma.
Estuvimos así hasta la noche,
unidos entre caricias y besos,
acariciándote sin tener a nada reproche,
solo porque tenía a mi embeleso.
Me dijisteis que quería iros ya de esta prisión,
había que esperar para hacer eso,
pero sin pensaros fue lo más pronto amor,
y tuve que llamarte en la mañana para irnos lejos,
pero aceptasteis y nos conseguimos en la plaza para irnos a la paz;
te dije ahí vamos y paz tendremos,
y ya nada de dolor habrá,
sino armonía y pasión sentiremos,
y así lo fue en la aventura del bus hasta la Terminal,
que llegamos y nos quedamos en un alojamiento,
por el momento y luego algo bueno saldrá.
Esa noche lleno de ardor ante lo que más quiero,
llegamos a la habitación y solo nos besamos,
dejamos el equipaje y nos acostamos dándonos besos,
abrazos en esa noche que los minutos parecían tan amados,
que mientras nos queríamos y que nos queremos,
nos dábamos tanta ternura que hicimos el amor copulado,
fue tan divino y deífico de lo tierno,
que ahora estoy seguro ante la vida que eres ese regalo,
lo que no tenía pero que me da Dios ante lo eterno,
y que aquí juntos viviremos de lo romanceado.

Otra vez en las palabras este poeta,
que ahora le ha tocado vivir lo que quizás no esperaba;
pero contará ahora en sus letras
muchas cosas que está viviendo en su alma.

Después de haber llegado a la Paz,
y buscando ¿dónde quedarnos?,
ella tenía la idea de un primo para convivir en ese hogar;
pero a la final no fue así ante lo planeado.
Nos tuvimos que marchar,
y no encontramos un estable trabajo.
Partimos a Oruro, para ver que hacíamos allá,
y al llegar buscamos un alojamiento donde quedarnos,
pero existía la idea de una amiga para poder acompañar,
para poder ayudar en ese espacio,
y así trabajar mientras nos hospedaba de verdad,
pero tenía problemas y no fue lo codiciado.
Recuerdo que en ese alojamiento la noche fue solo para dormir en Oruro;
solo fue una noche en donde solo nos besamos,
sentíamos un hermoso amor profundo,
que dormimos tan contentos hasta despertarnos,
que nos miramos en la misma cama de fortunio,
y en esa mañana la tomé de sus brazos,
me entregué como hombre suyo,
y recibí de ese amor sus orgasmos,
sus caricias que hoy en el recuerdo en amor arrullo,
y por eso que en mi corazón de paz habías pintado.

En esa Diana no solo era lo lascivo de nuestra relación;
era el inmenso válido querer
que palpitábamos en el corazón;
por soñar esta historia que no íbamos a perder.
Y que brotaba de ese dulce amor
que crecía como las gotas de un llover,
por ser tan vasto nuestra pasión,
pasión abstracta que tenemos en el ardor
que ni Dios llega a comprender.
Así de fuerte viene a ser,
pero lo es y así con ella vivo
como en la vida de locura,
por ser ella mi destino
que me ha dado amor y lujuria,
entre mi misma carne de idilio
entre las noches de luna.

