La lidia al amor
Lorja Deus
Ternura de amores perseguidos 10
que tanto anhelan divina Helena…
y estáis en mis brazos acogidos
donde del hado aparté tu pena.
Helena
Misterioso hombre en lidia llegaste,
y debidamente en mi peligro,
en varios días me conquistaste,
y de ti ni rechiflada emigro.
Lorja Deus
Así es mujer que pude alcanzar…
donde la noche fue más radiante,
así como vos y yo al besar
de rociados labios tan fragantes.
Helena
¿Tan divertido eres vos amor?,
que me hacéis recordar ese instante,
y hoy vestida del perfume olor
proviene de tu boca matante.
Lorja Deus
Dueño de cada corpúsculo soy,
lindeza dama sois mi amor tierno,
nadie, ni Dios porque sólo estoy
para amaros, en lo sempiterno,
Helena
Y acobijada en tu desnudez
dormida en vuestro exquisito pecho,
y endulzar nuestra enlazada tez
en la noche con flores en lecho.
Lorja Deus
¡Vaya vida la que producimos!
y donde antes ni esto conciliábamos,
más nota solitaria nos vimos
pero al amor antes implorábamos,
pero ella cantó y concebimos
la obra musical que buscábamos.
Helena
Así es muy solos nos conocimos
a pesar de mis admiradores,
pero vos dio la pasión y sentimos
no como aquellos copuladores.
Así me fijé en ti Lorja Deus,
con esa bondad dócil de hablar,
y luchador como el mismo Zeus
por Hera me pudiste enamorar.
Lorja Deus
Así he nacido y para ser vuestro,
vuestro en día y noche bella mía,
soy todo aquel rapsoda épico estro
que por ti mucho consumiría.
Helena
Gracias por ser mío solamente,
¡mi carne, más mi vida, es vuestra!.
Rendida, arrullada honestamente
a esta adhesión que bien me secuestra.
Lorja Deus
Así es nuestra vehemente aria
que explayamos tan internamente,
una vida así extraordinaria
vos y yo de amor intensamente.
La vida de un hombre que se enfrentó ante muchos felones terribles que querían obtener a esta hermosura de mujer; pero no pudieron porque este caballero con su buen encanto de hombre juvenil tuvo la fortuna, inacabable de su corazón, pudo concebir lo más predilecto que la misma afrodita había dicho la más hermosa de la beldad y cantada por las musas… En su relato de la charla ellos mismos dan sus arias en versos geniales, un vocabulario tan entregado y donde cuentan cómo fue su inicio, y que esperaban tal unión de milagro en sus vidas para tener lo que jamás creían en parte como el amor tan bondadoso.
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