Al pasar estos recuerdos, decidimos irnos a Tarija,
que ahí iba ser diferente el ambiente,
más bonito en esa tierra de alegría,
que quizás nos hospedaba un amigo de ella ante nuestros seres.
Llegamos y no fue así de armonía.
No teníamos sitio para dormir tranquilamente.
Buscamos la idea de quedarnos en un Hospital,
a pesar de no comer bien plenamente,
solo queríamos en una cama descansar,
pero buscamos hospedaje,
y nos encontramos con una Sra. Mercedes de bondad,
a pesar de llevar todo ese equipaje,
al final regodeo hallamos.
Nos ofrecieron aunque había que pagar,
tenía pero hasta la noche no pagamos,
y en Karem algo cambió a más tardar,
quería que me fuera de su vida,
que me fuese a otro lado a estudiar,
me hizo poner muy mal en esa noche fría,
que quiere ir a Salta Argentina a trabajar,
que solo ahora piensa en su hija,
lo entendía pero doliéndome como un puñal,
quería ganar más plata que en Bolivia,
era muy realista y eso me mataba cada vez más,
quería romper todo lo que teníamos en la vida,
aunque en el fondo a ella le dolía igual,
no resistía verme así en esa noche de pesar.
La idea de irse fue por la Sra. Mercedes que nos alquiló la habitación;
ella dijo: “Vengo de Salta y se gana más”,
los ojos de Karem alumbraron por la ambición,
y eso lo iba hacer de verdad,
pero terminó diciendo:”Vayámonos entonces los dos para allá”,
no lo pensé y le dije:”sí, porque te amo,
que no debemos separarnos, luego puedo estudiar,
que sin ti en la vida no será nada romántico,
lo eterno y bello del amor que contigo he soñado”.
Esa noche en esa habitación tanto hicimos el amor,
que en la mañana siguiente lo hicimos otra vez,
estábamos los dos tan energéticos del sabor
que era difícil de separarse de ese conmover.
Vivía de la vida la mejor parte ante una mujer,
que veía y que con ella sentía la ilusión,
que estaba tan cerca de corazón a corazón de ese querer,
y sin mentir me agradaba tanto su calor,
su tierna piel que corría por mi ser,
su aroma que me exaltaba de amor,
y sin alejarme en esa mañana la besaba en su piel. .
Solo sé que la quiero y que no la quiero perder,
que la amo y que con ella solo quiero crecer.

Partimos en el medio día en el bus para Salta,
llegamos y nos hemos quedado sin dinero,
me duele mucho en el alma
vivir ahora pidiendo afuera eso,
como dinero o comida en las mañanas,
ahora no sé a donde ir con esto funesto,
solo sé que la cónsul nos puede ayudar,
la señora que nos hospedó en Tarija no quiere saber de nosotros;
ahora estamos los dos y hay que buscar con la cónsul la estabilidad,
y ahí poco a poco encontrar como el trabajo para llevar allá.
Yo te amo a pesar de estos dolores,
yo hasta la muerte estaré a vuestro lado,
eres la mujer que llena de pasiones,
la mujer que ante esto seguiré amando,
porque soy vuestro querube,
porque eres mí amor y mi eterna vida,
porque soy el que te llena de besos dulces
y porque te amo en estas líneas.

No podíamos trabajar por no tener documento argentino,
no podíamos hacer nada en ese país,
era como si tuviéramos en nuestros seres mil espinos,
y no me gustaba estar ahí
y la cónsul venezolana si me ayudaba en mi camino,
solo iban a mandarme a mí,
como a Venezuela sin el amor de mi destino,
entonces preferí buscar otra manera sin sufrir,
fuimos al Terminal pidiendo un pasaje gratis para la frontera,
y así nos cedieron ese pasaje milagroso de festín.
Llegamos y Karem cambió mucho en su parte interna,
se enfermaba por dentro más y más sin ser feliz,
y era lo que me mataba en sus actitudes de apariencia.
Luego fuimos de la frontera hacia Tarija,
de ahí al no tener dinero por el taxi pusieron como garantía su equipaje,
pedimos un pasaje hasta Cochabamba de ruego a un señor de esa línea;
y de suerte nos llevaron en ese viaje.
Hubo problemas en el bus por una grave tontería,
un señor añejo tenía dinero en su traje,
la ambición de la pobreza nos llevó a querer robares esa economía,
para satisfacernos al llegar,
pero una Sra. se dio cuenta de lo que pasaba,
y en el bus empezó a gritar,
tan solo para que nos bajen de forma desgraciada,
y es lo que consiguió hasta el final.
Nos bajamos mediante ese frío,
habían en esa carretera personas,
estábamos aún en Tarija de nuestro camino,
sin saber que hacer a esas horas,
era ya de noche,
teníamos fe en un bus que nos llevara a Oruro de regreso;
conseguimos uno que nos dejó sin reproche,
y nos montó y viajamos hasta allá durmiendo,
al llegar en la mañana nosotros buscamos un bus para Cochabamba;
encontramos y nos fuimos en esa mañana.
Llegamos y no pagamos,
tuvieron que tomar mi equipaje,
fue por no haber pagado,
todo por no tener el pasaje.
Pero tenía un monitor el cual me dijo ella que lo pusiera en préstamo;
no quería pero la necesidad del dinero se sentía en ambos,
y lo hice no había otro camino que tomar.

El dinero que nos dieron se terminaba, y al pasar los días fuimos donde su hija, queriendo estar con ella y recuperarla, pero nadie dejaba que se la llevara porque estaba loca, andaba en reacciones vesánicas, no creía pero estaba en su forma de actuar más mal. Será por no tener a su hija y su interior de locura más incitaba, no podía soportar sus malos tratos hacía mi como si fuese el culpable; ya amor no me daba, me sentía perdido ante su querer fenecido, no había efusión de la relación de una pareja enamorada, sentía mi alma como un poema sin verso, por eso ya he quedado sin ritmo, será por tanta ira que depositaba ella, como en groserías a su familia, por ser enemigos al no querer darle la tutela de su prole, su trauma de ella: “Yo crié a mi hija tres años, y ahora al verle dado a mi madre a la niña ya no me quiere, ni me mira con ojos de hija, quiere que me vaya, vivo un infierno, dejé al ser mío por mi trabajo de abogada, todo para que ahora viva un suplicio, mi calma es mi hija, pero sino me quiere no puedo vivir bien, sino traumada, mi hija Cielo Toledo ya no me dice madre, sino a mi abuela, ¿es justo vivir así?”. Entiendo, pero ya sus sentimientos y razonamientos no son normales, ante sus gritos férreos que he soportado sin tener el derecho a lo que le pregunto, os he ayudado y he amanecido ante vuestro ser, pero tenéis actitudes que dan terror, es como si la personalidad haya cambiado por ese trauma en el mundo de los perdidos, y en ese peligro o dolor no sé si pueda seguir, por el amor que os tengo siguiera, pero vos no lo permitís que sea así, a qué pareja habéis visto que siga si gritáis y despreciáis, que no os toque u os tome de la mano, me negáis ante el sendero todo, que no os mire ni os hable, cómo puedo entrar en comunicación y en ayuda si no me dejáis, así vos dais a que mi alma vuele a su nido de donde salió, a que vuelva a dormir en ese mundo que vivía antes, a ese fóculo lejano que quizás en la vida no se dio cuenta que el progresar en su capital era necesario, ahora se da cuenta y quiere afanarlo. Pero si en mi mundo llegara a veros en los años, y si habéis cambiado me conseguiréis, si no es así será un nuevo paseo por ese mundo pequeño de Bolivia. Es un milagro si fuese así y qué feliz fuese amada osa, sé que os he ayudado pero más buscáis hacerme poner mal con vuestras viles y mezquinas palabras, quise dar todo por ti, hasta que me dijisteis vamos a la Paz, que es por vuestra hija, quise darle una oportunidad en ese momento a pesar de su mal humor, tenía dinero aún para eso. Cuando llegamos, su ser seguía trastornado y mal, no quería que la tocara, ni que la contemplara, ni acariciara, no conversaba, se alejaba, se olvidaba de que estaba ahí, pero si me iba me perseguía. Después de tantas horas en la Paz de vivir mal, y más con ese frío, no era lo que esperaba y soñaba más con una relación de un amor no conectado ni amado, me partía el alma tanto que veía el cielo rojo en la noche, ese rojo de fuego que me quemaba la vista, que me extinguía, y el preguntarse en la vida ante el Juez de nuestras almas, ¿Porqué me habéis hecho vivir este anatema ante el amor, si os pedí un amor que me fuese etéreo como las centellas, que me diese la ternura eterna en como la pensaba dar, no que me diese este dolor atroz que destroza mi sentimiento?. No era la misma mujer que traje de la fuga cuando llegamos aquí a la Paz, de ese amor compartido y vivido hermosamente, y que ahora estando en la paz todo es diferente, vos con vuestro romance que ni sabéis que es, no sabréis ni quién soy yo seguro en vuestro interior, uno que os ve con ojos de un dolido amor, cuando dijimos para estar juntos por siempre, a ver ¿dónde quedó eso?, porqué retornáis a vuestra alma a un vacío que os extingue y a mí peor aún, no podéis seguir un camino que me de felicidad y holgorio, que sintamos eso que sentimos en el pasado de esas tres semanas apasionadas y llenas de sonrisas, que nos entendíamos, que teníamos sueños por cumplir, no una vida que me ha dejado sin ganas de creer en el amor, o de querer a otro ser como a vos, me siento así, dije en un poema, así tenga mil diosas, fortuna o reino, jamás podré amar, solo a vuestro interior que hechizó de manera noble y amorosa, ahora viviré esta condena del amor, y que Dios me hará vivir, solo a una pasión si podré amar más que a mi alma, es aquel tañer que palpita desde que acaricié una espineta, o que escuché en mi oído ensordecido, el cual blanqueó a un indecible amor, que me perdí hasta en el firmamento sintiendo esa pasión, pero es la única que me toca ahora acariciar, tendré que imaginar que sois vos esa pasión, para poder tener por lo menos esa consolación, así como la de Franz Liszt, la número tres, así iré por mi sendero de Caracas Venezuela, mi tierra que me espera, y la tierra a la cual enseñaré mi vivir como: mis equivocaciones y mi pasar entero, cosas que vive uno, y cosas que cuenta de fortunio e infortunio, así es como cuentan los poetas, su surrealismo de la vida, cuando no es lograda y cuando es casi lograda, así como en el comienzo de esta historia de un amor, que ha sido soñado y alado, pero ahora ya saben como es y como termina. Usaré vuestra frase que determina esto, aunque no quiero que sea así, es tan corto el amor y tan largo el olvido, para reforzar y alegrar, es tan prometedor que llega el amor al terror y si soñáis con gracia será tan esperanzador por el paciente idilio, que se espera a un futuro. Ella no me tomaba de la mano ya, añoraba tanto eso, por lo menos sentir su calor, no sabía vivir sin el amor que antes recibí, su ser creció de esa forma loca, hasta que quería irme. Decía que yo le irritaba, era ella que perdió la razón, yo ahí en el amor aún creyendo que podía cambiar, aguantando todo, no había vivido así ante ella como en los días de pasión, era como un ciclón su ser que cuando daba una acción se veía destrozo; más y más ante el entorno, o como un trino estaba su ser, estaba desviada. Traté de charlar pero no quería, pero más delante de este escrito le doy una oportunidad, pero todo igual termina con una esperanza en mi vida, quizás pero si así no es, solo Dios sabrá en que hogar dejarme vivir, en que pasión dejarme crecer y formarme como un hombre, hombre de esa vida del vivir, el cual soñaba antes de músico y poeta, pero como conocí el amor lo anhelaba con ella, pero todo pasa y en tristeza queda, sé que ahora no podré amar, sé que no veré a otra como te veía a ti, y siempre así andes ahora mal, tú estarás en mi corazón como un amor de mi poema de la vida real, el cual me identifica, que no es una fantasía, que fue una poesía a la que pude consumir, tocar, amar y hacer el amor, de carne a carne. Así podrán conocer las locuras o vesanias de mi joven vida, en como he crecido creyendo en un amor no realizado, dije serán mis últimos versos que escribo, pero no puedo resistir todo lo que sufro, pasará y solo la esencia de su perfume siempre oleré, porque con ella fue con la que dormí, que amé y que me entregué, que soñé ese fugado amor entre los dos, que nos queríamos como parejas, que bien hubiese sido, si aquella dulce osa no hubiese cambiado, más por su hija, si entendiera un poco, que nosotros aún no tenemos para nosotros y menos aún para ella, mal comiendo y mal durmiendo, o en dónde durmiendo?, pidiendo comida y agua, pasajes de vueltas. Entre eso queréis que viva vuestra hija, así digáis que sí, pero es duro y enfermizo, porque daréis solo lo mustio, mejor que la cuide vuestra madre, ahora ya que no os tengo para qué decir estas cosas, solo sé que fue un pasado del amor del mejor de mi existencia que viví de un anhelo llorado. Entre vuestros ojos yo fui los tuyos, yo vi todo vuestro interior, pero si la desesperación de esos meses ante vuestra hija os mató, ahora lo matasteis y acabasteis la relación, por no reflexionar y resulta en la prosa un escrito sollozo, aunque lo más hermoso que haya compartido en esta vida, ahora si decís mil cosas malas de mí, de porqué os entregué, fue para ayudaros a vuestra vida, y si mi Señor Dios permite en la existencia a que os vuelva a ver, os recuperaré, así sea tarde mi corazón irá entre tormenta y tornado, qué hermoso será, ya mis palabras se acaban, pero en el vivir ante ti no, ahí aún estarán, hasta pronto, vive, recupérate, os lo dije cuando estaba contigo, así será, pronto tu aroma tendré, eso no os lo dije, pero ya Dios decidirá en la vida de cada quien. Ahora debo irme a dormir a mi naturaleza, a mi nueva vida, empezar desde la corteza, para llegar a eso que anhelo, por ahora, luego ya Dios sabrá que quiero, y si ya saben. Solo mi vivir en pasión se llenará, así de esas melodías las cuales a mi alma acariciaban. Buenas noches, que la historia del amor jamás se muera, porque siempre queda algo. .

Las esperanzas desaparecen a veces en el amor,
uno da todo por ese querer
para vivir de pasión;
pero resulta al final un fallecer
destrozando tú corazón,
por sus actitudes anormales que tiene,
y que de esas mismas en gritos van a mí,
así no puede vivir mi ente,
necesito irme a otro vivir.
Yo creí que en este amanecer ibais a ser otra persona,
pero me resultasteis ser aún lo mismo,
me iba a quedar con vuestro eterno aroma,
pero durante la mañana fuisteis escalofrío.
Pensaba muchas cosas como trabajar,
y así recuperar a vuestra hija
pero me habéis dado tanto tronar,
que he decidido irme a mi otra vida.
Tengo que dejarte en la Paz,
no tengo para llevaros a vuestro ser,
no me has mostrado el amar,
y eso me toca hacer.
No olvidaré los momentos apasionados,
ni vuestras caricias y besos,
y ni el roce copulado,
será el mejor recuerdo,
como el que tuve en Bolivia,
un amor que no veré otra vez,
el que me llenó de inmensa alegría,
pero ahora debo retroceder,
regresar a otra existencia,
así me de condoler,
será por mi bien y por el vuestro de querencia.
Un poeta que se va con lágrimas,
que deja a un amor que de verdad amó,
que fue toda su noche y mañana,
y que ahora en Venezuela siempre la tendrá en su corazón.

De alguna manera me iré,
solo recordad los mejores momentos,
a un futuro quizás el amor conoceréis,
y si no podéis sigue viviendo.

Ya no puedo hacer más nada,
Ya todo del amor se cumplió,
Ahora toca vivir en otra mañana,
Como sino hubiese estado el amor.
Tengo fe que serás una cándida persona,
cómo quisiera estar ahí,
para respirar de ese aroma
pero puede que sea así,
entonces no me iré y compartiremos el mismo idioma;
y así con el trabajo a vuestra hija recuperaremos de lo feliz,
cuando tengamos el certificado de gloria.

No me puedo ir mariposa,
te quiero mi dulce osa,
vamos a estar juntos,
tu hija tú y yo
llenos de fe y de fortunio,
para crecer en el amor de lo profundo.

Estaba pensando a pesar de todas las circunstancias regresar,
porque sentía fe en tú ser,
pero al pasar los minutos me di cuenta que seguías anormal,
y tuve que apartarme de tu oler,
para no perjudicarme más.
Lo que me sucedía en la vida era escarnio,
¿porqué, si os quiero?,
porque Dios no te dio ese cambio,
porqué os deja ahora con ese ser muerto,
no podía ser tu personalidad como los primeros días de lo apasionado;
porque ahora eres ese fenecido huerto,
sin fruto ante mi árbol,
yo soñaba ir contigo en lo eterno
pero no así con vuestros gritos desesperados,
a los cuales me quemaron como fuego.
Este amor fue como un cristal el cual teníamos que cuidar;
y tú tan solo lo tiraste al vacío,
y en trozos quedó sin reparar,
y ahora no hay vuelta atrás ante ti amor mío,
y solo queda recordar,
todo lo que pasamos de lo bonito.
Aunque te voy a extrañar,
porque fuiste mi primer amor en la vida,
sé que no te podrá nadie reemplazar,
porque estarás en el fondo de mi muy escondida,
ahí con aquella y dulce remembranza,
con esa historia que amé,
y la que me llenó de esperanza
y la que en mi me hizo querer.
Debes recuperarte,
en el futuro sé que seréis otra,
si Dios quiere volveré a encontrarte,
te juro que ahí lograremos nuestra historia,
por si no has conseguido el amor que te di,
ahí gritaré tú nombre con honra,
y si para esos años aún me quieres a mí,
estaré para amarte mi osa,
es como una presagia estas últimas palabras
las cuales ahora seguiré por mi futuro,
para ver si te veo en esos años con alabanza,
y solo viviré ahí con tú amor de fruto,
fruto florecido amándoos con toda romanza.

En la Paz no os dejé,
busqué la manera de devolverte,
pensé hasta en esos momentos en tu ser
para que no consiguieseis ahí la muerte,
conseguí el dinero para regresar a Cochabamba,
para que así llegues a tú hogar,
aunque me dio tristeza en el alma
pero llegamos y te pusisteis mal,
no queríais irte,
querías seguir conmigo,
nada de eso existe
porque antes de eso me disteis escalofrío
y por eso que aquí mi ser escribe,
por ver que aún no eres mi destino,
aunque me alienten violines,
no podrán quitar esto en mi idilio,
porque van a quedar cicatrices
las cuales veré en mi corazón dolido.
Este amor desapareció como del firmamento,
cuando pasa una estrella fugaz o una centella,
por sentir que ya no queda el sentimiento,
y que se va y ya no regresa.
Es como cerrar los ojos y abrirlos,
así en ese instante se esfuma,
y solo queda otra vida en tú camino,
aunque hayas acariciado la mejor ternura,
se pierde como un ángel a su cielo mismo,
por no haber ganado esa lucha,
por el pecado de irse con lo querido
de robar y solo para perder la holgura.

Tantas cosas hice Dios por este amor,
para que a la final no tenga nada,
tanto la amé y acaricié de ardor,
para que hoy no la tenga en mi alma,
tanto te rogué para vivir de la pasión,
para que en esta mañana ya no escuche sus palabras,
tanto quería una familia con ese calor,
pero quedó al final su cambio vil que mata,
y es lo que no puedo soportar en mi corazón,
porque de verdad mi alma la idolatra.
A pesar de estar loca ella,
siempre al futuro existirá una esperanza,
ya tendré mi vida completa,
y ahí iré a quererte cuando seas esa hermosa dama,
la que conocí cuando estaba bien,
si así es ten por seguro que te querré como lo bren.
Y que regresaré también.
Llegamos a Quillacollo,
sentisteis miedo,
miedo ver este pueblo a ti fue como caer a un profundo hoyo,
el cual nos iba a separar con lo nuestro,
por no ser ya lo amoroso.
Llegamos donde vivo,
y aún así te dije: “regresa a tu casa,
sino va ser peor contigo”,
y no me hiciste caso para nada,
entonces fui donde mi familia,
y de inmediato llamaron a tu padre,
te detuvieron sin salida,
era porque necesitas ayuda por tu parte,
entonces te llevaron a tu casa.

Desde ayer en la tarde
hasta hoy no se de ti mi Karem Merinos Arias,
y seguro por mucho tiempo más mi ángel,
hasta pronto mi hermosa dama,
que te cures ante todo tus sentidos,
porque fuiste el amor que me dio la mejor felicidad y calma,
y porque jamás antes amé así ante un amor querido
que me deja ahora en mares de lágrimas.
Y porque estos serán los últimos estros que te escribo,
y versos que nacen y mueren en mi alma,
recordando esta gran historia de poemas que hemos vivido,
y que será la mejor historia de mi vida más que apasionada,
por ser ese amor que enamoró mi corazón de idilio.

Jamás imaginé que iba a volver a escribir ante esta historia,
no regresaré a Venezuela para hacer mi vida,
hice cosas malas sin pensar que era de la propiedad de mi progenitora,
pensaba irme a mi país con ese dinero de ida,
y resultó que no me pude ir en el aeropuerto como paloma,
sino mis alas se cortaron y no volé a esa lejana sima,
sino mi misma madre vino y me dio una oportunidad de honra,
a pesar de cometer errores entre las cenizas,
como la de mi alma que ha tocado vivir de vidorria,
por querer quitaros a su esposo que no era su economía,
porque le trata mal y no convence esa relación amorosa,
sino vendrá trayendo nada más que a un futuro perfidia,
y solo al darme no solo ella esa ayuda que me retorna,
sino mis abuelos de un surrealismo de hidalguía,
como a su sangre que soy yo de su mismo idioma,
por ver que tendré un cambio de amor a la vida en Bolivia.
Decidí quedarme por ver la situación de mi progenitor de historia,
y no me queda otra que yacer para siempre en mi nueva gira,
pero siempre os recordaré lo que fuiste padre mío de mi memoria,
ahí yaceréis y perfumaréis con vuestros consejos de caricias.
Entre la gran familia dieron palabras de ayuda y de gloria,
entre miradas con un vivir del mío en retorno de mi alma fallida,
quieren que crezca como músico del amor que mi alma devota,
ahí estaré cumpliendo esa promesa de mi alma querida.
Me quieren y no debo fallar con un camino de deshonra,
debo seguir la senda que me toca con sueños y alegrías,
para solo tener lo que amo y que quiero de victoria,
y entre mi semblante con lo logrado llenarme de sonrisas,
y perfumarme de ese aliento que es mi tonada romanceadora
que ha sonado y que suena entre mil hermosas melodías,
por lo que a mi alma siempre de ese incienso llena y aroma,
de esos nocturnos de Fréderick Chopin que suenan de su alma tranquila,
el compositor que llenó en ese tiempo de dulzuras en Polonia,
y que deja a mí ahora sus piezas que disfruto tocando en mi clima,
por ser tanta la belleza de su poesía y nobleza de sus obras,
que no se apartará de mis versos y ni de mi rima,
que redacta un lirismo donde se centran regodeos y zozobras.
así como en su música de lo que trata una melodía,
que puede hablar en alma humana de lo que llora,
o de lo que ríe y siente respecto a su crianza hasta su recóndita alegría.

Estudiaré música y cantaré a ese amor como si cantara a Dios,
ahí me veréis arrodillado ante vuestro cielo,
cantándoos por dentro de ese sumiso e indecible amor,
como en violines, clarinetes y chelos,
ellos ahí dándome el aliento de dirigiros como director,
como protector de su entonada de encuentro,
hacia un mundo de mis ojos sin decir adiós,
porque ahí estaré música amada dirigiendo,
ahí estaré a vosotros haciendo sonar de pasión,
ahí sintiendo esa música noble de lo tierno,
palpitando la música de aquellos compositores del tiempo anterior,
y no dejando de vivir en ese tabernáculo o templo,
lo cual es para mí la música sacra de lo soñador,
y que vive en ese ambiente siempre escuchando alegrías y lamentos,
y que me hará recordar a lo que vive mi ser luchador,
que ve y siente que todo ese mundo acariciaré con sueño
porque es lo que más ama en su interior,
interior el cual ve solo que al gran universo,
tan solo que entre estrellas y galaxias de iluminación,
solo que ante su pasión tan pequeño,
pequeño que no se llega a comparar a su inmensidad de mí amor,
así lo es entre estos dóciles versos,
más inmenso que la inmensidad es mi inspiración.
Pero jamás olvidaré o abandonaré la esperanza de mis anhelos,
como el que eres vos mi eterno ser esbelto,
ahí estaré esperándoos a que me consumáis,
ahí para que me beséis y me deis vuestro cuerpo,
amor y ternura si aún ahí a mí me amáis,
entonces me miraréis y me tocaréis con sentimiento,
y mi alma al cielo saltará con mi música,
amaré hasta no más poder en acariciarte mi osa que quiero,
si aún me querréis ahí entre la vida os daré dulzura,
nada os aseguro que os faltará mi visión del futuro que deseo,
para viviros a vuestro lado y sentir la vida contigo musa,
¡Ay sí que bien fuese sentiros ante un amor que espero!,
solo así mi promesa de ser músico y del amor se cumplirá,
y de esperanza lo aseguro que así florecerá de lo bueno,
y mi alma tendréis y acariciaréis como antes de paz
ya más nada puedo decir solo que vivir así,
sí así debe ser, espero que Dios me escuche,
y me pueda mandar al amor que espero junto a ti,
y así mi alma, mi vida y mi pasión serán beatitudes,
qué hermoso fuese y hasta lágrimas caen a mi verso,
por ser tanto la tristeza de esta esperanza sin certitudes,
solo que centrando el amor que eres vos de mi sentimiento,
a pesar de vuestros defectos espero rozar y amarte en el futuro,
vivir ahí junto a vos con violines y violonchelos,
así como lo habíamos soñado en el mundo,
tocando en un concierto piano ante vuestro ojos bellos,
dándome vos la inspiración y vida del amor,
y que ahora solo sé que estaré en este país para verte de nuevo,
y es lo que quizás me hace feliz ante la fe de tu corazón.
O dirigiendo en un concierto las voces de un canto que en sueño elevo,
y escuchándote ahí solo que a tú voz,
o como os decía antes cuando os tenía en mi momento de longevo,
¡qué bello cantáis así como un ruiseñor!,
son solo de la historia lo que vivimos recuerdos,
ahora solo queda en mi existencia respirar mi olor,
y no respirar otro perfume sino mi verbo,
ahí está mi esencia hasta ser lo que espero yo,
y de ahí iré y os encontraré y os daré mi fuego,
y que ahí solo os quemará para renovarte en mi pasión,
podrán existir pero no en el sentir del apego,
así será y viviré hasta volveros a veros amor.

Arie sono il mio unico amore.

Dio il nostro amore fiorirà ogni giorno,
per sempre se facciamo bene i peccati
e così dal suo regno ci manderà il suo santo amore.
Bisogna camminare sia sulle sue tracce perché è il nostro aiuto,
So che prima su questa scala non ha chiesto questa tenerezza.
Ma io amo quel corpo che mi dà allentato.
Io parto il Signore mio Dio,
Te lo chiedo qui in questo documento per favore.
Io vivo da solo nei loro occhi e la pelle d'amore,
Non voglio perdere solo l'amore senza dolore
forse questi sono i conflitti di affetto,
quando una casa non molto tempo fa per noi, per formare,
come nulla nei giorni della gara,
e voglio solo vivere con lei e la sua dipendenza dolce.
Anche la mia anima da sola nella vita che ama
tanto che le galassie stesse al di là.
Se mi date che anela ad essere con la passione più ricercati
e un uomo con una bella signora,
lei è l'unico campo da dandy,
la sua figura mi ha dato più di tutte queste parole
di amare solo il bene della mia fortuna.
Non ho mai fatto scrivere poesie e immerso sentire l'amore;
Pensavo che prima non aveva intenzione di sentire,
ma è così enorme esplosione
come un vulcano per il suo essere di gelsomino.
L'ascolto di scrivere la consolazione tre amore,
composto da romantico di Franz Liszt,
e in esso si vedrà corte del mio cuore,
c'è in quei toni che suonano con me
così eufonia di intonazione.
Ecco come è bella, è come lei,
e così pieno di magia e il sapore della passione
solo i suoni e sogni al mio cuore sacro
che ti amerà per sempre nella vita di Fortunio,
e perché noi partner e perché ci sentiamo amore profondo.
La parola amore andare al regno di Dio,
ma la nostra va oltre il suo cielo puro,
e perché è lui che ci aiuterà a crescere, senza rabbia,

perché l'amore eterno come pulito,
Ho fiducia che sarà quel santuario,
Ho fede nel suo amore e nella sua esistenza,
Ho fede in Dio per aiutarci a salvare
e siate certi che ti amo perché sei la mia vita,
hai pensato di cielo come una goccia di pioggia,
che ha riempito la mia anima con tenerezza di quell'acqua,
inondato il mio cuore a scrivere questi versi,
Io vivo in questa sera di dolcezza,
perché sei tu scrivendo dal mio cuore tutto il sincero,
Nient'altro che questo, mi sento,
motivo per cui ho chiesto a nessuno di Dio di darmi ciò che più desidero,
e non soffrire con me perché io do il mio cuore al fuoco
che brucia al sole stesso come allegato,
e perché questo rapporto non è un gioco
solo più vero di quello che ha avuto sul mio cuore
pulsante della dolce in amore e sentimento,
poi perché abbiamo che,
che cosa è il matrimonio sacro e divino
anelli collegati tra loro i due senza soffrire.
Da cosa sia l'amore e vi amo più di uno e amerà te,
e questo è quello che sento per te il mio angelo il mio respiro.
A volte mi manca il tuo profumo dei tuoi capelli,
A volte voglio dimenticare questo mondo,
e solo vivere al tuo fianco amarti alla gara d'appalto,
ed essere felici i due dell'eternità,
e non l'inferno, ma un cielo
vivere in modo che il mio Arias della mia poesia,
e di amare così tanto la mia stella,
è lei che dà queste melodie lettere,
Arie e perché si sono magici che amo di gioia,
Ora io dico addio e non dimenticate che io amo il mio orso.